LA CABAÑA

Abro mis ojos lentamente, ¿Dónde es esto? – miro para todos los lados, me doy cuenta que estoy en la cabaña, me retiro la sabana, y me encuentro en ropa interior. – enseguida se me viene la mente Gustavo- me levanto, estoy como si me hubiera pegado un rasca

. Busco ropa en armario, bajo las escaleras con rabia, me lo encuentro en la cocina, me le lanzo encina y lo tomo a puño

– qué te pasa, que hago a aquí – me mira y se ríe tratándome de abrazar.

 - amor cálmate, vamos a pasar un tiempo aquí

- ¿Qué? ¿Cómo que un tiempo? Le grito. Me jala del brazo llevándome al sofá y tirarme ahí.

 - teme calmas – me dice con rabia

- ¿queme calme? ¿estás loco? se mete las manos en sus bolsillos me mira serio y empieza a caminar de un lado a otro agarrándose el cabello.

 – lo siento Vicky, no me dejas opciones. – lo miro y me siento

- no, no y no las cosas no pueden ser así, nos has querido aceptar que esto se acabó.

 – se agacha al frente mío – no mi amor esto no se ha cavado – yo te amo – lo empujo, me paro del sofá voy directo a la puerta

– pues yo ya no te amo – le digo

él se para de un solo salto y corre hacia mí, atrapándome, me voltea para mirarme a los ojos.

- ¿qué digites?

– lo que escuchaste – me suelta y grita

-  mentirosa.

-  Gustavo ya basta déjame en paz – me le paro de frente – tienes una mujer que te dará un hijo, debes ver por él. – yo también tengo alguien, se me sale decirle pensando que el entendería, pero lo que hice fue grabar las cosa – saco la mano y me  abofeteo - temblaba de la rabia y se fue a la habitación.

Me senté en el sofá y metí mi cara en mis manos y no puede hacer más nada que llorar.

Fui a la habitación para buscar mi móvil, ahí estaba acostado mirando para el techo, lo ignore y trate de buscar mi móvil – no lo encontré

– Gustavo mi móvil donde está.

 – para que lo quieres

 - ¿pues para que será? Necesito llamar a mi mamá, debe estar preocupada porque no he llegado. Me mira, luego cambia la mirada y no me responde.

Estiro mi mano. -  dame mi móvil – me mira y se ríe-  ¿Cuál es la gracia?.

-  Ven….

- no…..-

- Dime que quieres –porque te comportas así, ya hace nueve meses que nos divorciamos - separa de la cama y me abraza

– no amor yo quiero que volvamos, que formemos la familia que éramos. 

- jajajajjaa que ridículo, después de que matas el tigre le huyes al cuero, eso estás haciendo con esa mujer, acabaste con esta familia y ahora pretendes ¿que yo te perdone? Que farsista eres.

Salgo de habitación y me encierro en otra.

Estuve encerrada y no a comer en todo el día, pase la noche sin poder dormir de pensar en mi familia,  ya mama debió haber preguntado por mí, hice el deber y me quedé dormida.

Despierto, salgo de la habitación, y no encuentro a Gustavo por ningún lado, voy a la puerta y me encuentro que esta con seguro

-"Diablos" este hombre está decidido a dejarme en cerrada. –ash- golpeo la puerta con ira. Trato de comer porque no gano nada, en dejarlo de hacerlo.

RELATA < Raquel>

Paso la noche y nada que mi hija aparece, llamo a Suchy y ella me dice que la dejaron en la oficina, reportamos a la policía, pero nos dicen que toca esperar a las 72 horas, estoy que me vuelvo loca, le pregunto a la familia de Gustavo y nada saben de ella.

me comunico con él y no ha visto desde hace cinco meses. – suena el timbre y van llegando todos.

– señora Raquel – que ha sabido.

- nada no sé qué hacer, nadie da razón - Suchy no entiendo que le paso a Victoria

– tranquila señora Santorys, yo me voy a encargar de averiguar –  me apoya Alex, gracias hijo.

Llego la noche y sentí que abrieron la puerta principal, me asome ahí estaba el señor Torrente.

 –hola princesa como la pasaste ¿hoy? Me cruzo de brazo y lo miro.

  me rio y muevo la cabeza de un lado a otro

– ¿tú qué crees? Me ves haciendo ¿fiesta?

Llega hasta donde estoy.

 – te tengo un trato amor – ven, me toma de la mano y me lleva a su habitación, me braza y me besa, pero no correspondo. Traje un trato

- ¿Qué dice el trato?

-  Que no te iras del país, regresaras a la casa, compartiremos todo como antes.

- Jajajajjaa me carcajeo – ahora sí que estás loco – pretende que yo lleve una vida a tu parecer.

 cuando me entrega los papeles, se los rompo en la cara – el me jala y me lanza a la cama.

 – suéltame – le grito