Narra Ada
Han transcurrido seis meses. Hoy es un día extraordinariamente significativo para mí, ya que estoy a punto de graduarme de la universidad. En este momento, estoy ultimando los detalles de mi vestimenta y preparándome para este evento tan importante en mi vida. Durante este tiempo, han ocurrido muchas cosas que me han transformado en numerosos aspectos. Uno de los cambios más significativos es que estoy esperando un bebé, una noticia que aún no me atrevo a compartir con Matteo. La incertidumbre también me acompaña a la hora de decírselo a mis padres y a mi hermano, aunque ellos ya sospechan algo.
Además, he recibido una invitación para asistir a una rueda de prensa, lo que añade un matiz especial a este día tan importante.
La experiencia fue asombrosa, y tuve la maravillosa oportunidad de conocer a otros periodistas, lo que me enriqueció mucho. A lo largo de este tiempo, Matteo ha estado a mi lado brindándome su apoyo incondicional, y por eso le estoy profundamente agradecida.
Después de darle los últimos retoques a mi cabello, finalmente estoy lista para salir. Tomo mi bolso y dejo mi habitación, con una mezcla de emoción y nerviosismo. Al llegar al salón, me encuentro con los hombres más importantes de mi vida. No pueden evitar mirarme con atención y asombro, mientras que mis padres y mi hermano se dirige a mí con unas palabras que hacen que este momento sea aún más especial.
Mi padre se acerca a mí y me dirige unas palabras llenas de cariño y sabiduría. Luego, con una sonrisa en el rostro, saca de su bolsillo unos pendientes que han sido elaborados con forma de corazones. Me los entrega con delicadeza, como si entregara un tesoro. En ese momento, siento una profunda gratitud y, sin dudarlo, me acerco a él y lo abrazo con fuerza, expresando así mi agradecimiento por su gesto tan significativo.
Mis padres y mi hermano comienzan a tomarme fotografías mientras Matteo me abraza con ternura. Después de la ceremonia de graduación, él me comentó que tenía algo especial para darme, pero al mirarlo, parecía que yo le estaba preguntando qué era esa sorpresa. A pesar de mi curiosidad, Matteo no me reveló nada en ese momento, así que tuve que esperar con ansias. Luego de un rato, salimos de casa y nos dirigimos a cada uno de los coches. Es evidente que yo estaré viajando con Matteo , ya que todavía no tengo mi propio coche, y él se ofrece a llevarme a la universidad.
Al llegar a la universidad, nos bajamos del coche y comenzamos a caminar hacia una imponente sala de actos. Una vez allí, saludo a mis compañeros, intercambiando sonrisas y palabras amistosas, antes de tomar asiento en nuestros lugares asignados. La atmósfera estaba llena de expectación y energía, mientras me sento
La ceremonia da inicio con los discursos de cada uno de los profesores y del director, quienes nos brindan palabras emotivas y significativas. Cada intervención está llena de recuerdos y reflexiones sobre nuestro paso por la institución, lo que hace que el ambiente sea nostálgico y especial.
Una vez que han terminado los discursos y tras recibir un mensaje personal dirigido a cada alumno, se procede a la entrega de los diplomas. Cuando escucho mi nombre, me llaman para recibir el mío. La situación no me sorprende, ya que había anticipado este momento. Sin embargo, la sensación de orgullo y satisfacción al recibir el diploma llena mi corazón de alegría.
Al verme, el director se acerca y, con una sonrisa, me felicita por mi desempeño. Luego, me solicita que comparta unas palabras con todos los presentes. En ese momento, le respondo que no tengo nada preparado para decir. Sin embargo, él me anima diciéndome que hable desde el corazón.
A continuación, se distancia de mí. Luego, tomo una respiración profunda y empiezo a hablar desde el corazón.
Me llena de orgullo estar aquí con todos ustedes en este momento tan especial de graduación. Es un logro que hemos alcanzado gracias al esfuerzo y la dedicación de cada uno de nosotros. No importa qué camino decidan tomar a partir de ahora, estoy convencida de que estará repleto de éxitos y oportunidades.
Quiero expresar mi más sincero agradecimiento a todas aquellas personas que nos han inspirado y motivado a lo largo de este camino. Esto incluye a nuestros valiosos profesores, quienes han sido una guía fundamental en nuestro aprendizaje, así como al querido director, cuyo liderazgo y apoyo han sido invaluables. No tengo las palabras adecuadas para manifestar la profundidad de mi gratitud, pero quiero mencionarles:
Gracias de corazón por el regalo invaluable de la vida y por brindarnos la oportunidad de estar presentes en un día como hoy, en el que hemos conseguido avanzar hacia nuestros sueños y metas. Sin su inagotable paciencia y su constante apoyo y motivación, nada de lo que hemos alcanzado habría sido posible. Para finalizar, me gustaría compartir con ustedes
'El mundo es de quien nace para conquistarlo y no de quien sueña que puede conquistarlo'.
Esta frase nos recuerda la importancia de la acción y la determinación en la búsqueda de nuestros objetivos.
De este modo, concluyo mi intervención y regresso a mi asiento. En ese momento, el director inicia su discurso, logrando capturar nuestra atención de inmediato.
Quiero felicitar a todos los graduados. La graduación representa, sin lugar a dudas, un gran logro en sus vidas, pero es importante recordar que aún tienen por delante numerosas experiencias significativas: metas que alcanzar, desafíos que enfrentar y oportunidades que aprovechar.
Espero que su futuro sea brillante. ¡Buena suerte, chicos!
Después de pronunciar esas palabras, me giro y me encuentro con Gianni arrodillado en el suelo, sosteniendo una caja abierta justo frente a mí. Dentro de esa caja, hay un anillo que brilla con luz propia. En ese momento, Gianni me mira a los ojos y me hace una pregunta que me llena de emoción:
- ¿Quieres pasar toda la vida conmigo y tener el honor de ser mi esposa?