34. NECESIDAD

STUART ADAMMS SCOTT

Me siento tan mal por todo esto siento que me voy a volver loco. Primero la muerte de Renné y enterarme de la perdida de mi hijo que ni siquiera tuve oportunidad de despedirme de ellos. Ya ni siquiera estar con quién me ha servido de desfogue estos años me hace sentirme mejor creo que hoy fue todo lo contrario cuando vi el estado en que estaba mi sumisa corrió por mis venas la culpa un sentimiento que jamás me había permitido tener con ella, con la frágil Maddie y más porque entre nosotros y nuestro contrato firmado no podía haber sentimientos de por medio. Asi lo aceptamos ambos.

Pero, en verdad me desconcertó demasiado ver su cuerpo delicado con la figura frágil de una muñeca con esos morados y marcas severas de ataduras en su cuello, brazos y tobillos así como las de mordeduras en sus ricos muslos y nalgas górditas y antojables que sumando el alcohol en mi cuerpo, mi estado de ánimo y lo mucho que me prende y me encima la sumisión de ella ante mi, me desquicie totalmente perdí el control y me pase totalmente de la raya con ella y si ella lo quisiera estaría en su derecho a exigirme una indemnización por haberme sobrepasado y violar los términos de nuestro contrato.

Pero estoy totalmente seguro de que no lo hará a pesar de que ese dinero la sacaría de ese gran apuro y necesidad que la llevo a aceptar mi propuesta y por eso la admito y la respeto y es a la sumisa que me he apegado más por que ha sido la unica que a logrado satisfacer mi necesidad de someter vilmente a alguien lo soporta y tolera todo de muy buena manera a ese grado llega su sumision hacia mi y estoy seguro que ni siquiera me reclamara nada y menos me exigirá nada económico por más que lo necesite para resolver esa gran angustia que en el fondo la consume poco a poco.

Maddie, pequeña porque ahora me empieza a cubrir una sombra de inquietud por saber si estas bien, que me han hecho tú y Renné. Me han sacado de control y de mi zona de confort todas estas situaciones y si añadimos a la ecuación a Heizel.

Y ahora recuerdo esas cartas, y me pregunto por qué también le dejaría una a mi asistente. A pesar de ella no formar parte de sus herederos le dejo una carta personal no lo entiendo.