Los minutos pasaban, y me encontraba aun con la vista fija en aquel libro que se ha adueñado de mis pensamientos, en estos últimos instantes.
Aquel libro en el que encontraría cosas realmente impresionantes.
En el que descubriría muchas verdades, la verdad de todo lo que esta sucediendo.
¿Algo cambiara después de leerlo? No lose, me temo que tendré que averiguarlo.
Los segundos pasaban demasiado lentos para mi gusto, mi vista se encontraba fija sobre este. Estaba segura de lo que estaba por hacer, sabia que una vez que lograra leerlo por completo nada sería lo mismo.
Absolutamente nada, todo cambiaría, incluso yo misma.
¿Cambiare para bien o para mal? Esta pregunta me aterra de tan solo pensarla, me aterra el echo de ya no ser la misma, de que todo de mi se destruya.
Pero algo había cambiado, esta vez estaba completamente segura de lo que haría. No había tiempo para arrepentirse, era este momento antes de que fuera tarde.
Decidida a lo que haría, abrí lentamente la tapa de este libro que por cierto aun desconocía su título...
Todo se encontraba perfecto, como si fuera una libro recién echo. Con mis dedos fui tocando suavemente las letras trazadas sobre la hoja.
Un pequeño ardor detallo desde mis dedos hasta mi mano completa, podía sentir como las letras se movían bajo mi tacto, uno suave pero a la vez un tanto brusco.
Todo era maravilloso, desde las letras perfectamente escritas hasta cada detalle sobre este. Todo era perfecto, parecía no tener ni una pequeña imperfección.
Mi vista recorría cada una de las palabras trazadas, me encontraba maravillada con lo que veía, era encantador, emanaba una belleza increíble, o tal vez eso quería hacer, para engañar a quien intentara leerlo.
Mis labios fueron moviéndose a la vez que leía cada oración, cada palabra, cada frase. Intentaba entender algunas de estas pero no lograba descifrarlas, o tal vez no me concentraba lo suficiente, no lose.
Solo una de estas logro llamar mi atención.
Cada 1000 años la luna roja regresa, se dice que en esta cada una de las especies jamas vistas, se reúnen para celebrar su llegada, solo una noche basta para avisar la llegada de la elegida, una noche en la que miles de demonios querrán matarla, incluso querrán usarla para obtener más poder.
Una noche.
Una historia jamas contada.
Una chica que despertara con inmensos poderes, sera la salvación para muchos y la desgracia para otros.
Cuando la noche caiga y la luna por fin se encuentre en su lugar, todo comenzara, no habrá marcha atrás, tendrá solo una oportunidad.
Tendrá que elegir entre la vida o la muerte...
Solo una opción es la correcta, y si se equivoca se desatara una gran catástrofe.
Los minutos pasan, las horas se acaban, el tiempo se acaba... Y cada vez falta menos para que la gran luna regrese, solo ella lograra sobrevivir si se lo propone.
La única sangre real corre por sus venas, ella es la única e última descendiente de su familia, y de cada una de las especies.
Mis manos ardían cada ves más a medida que iba leyendo cada una de las paginas, me encontraba absorta en cada una de las oraciones escritas, todo pero absolutamente todo era encantador.
Lo único que quería en este momento era saber que había ocurrido con los reyes, el pueblo, las personas, todos ellos.
Quería y necesitaba saberlo, lo anhelaba...
El tiempo pasaba lento, y me desesperaba no encontrar ninguna clase de información sobre el reino.
Los minutos pasaban y mi desesperación crecía cada vez más...
Cuando creía no poder aguantarlo más, una hoja realmente distinta a las anteriores me llamo la atención.
Esta era tan blanca como la nieve, pero sobre esta se encontraba un sello de dos espadas atravezandose. En un color rojo, en el punto de vista de otra persona podría pensar que fuera sangre, pero no lo era. Solamente se trataba de una sello sobre tinta roja, tan roja como la sangre.
Los años pasaban y los reyes se encontraban absolutamente cansados.
Cansados de esperar a que su hija regresara, no había un día que no rezaran implorando poder encontrar a su pequeña, la luz de su vida. La que ahora se había apagado, rogaban encontrarla.
La pequeña luz de esperanza que tenían se apago, y finalmente se dieron por vencidos.
Intentaron volver con su vida, pero una noche todo cambio, pero para mal. Después de esa noche nada sería lo mismo, ni su propio pueblo, nadie.
Una noche, en la puerta de su castillo se encontraba una bebe recién nacida, su rostro transmitía tranquilidad y una absoluta inocencia.
Esto desconcentro a los reyes, que sumidos al dolor y una angustia impresionante. Se dejaron impresionar por esta pequeña niña, una niña que estaba llena de maldad, un niña que sería la peor pesadilla para muchos, esta niña había sido enviada por uno de los brujos más peligrosos de todos, un brujo lleno de odio en su alma.
Los reyes conmocionados por esta niña, decidieron adoptarla, estaban seguros que ella era su hija, la heredera.
Pero que equivocados estaban.