Cap. 53 Atrapados

Riùrik. Octubre-Noviembre, 2006

A Kýevska le había afectado más bien poco la noticia de la muerte de Mina, o al menos no lo hizo de forma inmediata, pues su mente había estado ocupada repasando lo sucedido, razón por la cuál era que le había preguntado a Istvan quiénes, o más bien qué eran ellos, pero cuando él dio la explicación, tal y como había sido autorizado a hacerlo, misma que incluía la transformación de Mia, Kyv entró en crisis y fue necesario que Istvan llamase a Aleksèi.

• No parece que haya sido buena idea – dijo el veldeky
• Tal vez no, pero no te pones a discutir con Iziaslav

Bobby por su parte, y si bien estaba visiblemente conmocionado, no presentó el ataque de nervios que le sobrevino a Kyv, de modo que Istvan pudo ocuparse de él sin problemas, pero luego pensó que era posible que en él, solo se hubiese retrasado la reacción.

• Esto es un sueño – lo escuchó – Tiene que serlo
• Robert – dijo Istvan y él lo miró

Sin embargo, Bobby lo estaba mirando como buscando algo que se le escapaba, así que Istvan decidió que lo mejor era hacer aterrizar a aquel chico.

• No está usted soñando, Robert, y todo lo que acabo de decirle es tan cierto como lo es que está usted aquí
• No, no puede ser – insistió, y no sabía Istvan lo terco que podía ser aquel individuo – El otro día vi una película en la que unos tipos decían…

Istvan decidió que por aquel camino le iba a tomar un tiempo que no tenía, convencer al chico, de modo que se decidió por el método práctico. Corrió hacia fuera y regresó un momento después con un bisturí. Bobby no parecía haber notado que Istvan había desaparecido por unos segundos, enfrascado como estaba repasando el film que había mencionado.

• Robert, preste atención – le dijo Istvan en un tono en el que no podía ser ignorado

Cuando Bobby hizo silencio y lo miró, él se descubrió el brazo y se hizo una herida profunda de la que comenzó a brotar la sangre en cantidades alarmantes. Sin embargo, la pregunta que se formó en la cabeza de Bobby: <<¿Qué estás haciendo?>>, no tendría ocasión de formularla cuando vio que la herida comenzaba a cerrarse.

• ¿Pero… qué…?
• Todo lo que les dije es cierto, Robert

Bobby se dejó caer en un sillón cubriéndose el rostro con las manos, y, aunque Istvan fue consciente de que él seguía repitiéndose que no podía ser, no parecía cercano a una crisis nerviosa.

• Robert, hay muchas cosas que no por creerlas imposibles, lo son, y nuestro caso es una de esas

A pesar de que Istvan prestó su colaboración, pasó mucho rato antes de que la energía del chico se estabilizase, aunque su cerebro seguía repitiéndole que aquello no era posible y pronto en realidad seguiría pensando lo mismo a pesar de lo que acababa de ver.

Aleksèi la tuvo más difícil con Kyv, y aunque logró tranquilizarla, ella al igual que Bobby, seguiría pensando que aquello no era posible, pero a diferencia de él, que lo pensaba, pero no lo decía, ella sí continuaría haciéndolo y tanto el veldeky como Istvan, pensaron que posiblemente nunca lo creería, aunque en el caso de Istvan pensaría que era  mejor así, pues al fin y al cabo, en breve tendrían que borrar esa información de aquellas cabezas y tal vez la incredulidad contribuyese al trámite. A pesar de ello, como Istvan no era el jefe del Ledviacir por casualidad, decidió que antes de llevarlos con Mia, debían ser observados al menos por unas horas, así que hizo su solicitud a la DS y un momento después los chicos de la misma habían instalado un sistema de la mencionada vigilancia y había dejado a dos de sus agentes en el Haigala, apostados en la puerta del salón donde estaban los chicos, con lo que Istvan pudo marcharse tranquilo.

• Bobby, escúchame bien – dijo Kyv cuando estuvieron solos – Tenemos que salir de aquí, buscar a Mia y marcharnos
• ¡Kyv! Ni siquiera sabemos dónde demonios estamos
• Tienes razón. No sabemos quiénes son estos tipos y es posible que nos hayan mentido con respecto a la ubicación
• Kyv…
• ¿Quién demonios será Lucien? – preguntó ella, aunque ya sabía que aquel no era su nombre, sino el de su hijo, como él mismo había dicho desde el primer día – Ya me parecía extraño desde un inicio, pero…
• ¿Extraño? – preguntó él, pero ella pareció no prestarle atención y siguió hablando
• … aunque algunos piensan estúpidamente, que las organizaciones mafiosas como la rusa, italiana o japonesa son una especie de mito, o un cuento para asustar a la gente o mantener sus mentes distraídas, no lo son, existen realmente, así que Lucien, o como se llame, debe estar involucrado con alguna y ahora nosotros estamos atrapados en  donde sea que estemos
• Ese hombre dijo que estábamos en… – pero en verdad no lo recordaba
• Riùrik es un principado independiente y nunca perteneció a la URSS, como muchos de sus vecinos – comenzó Kyv, pero más como si hablara con ella misma y no con Bobby –  Además, es una nación tan neutral como Suiza
• ¿Y no te parece extraño que estando tan cerca de Rusia, no haya sido absorbida por esta en la época de la unión?
• No, porque como acabo de decir, está en la misma situación de Suiza, y a nadie le convenía anexionárselo, porque siendo tierra neutral, en su suelo podían pactarse acuerdos y cerrarse tratos en absoluto secreto, porque Riùrik no permite el intercambio de información para propósitos fiscales, así que es muy conveniente para todo el mundo – dijo y se quedó un momento pensativa – Así que es posible que por lo anterior, sí estemos en Riùrik, pero siendo que no conocemos este país, eso nos sirve más bien de poco
• No te entiendo y…
• Piensa un poco, Bobby – le dijo, y aunque el chico lo hacía, el cerebro de Kyv parecía marchar a velocidades indecentes y por caminos intransitables para los demás – Riùrik ofrece varias cosas que si bien pueden encontrarse en otros lugares, no todas juntas, como por ejemplo, lo que te dije antes en cuanto a la existencia de estrictas leyes de secreto bancario y de protección de datos personales; en el centro financiero de Lind, funcionan una indecente cantidad de empresas offshore, que podrían perfectamente pertenecer a una de las organizaciones que mencioné antes. Pero adicional a lo anterior, es posible también, que esos tales tengan propiedades inmobiliarias donde puedan retener  a las personas, lo que podría perfectamente ser nuestro caso.
• ¿Quieres decir que estamos… atrapados?
• Solo tú podrías no haberlo notado, Bobby. Claro que estamos atrapados, porque el sujeto que habló con nosotros, no dijo que podíamos irnos ¿o sí?
• No, pero tampoco dijo que no podíamos hacerlo, solo aseguró que en breve podríamos ver a Mia
• ¿Y por qué no podemos verla ahora? ¿Por qué no está aquí con nosotros?
• Bueno, por lo que… le sucedió
• ¡Ay, por favor, Bobby! No me dirás que creíste esa fantasía de los…
• Devrigs – agregó él al notar que ella no recordaba el término
• Como se llamen. Lo importante, es que esas cosas no existen