La Dolorosa Vida De Ángel.- Ir A Otro Mundo No Es Tan Genial

CAPÍTULO 22

La dolorosa vida de Ángel.

CAPÍTULO 22

Llegamos al sector número 2.

Estamos en un parque. Crismei está convertida en hada y está dentro de mí camisa.

—Bueno, en cada sector hay un gran parque, así que supongo que ya llegamos al sector número 2.- Digo observando a mi alrededor.

—¿En dónde crees que estará el jefe?

—Supongo que en algún burdel o bar... Bueno, mejor se lo preguntamos a alguien.

—¡¡Ángel!!- Grita Nerma.

Escucho la voz de Nerma.

—¡Está aquí!- Digo preocupado.

Volteo a ver a la dirección donde escuché la voz.

—¿Eh?- Digo confundido.

Nerma se dirige a nosotros corriendo. Está usando un vestido blanco, usa un sombrero blanco y está sonriendo dulcemente. Tiene una bolsa blanca en su mano derecha, pero no creo que sea una arma.

—No veo ninguna arma... ¿Ella es un jefe?

Se para frente a nosotros.

—¿Eres un jefe?- Digo confundido.

—Sí, pero no quiero pelear contigo.- Dice sonriendo.

Saca un pequeño frasco de su bolsa y me lo muestra.

—Ya acepté mi muerte, así que no es necesario que tú y yo tengamos una pelea.

—¿A qué te refieres?

—Este pequeño frasco contenía un veneno. Hará efecto en una hora.

—¿Q-qué?- Digo nervioso.

—Estoy segura que hubiera perdido contra tí, así que... Bueno, quiero pasar mis últimos momentos con alguien muy poderoso... Quiero pasar mis últimos momentos contigo.

—¿Por qué conmigo?... Apenas me conoces.

—Siempre me han atraído los chicos fuertes, y tú eres el más fuerte que he conocido.

—Los más fuertes... Está bien... Bueno... ¿Qué piensas, Crismei?

—No creo que esté mintiendo... Está bien.- Dice Crismei.

—Bueno... ¿Qué hacemos?- Digo sonriendo nervioso.

Nerma me toma de la mano derecha.

—¡Vamos!- Dice emocionada.

-Una hora después-

Nerma y yo desayunamos juntos, paseamos por la ciudad, y... creo que me violó.

Nos encontramos con un señor que vendía pociones mágicas y Nerma le compró una, que según, servía para aumentar la energía mágica. Ella la compró para mí y yo me la tomé. Después de eso ya no recuerdo nada.

Despierto en una cama en una habitación desconocida.

—¿Eh?- Digo confundido.

Me levanto de la cama y veo a mi alrededor. No tengo camisa ni pantalones.

—¿Q-qué me pasó?

Crismei abre la puerta y entra a la habitación.

—¿Te gustó?- Dice riendo.

—¿Me gustó? ¿A qué te refieres?

—¿A qué me refiero?- Dice confundida.

Crismei se acerca a mí.

—¿N-no recuerdas lo que hiciste?

—¿Lo que hice? ¿Qué hice?

—¡Maldita seas, Nerma!- Dice enojada y golpeando el suelo con su pie derecho.

—¿Qué pasa?

—Bueno... Creo que fuiste violado.

Hay un gran silencio incómodo y mi cara se vuelve pálida.

—¡¿V-violado?!- Digo confundido y nervioso.

—Me temo que sí.

—¡¿Perdí mi virginidad por una violación?! ¡Maldita seas, Nerma! ¡¿En dónde está?!- Digo enojado.

—Ella murió... Después de... violarte, ella murió y unos sirvientes de su familia vinieron por ella. Supongo que ella tenía planeado todo desde un principio.

—Entonces... La poción no era una poción para aumentar la energía mágica, ¿Verdad?

—Me temo que no.

—Carajo, ayúdame a buscar mi ropa, tenemos que irnos.

—Sí.

Nos ponemos a buscar mi ropa y estoy quejándome.

—Maldita Nerma, me violó. Carajo, maldita... Espera... ¿Cómo lo hizo?... ¿Qué efecto tenía exactamente la poción?

—¡Encontré tú ropa y hay una nota en ella!- Dice Crismei.

Me dirijo a Crismei y me muestra la nota.

—¿Qué dice?

Crismei empieza a leer la nota.

—Ángel, lamento haberte violado, pero realmente me gustan los hombres fuertes. La poción que te dí no era para aumentar tu energía mágica, era una poción hecha con mi sangre para poder controlar tú mente y cuerpo... Con razón actuaste normal después de tomar esa poción.

—¿Para controlarme?... Esto no tiene sentido, ella podía haberme derrotado en ese instante... ¿Por qué no lo hizo?

—Tienes razón... Seguiré leyendo. Ángel, derrota a ese demonio, tú puedes, ¡Ánimo!... ¿Demonio?... Demonio... ¿Será posible qué...?

La interrumpo con un suspiro.

—Ya, no importa, vámonos. No recuerdo nada, así que básicamente soy virgen.

—Bueno, en realidad ya no...

—¡Soy virgen, ¿Entendido?!

—S-sí.

—Y no le digas a nadie lo que pasó, por favor.

—Está bien.

—Bueno, vamos por el siguiente jefe.

—¡Vamos!



#12498 en Fantasía
#17852 en Otros
#2255 en Aventura

En el texto hay: comedia, accion, isekai

Editado: 12.09.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.