Cap. 13 Reuniones

Iziaslav había escuchado en silencio la explicación de Darko y de Kireg, pero mientras lo hacía, recordó a un grupo específico: la Guardia Varega, así que interrumpió a Kireg que era quien estaba hablando en ese momento, para preguntarle si se trataba de algo así.
- No exactamente —contestó el LL —la guardia varega fue contratada por Basilio II debido a que no confiaba en su propia guardia bizantina, de modo que, si bien estos guerreros eran muy fieles, lo eran al emperador, no al imperio
Como Iziaslav compuso expresión de incomprensión, pues a él seguía pareciéndole lo mismo, Darko retomó la explicación, pero fue obvio para todos, que la ira de Iziaslav iba en aumento.
- De manera que, un mercenario, o grupo de ellos, son fieles a una sola cosa. El dinero —concluyó
La ira de Iziaslav alcanzó niveles apocalípticos, y aunque todos lo notaron, lo que no entendían muy bien era por qué exactamente, pero no demorarían en enterarse.
- ¡¿Cómo permitieron que sucediese esto?! —vociferó
Iyul y Janos, que eran los que estaban más cerca de él, se apartaron tapándose los oídos, mientras que los demás, y a pesar de que estaban más retirados, experimentaron el odioso malestar, y a quien le iría peor sería a Dylan que también estaba muy cerca de él.
Todos los presentes habían visto enfurecer al individuo en cuestión en innumerables ocasiones, sin embargo, de Dylan para abajo, y aunque también lo habían escuchado gritar en algunas ocasiones, nunca de aquella manera.
Los LL por su parte, lo que pensaron fue que estaban en muchos problemas, sin importar si entendían o no el motivo para tanta ira, y que con seguridad volverían al calabozo a continuación.
Iyul y Lucien casi pasaron por alto los gritos de su padre que habían continuado, pues fueron lanzados a su infancia y a las muchas veces que habían presenciado un ataque de furia de su progenitor, y aunque Yves, por ejemplo, habiendo pertenecido al grupo más problemático de la tribu, también lo había hecho, no eran los casos de Itlar e Yvaylo que habían nacido con posterioridad.
No obstante, a Lucien nunca le duraba mucho el silencio, y menos en las presentes circunstancias en las que Dylan parecía verdaderamente descompuesto.
Eran tan pocas las veces que Lucien se dirigía a él llamándolo padre, y menos aún en su idioma, que Iziaslav hizo silencio y lo miró.
- Estás haciéndole daño —agregó en un tono más decente señalando a Dylan y con cierta incomodidad, quizá al notar lo que había dicho
Aunque los demás agradecieron la intervención de Lucien, enseguida pensarían que se habían apresurado a alegrarse, porque Iziaslav se giró de nuevo y caminó hacia el grupo de los LL.
- ¿Qué se supone que estaban haciendo? —pero como ninguno dijo nada, posiblemente porque no entendían a qué se refería, agregó —Contéstame, infeliz —ordenó sacudiendo a Darko que tuvo la dudosa suerte de ser el más cercano
- Queremos hacerlo —intervino Anatoly con su voz serena —pero no sabemos a qué te refieres con exactitud
Iziaslav soltó a Darko, se mesó el cabello como si él mismo intentase serenarse, algo que seguramente consiguió gracias a la decidida ayuda de los Saint-Claire, Yves, e Iván.
- Lo que quiero saber es —dijo después de unos segundos —¿Cómo permitieron que grupos así, no solo se formaran, sino que aumentaran?
- Sarì —dijo Yves y más de la mitad de los presentes habrían querido dejarlo mudo por unas horas, pero como solo desearlo no lo volvía un hecho, él continuó —Lamentablemente tú no estabas aquí a principios del siglo pasado, y es algo por lo que quizá podrías sentirte agradecido de no ser por…
- ¡Ynli!
- Bien, el asunto es que los conflictos bélicos nos mantuvieron muy ocupados y…
- Pero eso fue hace mucho, nekasny —lo interrumpió él
- Sí y no —dijo ganándose una mirada que no auguraba nada bueno —En mi opinión, seguimos inmersos en lo mismo. Después de la Gran Guerra todos pensaron que las cosas volvían a la normalidad, pero no era así, algo que quedó demostrado en un cortísimo tiempo, y cuando finalizó la segunda contienda, y como dije en ese entonces, las potencias aliadas puede que pensaran que habían ganado la guerra, pero en realidad perdieron la paz, porque después de eso lo que siguió fue un tenso período de conflicto silencioso con puntos o zonas más críticas y problemáticas como tuviste oportunidad de atestiguar poco antes del regreso de Iván, Radek y Lucía —hizo una pequeña pausa y continuó —No es mi intención evadir nuestra responsabilidad en velar por la seguridad general y lo hacemos hasta donde nos es posible, y más que todo, evitando que nuestra propia gente pueda inmiscuirse en donde no debe complicando una situación ya muy complicada, pero te aseguro que también hacemos lo que podemos para evitar que se vuelva a vivir un período tan catastrófico, ya que no hemos olvidado que esas terribles confrontaciones de guerra abierta, dejaron un saldo de entre 15 y 23 millones de muertos la primera, y alrededor de 80 millones la segunda