La desesperación del Alfa.

Detras de la ventana

Cuando era niña, corria por el bosque mientras sentia el aire en mi cara, perfumado con humedad y el delicioso pino. Justo ahora, mientras miro por la ventana creo poder sentir la frezcura del aire.

Solo quiero sentir el frio de esos dias.

-¿Ya terminaste de soñar?- Mi prima Mary, sentada junto a mi se rie de mi cara torturada.- No, no puedes regresar a la universidad y avandonarnos de nuevo.

Me rio, realmente la extrañaba. A penas puedo creer que este sentada en su auto rumbo a la que fue mi casa.

-jajaja realmente tengo muchas ganas de ver a mis papas, los extraño. Aunque hace un chingo de calor.

Estabamos a 29 grados y para mi eso ya era mucho, me encantaba el sol, sin embargo tenia que haber un delicioso viento fresco para que pudiera disfrutar el dia. Pero hoy, el aire de la ciudad se sentia estatico, el sol se refleja en el asfalto y sudaba como si no hubiera un mañana. El trafico avanzaba lento y nosotras cantabamos a todo pulmon. Extrañaba tanto esta sensacion de compañerismo que me relaje y disfrute el viaje.

-Mirame- Escuche una voz masculina y levante la mirada.

-¿Oiste eso?- Mi prima seguia cantando y no me presto atencion, solo me miro y se giro para gritarle a otro auto. Olvide por un momento lo que escuche y le segui la corriente. Grite junto con ella a un señor que estaba estacionado en doble fila y seguimos nuestro camino. Al llegar a casa salude a toda mi familia con gran alegria y disfrutamos una deliciosa comida que despues se transformo en cena y asi hasta que cada uno se fue a su casa. 

-Creo que ya me voy a dormir, ma'.- Mi mama era una mujer de 62 años con cabello canoso y un cuerpo pequeñito, tenia una sonrisa calida y un gran corazon. Mi padre murio 2 años antes y ella se habia quedado sola en la casa sin embargo, apreciaba su intimidad asi que yo era una especie de viento fresco para ella. Me sonrio con amor y me dio un gran abrazo, nos despedimos y yo fui a tomar un baño en mi cuarto. 

Me encontraba desempacando cuando un ruido fuera de la ventana llamo mi atencion. Cuando recorri un poco la cortina me encontre con un lobo enorme de ojos verdes, me quede ten sorprendida que ni siquiera reaccione cuando camino hacia mi ventana. Realmente era un magnifico ejemplar. Mi recamara estaba en el primer piso y tenia un ventanal por lo que podia apreciarlo completamente, caminaba por el jardin sin ninguna preocupacion, sino hubiera sabido que era imposible hubiera jurado que veia curiosidad en sus ojos. Me quede quieta, solo observaba sus movimientos cuando un movimiento nos sobresalto a ambos, un gato habia brincado a la ventana del baño y el lobo despues de gruñirle salto la barda de mas de 2 metros. En mi boca se dibujo una sonrisa sutil hasta que entendi que en mi patio, a no mas de 4 metros de mi ventana habia estado un maldito lobo gris enorme.

Me sente en la cama sorprendida

-No hay lobos en esta parte del pais... o si?- Dije en voz alta y me lance directamente a buscar en internet.

 




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