La emoción la hizo dar un brinco en el asiento del copiloto, su canción estaba sonando en una emisora nunca imaginó que algo así le fuese a pasar a ella, Noa ya no tenía esperanza de lograr algo en la música.
—¡Felicidades! —exclamó Cameron acercándose a los asientos de adelante: —¡Mamoru mi amiga es famosa. —Alardeaba Cameron al callado chófer!
Él sonrió ante la picardía de la mujer de llamativo cabello —felicidades señorita, no todos tienen el privilegio de tener amigos famosos.
—Mamoru no le des más impulsos a Cameron —dijo la morena apenada—, además no soy famosa.
Cameron bufó aburrida su amiga era una aguafiestas. Noa miraba a la pelirroja haciendo una expresión de fastidio tras el espejo retrovisor —Cami quita esa cara. —Dijo la pelinegra riéndose por la infantil reacción de su amiga.
— Admite que eres una aguafiestas Nini —refutó la pelirroja—, por cierto amiga no le di las gracias a tu novio por este vestido tan lindo.
—Si, luces preciosa —respondió Noa con un tinte rosa en sus mejillas aún no se adaptaba a la relación que ella y Takeru tenian—, hoy es una noche importante firmaré un contrato Camí, me hubiera gustado que Nick estuviera aquí...
—Bueno dijo que te apoyaba pero prefería quedarse en casa, ademas está cuidando de nuestro pequeño. —Finalizó Cameron con simpleza encogiéndose de hombros.
—Hemos llegado —comentaba el chófer apagando el motor del auto, el japonés al ver el intento de Noa de bajarse se adelantó a bajarse él y abrirle la puerta—, no se moleste yo abro.
Noa rió ante la manera en la que era tratada por ese muchacho, ya era demasiado cortes con ella, ahora que Takeru era su pareja el trato era hasta seremonial, creía que estaba exagerando pero por más que le dijera a Mamoru que no era necesaria tanta cortesía el japonés parecía no escucharla.
Fuera del auto Noa y Cameron avanzaron al restaurante, en la entrada fueron recibidas por el hostess quien amablemente le pregunto, si tenían una reservación, o deseaban una mesa.
Noa iba a responder pero Cameron se adelantó dejando a su amiga con la palabra en la boca.
—Tenemos algo mejor que una reservación Evan —dijo la guapa pelirroja leyendo el nombre del hostess en su traje—, a mi amiga la espera su novio y manager para celebrar la firma de su contrato como cantante. —Alardeaba Cameron el logro de su mejor amiga.
—Felicidades señorita — el hostess miraba a la pelirroja que le regalaba una hermosa vista—, Dígame futura estrella ¿Quién es su novio para llevarla a la mesa?
—Takeru Shinomoto seguramente ya debe estar aquí.
Al escuchar el nombre del novio de la morena el hostess dejó su actitud juguetona, sabía quien era el nombrado, Shinomoto Takeru era un importante empresario japonés además era el dueño de aquel restaurante.
—Permitanme llevarlas a su mesa.
—Muchas gracias Evan. —Esta vez fue Noa quien llamó por su nombre al muchacho.
El lugar era hermoso de techos altos llenos de candelabros dorados con muchos cristales colgando de este, el hostess las llevó a una terraza el clima extrañamente era agradable esa noche, ya el invierno estaba en puertas pero hoy esa noche era perfecta y hasta la temperatura jugaba a su favor.
—Noa, Cameron pensé que ya no vendrían. —Comentaba Takeru levantándose de su asiento Kody el representante de la productora que firmaba a la morena también se puso de pie.
—Tardamos un poco disculpa...
—La espera valió la pena no te preocupes. —Susurraba Takeru al oído de Noa haciéndole sonrojar.
Movió la silla para que ella tomara asiento, la morena agradeció con una sonrisa el caballeroso gesto, también hizo lo mismo con Cameron por cortesía.
—Noa luces como toda una estrella, me cuesta creer que hace poco tuviste un hijo, mujer te ves radiante. —Halagaba Kody a su nueva promesa de la música.
—Gracias.
—Y tú pelirroja también eres hermosa —dijo Kody halagando a la acompañante de Noa, el productor conoció a Cameron en una de las pruebas de vocalización de Noa, en cuanto vió a esa escultural mujer le pedía a la cantante que invitará a su amiga en cualquier ocasión que fuese posible.
—Noa me gustaría que te dieras más a conocer linda, estoy pensando en una gira de medios en algunos estados, quizás otro país...
—Espera Kody todo esto es increíble, de verdad estoy emocionada con todo esto —era lo que algún día soñaba y ahora era posible, pero ahora estaba su pequeño hijo—. ¿Cuánto tiempo sería?
—De seis meses —respondió Kody esperando que la chica aceptara—, se que es mucho tiempo cariño pero...
—No, no perdón Kody no lo entiendes.
Sin agregar más se levantó dejando sorprendidos a todos en la mesa.
—¿Qué le ocurre? —preguntaba Kody con un dejo de molestia—, pensé que estaría brincando de alegría con esta noticia.
—Yo iré con ella, es mi amiga y...
—No quedate —dijo Takeru poniéndose de pie—, yo hablaré con ella.
Takeru se marchó dejando solos a Kody y Cameron solos, a él también le pareció extraña la reacción de la chica, Noa hablaba a cada momento de su carrera, pero también podía entender a la chica. No solo estaba pensando en ella las prioridades de su novia eran otras en concreto lo más importante para ella era su pequeño hijo Ian.
Daría cualquier cosa porque las cosas fueran diferentes, Alexander no valoró a la chica maravillosa que tenía a su lado, él tampoco lo hizo y se arrepentia de ello, luego de unos minutos de búsqueda consiguió a la morena frente a una pecera enorme con llamativos peces.
—Te encontré. —Musitó el japonés tras la pelinegra.
—Se que debes estar enojado, Kody igual de verdad estoy avergonzada habría aceptado esto pero Takeru mi hijo es muy pequeño y nuestra relación apenas y comienza...
—Noa no te preocupes yo iré a verte cada que quieras, solo serán unos meses además si Kody te ha echo esa propuesta debe tener todo preparado para que Ian esté a tu lado en este viaje.
Editado: 17.03.2024