De los cinco nuevos nyas, la más nerviosa era Nivi, algo que si bien ni Iván ni Radek sabían, venía especificado en el completísimo informe que había elaborado el grupo de Yves; de modo que Haliq pidió hablar con ambos levjaners, porque estando en conocimiento de lo anterior, sabía que aquel podía ser un caso difícil.
Iván por su parte casi nunca hacía aquella pregunta, sino que se iba derecho a averiguarlo por sus propios medios, y fue quien contestó.
Radek no estaba en la misma situación de Lucien, es decir, que abandonase un recinto después de decir algo que o bien lo afectase emocionalmente, o simplemente le produjera fastidio, sino que una vez que decía lo que le parecía o cuando pensaba que nada más había por decir o escuchar, se marchaba.
Como Haliq los conocía bien a todos, no insistió, pero sí se propuso estar atento, porque los nyas en general eran su responsabilidad.
Iván había ido a ver Nivi solo una vez, y solo porque Radek le había dicho que el golpe que la había matado, lo había recibido en la cabeza, pero una vez que se aseguró de que el cerebro de la chica, al menos en términos anatómicos, se recuperaba sin problemas, solo restaba esperar a que recuperase la consciencia y evaluar el estado de su psiquis. En los casos de Liam y Eddy, sí había ido a verlos en un par de ocasiones después de que despertasen y recibiesen la información, pero luego fueron trasladados al Valkinka y solo recibía los informes diarios que le llevaba un havarik al que le había asignado aquella tarea.
De acuerdo a los mencionados informes, ambos evolucionaban bien; Liam hablaba mucho con los lijeniks, pero más que todo de medicina en general más que de su nueva condición, algo que sorprendió poco a Iván, pues con seguridad Liam no habría tenido mucho tiempo para pensar en su situación distraído como sin duda estaría escuchando los avances médicos de los que disponían los devrigs. El caso de Eddy lo sorprendió menos aún, pues el havarik le había dicho que era un joven muy simpático y hablador, que ya al día siguiente de estar en el Valkinka, parecía conocer a todo el mundo y se metía con todos sin importar si eran nyas, lijeniks o miembros del Arkel, y en realidad éstos últimos ya comenzaban a lamentar algo que antes encontraban casi una suerte como era estar a cargo de la seguridad de aquel tranquilo lugar, porque era a ellos a quienes más perseguía y los llevaba locos con tantas preguntas. Así que por lo anterior, el segundo día del año cuando se presentó el havarik a una hora desusada, y cuando Iván estaba a punto de golpear a los veldekys por la demora en la recuperación de las Lisieux, quien casi se rifa el puñetazo fue el pobre chico.
Como ya se dijo, Iván nunca preguntaba nada, pero estando del humor que estaba, lo hizo y el chico casi echa a correr de vuelta.
Si Iván no hubiese estado tan alterado, habría podido reír, porque le costaba poco imaginar por qué Andrei Kovrov quería deshacerse de Eddy, aunque el tiempo que solía pasar un nya en adaptación primaria era superior al que llevaba el chico en el Valkinka, Iván estaba seguro que solo por no escucharlo, cualquiera estaría dispuesto desde enviarlo a Siberia hasta cortarle la cabeza. Sin embargo, sabiendo como sabía Kovrov que aquellos chicos interesaban a Iván, estaba siendo delicado en su mensaje.
Iván elevó las cejas, pues habiendo permanecido tanto tiempo fuera de su mundo y de cualquiera en realidad, no estaba al tanto de que Zsiga formaba parte del grupo de trabajo de Alexander, así que para él, aquello de que Zsiga fuese un sujeto ocupado, no le cuadraba para nada, y de hecho, ni siquiera se había molestado en averiguar que hacían los Varhidi en el lugar de los hechos y reaccionó en consecuencia.
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Editado: 13.07.2022