Cap. 21 ¿Lucía?

Nilak, Alaska. Octubre, 2007

Liam, Ilian y Eddy habían estado atendiendo a los heridos, pero aparte de que había muchos, la gran mayoría también estaba sufriendo diversos estados de shock, no solo por el traumático momento que acababan de vivir, sino que por muy asustados o adoloridos que estuviesen, muchos habían tenido oportunidad de notar la extraña forma en la que habían llegado a donde estaban, de manera que Liam estaba haciendo su mejor esfuerzo con aquella crisis colectiva.

Aunque Ilian se moría por hacer muchas preguntas, estaban en verdad atareados con los heridos. Eddy tuvo que dejar a Ilasiak para ocuparse, pues si seguía allí iba a derrumbarse él, ya que era poco o nada lo que podía hacer él por Nivi, de modo que fue a ayudar en aquello para lo que sí estaba preparado y que mantendría su mente ocupada.

Juliet se había acercado varias veces a donde habían caído Iván y Radek, pero ellos, y como era evidente, estaban curándose por sí solos y mucho más rápido que los demás, de modo que fuera de acercarse cada poco tiempo, nadie tenía que hacer nada por ellos.

El primero en recuperar la consciencia fue Radek, y no había despertado de mejor humor como pudo comprobar Juliet.

• ¿Qué demonios…?
• Ey – intentó ella al verlo incorporarse en forma violenta, pero él la miró con fastidio
• En verdad que mi suerte es asquerosa si cada vez que despierto, lo primero que veo es a ti, niña
• ¡July!

El grito de Eddy salvó a Radek de las nada caritativas intensiones de Juliet, aunque ella no podía hacerle nada físicamente, y en realidad de ninguna manera, pues aquel odioso sujeto no parecía susceptible a nada y eso incluía cualquier discurso por desagradable que este fuese, porque él lo era mucho más.

• No me grites, Eddy o… - comenzó ella pagando su ira con él, pero se detuvo al verlo – ¿Qué sucede?
• Ila nos necesita – dijo comenzando a tirar de ella
• ¿Está aquí? – preguntó, pues no lo había visto – ¿Está herido?
• Poco, pero Nivi…
• ¿Nivi, qué?
• Está… muriendo

Aunque Juliet no era del tipo nervioso, en ese momento sintió que las piernas le fallaban, y de hecho así había sido, y fue la proverbial velocidad de Radek la que evitó que cayera.

• Mujeres – dijo con el habitual tono antipático

La colocó en brazos de Eddy, aunque en realidad Juliet no había perdido el sentido, y después se alejó. Sin embargo, descubrirían que el infeliz aquel era tremendamente insoportable, pero parecía imposibilitado para permanecer indiferente al dolor ajeno, porque se había ido derecho hacia donde estaban los Paulusik.

• A un lado – dijo apartando a Liam con escasa ceremonia, pues sus buenas intenciones no se extendían a un mejor trato

Ilian había comenzado a protestar, pero él la ignoró olímpicamente, así que lo vieron arrodillarse al lado de Nivi, cerrar los ojos, extender sus manos y comenzar a pasarlas a pocos centímetros del lastimado cuerpo de la chica mientras murmuraba palabras desconocidas para los presentes.

Eddy y Juliet que se habían acercado, habían sujetado al destrozado Ilasiak mientras que Ilian y Liam miraban con incredulidad lo que estaba sucediendo ante sus ojos. Lo que primero había notado Ilian, era que, o bien a uno de los aparatos que había llevado Eddy se le estaba agotando la batería, o se había descompuesto, pues los signos vitales de Nivi habían comenzado a estabilizarse. Y si lo anterior no era suficiente, las horrorosas heridas habían comenzado un lento proceso de cambio.

• No-es-po-si-ble – silabeó Ilian en apenas un murmullo
• Siempre te he dicho que…
• No – interrumpió ella a Liam – No se te ocurra decirlo

Mientras esto sucedía, Eddy, que podía ser muchas cosas, pero idiota no era una de ellas, decidió que era un mal asunto que los demás notaran lo que estaba sucediendo, porque estaban lejos de poder dar una explicación medianamente aceptable, de manera que sacudió a Juliet.

• July – pero como ella tenía los ojos clavados en Nivi, insistió – ¡July!
• ¿Estás viendo…?
• No interesa lo que estemos viendo nosotros, y lo importante es que no lo vea nadie más

Aunque ella no lo entendió de forma inmediata, igual fue con él para intentar distraer a los que podían moverse y miraban hacia el grupo que se había formado alrededor de los Paulusik. Sin embargo, Juliet había corrido dejando a Eddy cuando vio que Iván comenzaba a moverse.

• ¿Iván? – dijo

Aunque a él no lo gritó como a Radek cuando intentó incorporarse, sí le colocó las manos en el pecho.

• ¿Señorita Juliet?
• Hola – le dijo ella mientras él miraba a su alrededor
• Creo que hemos tenido un día algo entretenido

Juliet sintió el incontenible deseo de reír, pues calificar a aquel, de día entretenido, era un disparate colosal. No obstante, cuando iba a hablar, Iván se incorporó del todo y ella casi se cae.

• ¡Radek!
• Calma, hombre. El tipo está bien, y aunque no es simpático ni de forma lejana, al menos parece tener algo parecido a…
• Señorita Juliet – la interrumpió, pues la paciencia de Iván nunca había dado para mucho
• Está por allá – dijo ella señalando hacia algún  lugar por detrás de ellos mientras lo guiaba hacia allá – y aunque no lo habría creído posible, está ayudando a Nivi