Cap. 29 Radek

Ya era muy tarde cuando Istvan se frotó los ojos con cansancio y pensó con desánimo que ni siquiera había visto los pergaminos con las órdenes de indulto o salida por cumplimiento de condena que le había enviado Sergei, así que extendió la mano hacia donde reposaba el fajo de los mismos para comenzar, y pensó que con suerte, podría terminar de firmarlos esa noche y enviárselos a Sergei en la mañana, pero estaba por comenzar cuando entraron los LL.

• ¿Sker advajèvka? – preguntó deseando que no se tratase de alguna otra catástrofe, y si pensó eso, fue porque no vio a Iván
• Queríamos plantearte algo, Istvan – dijo Darko
• De acuerdo, los escucho
• Estuvimos discutiendo el nuevo estado de cosas y pensamos que deberíamos intentar hacer volver a Radek
• ¿Por qué? – preguntó con extrañeza

La extrañeza de Istvan obedecía entre otras cosas, a que una vez que Radek había desaparecido lo habían dejado en paz. Él no se había marchado exactamente después de la muerte de Mikha como le había dicho Iyul a Dylan y a Alexander, porque después de ésta, Radek había entrado en desesperación, y después de pedirle a Iziaslav que lo matase, pues en su opinión aquello era su culpa, y si bien efectivamente Iziaslav estuvo a punto de hacerlo, afortunadamente entendió que aquello habría sido tan injusto como el encierro de Aleksèi, así que le ordenó marcharse. Sin embargo, Radek era en verdad otra versión de Mikha y continuaría insistiendo. Sabía que con Andrei no tenía ninguna oportunidad, de modo que lo intentó con Iyul, pero lógicamente él también lo despachó, así que el loco aquel se fue a buscar a Lucien, pero si ninguno de los anteriores estaba dispuesto, Lucien mucho menos, pues no solo sabía lo mismo que todo el mundo, es decir, que aquel individuo había sido la otra mitad de Mikha, sino que Radek había sido una figura muy presente en la infancia y problemática adolescencia de Lucien, pues siendo que se suponía que Mikha debía cuidarlo, Radek también, de modo que éste perdió miserablemente su tiempo y casi habría podido terminar, si no consiguiendo lo que quería, si encerrado en Zatvor, porque molestó tanto a Lucien que este lo apaleó y Radek respondió, tal vez con la no tan secreta intención de que Lucien en verdad lo despachase, pero como no fue así y donde terminó fue en el Haigala, los levjaners le pidieron a Iván que se hiciese cargo o el desquiciado aquel en verdad conseguiría que alguien lo matase.

Si bien Iván había conseguido un mediano éxito, porque Radek se tranquilizó, lo que no pudo suprimir de ninguna manera fue la culpa que sentía, pues aquel era un sentimiento y no un simple pensamiento. No obstante, no podían tenerlo encerrado indefinidamente, así que cuando le dijeron que podía volver a casa, Radek no dijo nada y abandonó el recinto, pero lo que no hizo ni en ese momento ni nunca más, fue volver a casa.

Inicialmente no lo notaron, pero al hacerlo, decidieron buscarlo, sin embargo, Iván y si bien no se opuso, recurrió a Yves por dos razones igualmente buenas, la primera, que Yves había conocido bien tanto a Mikha como a Radek, y la segunda, porque era un excelente rastreador y a Iván le parecía una necedad hacer que Istval dejase lo que hacía para que iniciase aquella búsqueda, y así se lo hizo saber a Istvan, de  modo que ambos fueron a hablar con Yves, pero no era que aquel fuese especialmente fácil tampoco.

• No hay necesidad de buscarlo, lavny, porque no está perdido, solo no quiere regresar a un lugar donde todo y todos le recordaran a Mikha
• ¿Pero tú sabes dónde está?

Yves no contestó de forma inmediata y de hecho tardó algo en siquiera abrir los ojos, algo que no había hecho desde que ellos se presentaron, pero finalmente lo hizo y lo miró.

• Puede ser
• Yves
• Tampoco quiere verme a mí

Después de eso, y aunque Andrei había insistido en que había que buscarlo y lo habían hecho, cada vez que llegaban a donde se suponía que estaba, él ya se había marchado, de modo que con el tiempo dejaron de buscarlo.

Istvan hizo todo este rápido repaso y volvió a mirar a los LL esperando por su respuesta, pero antes de que se la dieran, él elevó las cejas.

• No supondrán que justamente él puede saber algo de Boyko – dijo – Ese hombre intentó matarlo – agregó con cierta alteración
• Lo sabemos, syn, y no es por eso – dijo Milorad
• Si pensamos en buscarlo es por dos motivos – dijo  Darko – El primero, porque pensamos que ese rybik también podría estar en peligro, y el segundo, porque es posible que tenga una idea…
• Eso es absurdo, Darko – lo interrumpió Istvan
• ¿Qué cosa?
• Ambas cosas, porque si hasta ahora se ha mantenido con vida…
• Algo que no sabemos – dijo Iliar

Istvan pensó que eso era cierto, porque siendo que nadie había vuelto a saber de él, podía perfectamente estar muerto.

• Suponiendo que siguiera vivo, lo que con seguridad no sabrá, es nada del desgraciado que lo engendró – insistió
• Es solo una posibilidad, Istvan – dijo Aritz