La Elegida (en Edición)

Capitulo 35

-¿Qué sucedió en el sueño?- su voz sono ronca, centre mi mirada en ella observando su cara llena de confusion.

Suspire recordando aquello nuevamente.

La confusión aumentaba en mí conforme recordaba cada detalle de aquél extraño sueño.

-Me encontraba dentro de una biblioteca- comencé a relatar- todo a mi alrededor era enorme, había miles de libros a mi alrededor, pero uno en especial había llamado mi atención- la mire- era un libro de hechizos, este emanaba un aura extraña, me encontraba absorta en aquél libro en mis manos, cuando sentí que alguien me observaba- emiti la parte en dónde escuché que una voz extraña dentro de mí, me lo advirtió- entonces gire mi rostro y lo vi- suspire pasando mis manos sobre mi pelo, confundida.

-¿A quién viste?- pregunto luego de unos largos segundos de silencio a nuestro alrededor.

Baje mi vista hacía mis manos, todavía en silencio.

- Era un joven apuesto- cerre mis ojos recordando- con un buen físico, tenía unos hermosos ojos celestes, su mirada expresaba frialdad- sentí un escalofrío- pero al momento de encontrarme con su mirada esta cambió, como si sintiera amor o incluso admiración- admiti sorprendida al recordar como su mirada había cambiado al verme.

Un largo silencio hizo presencia a nuestro alrededor.

Mi mirada se dirigió hacía Mercy quién se encontraba absorta en sus pensamientos, su ceño se encontraba levemente fruncido como si algo no le gustara o le confundiera.

- Clarividencia- susurró de manera audible.

-¿Qué?- la observé exaltada.

Fijé mi vista a sus ojos los cuales me observaban con las pupilas dilatadas, en ellos podía percibir miedo.

-Tus sueños- su voz sono audible- cada uno de tus sueños tienen un significado, marcan un antes y después en tu vida- la mire sin comprender- tienes el don de soñar con tu futuro incluso tu pasado, y cada vez que sueñas algo realmente extraño significa que eso sucederá en poco tiempo- suspiro.

La observé aún sin comprender.

-No logro comprenderte- frunci mi ceño.

-A través de tus sueños puedes ver lo que te ocurrirá en un futuro, estos te advierten que te sucederá, tienes el don de ver a través de tus sueños incluso visiones lo que sucederá en un futuro, ya sea de ti o cualquier otra persona- finalizó mirandome.

-¿Qué quieres decir con todo esto?- pregunté queriendo comprender.

-Qué lo que acabaste de soñar sucedera de verdad, quizá no ahora sino pronto- me miro.

Abrí mis ojos sorprendida.

-¿Cómo es eso posible?- susurre abrumada.

-Tienes un don Alice, este es parte de ti y se desarrollará cada vez más- acarició mi brazo.

La observé sorprendida, no sabía que responder, cada parte de mi cuerpo se encontraba paralizada.

***
POV. Castillo Camberleck.

Una tenue melodía se escuchaba a través de las paredes de aquél enorme castillo.

Siempre a la misma hora, la reina se disponía a tocar una hermosa y a su vez triste melodía, llena de nostalgia, llena de recuerdos que le fueron arrebatados, exceptuando uno.

Aquella extraña canción, llamativa, que al escucharla todo a tu alrededor desaparece, dejándote en un transe a causa de aquélla suave hasta quizá dulce nota.

Llena de amor, dolor, y vacío, un vacío inmenso, repleto de dolor, un dolor constante.

Esperando con suma esperanza a que llegará el día que por fin pudiera dejar de sentirse de aquélla manera, llena de tristeza, aquélla mujer llena de luz que traía felicidad a cada persona que veía, había desaparecido.

Ahora no era más que un alma llena de pena, repleta de dolor, de tristeza, repleta de un sentimiento desconocido para ella, pensando que jamás dejaría de sentirse de aquélla manera.

Pero que inocente de su parte, pensar de aquélla forma, tan triste. Aquélla mujer de aspecto serio, llena de dolor, no sabía incluso no se esperaría lo que le sucedería

No sabía que iba a encontrar su felicidad nuevamente, pero esta vez ante sus ojos, transformada en una sola persona, ella no sabía lo que estaba escrito para ella.

Este era un nuevo comienzo, su nuevo comienzo...

***

POV. Alice Camberleck.

Suspire observando el cielo que se encontraba de un color azul intenso, mientras tarareaba por décima vez aquélla canción que venía recordando de hacía unos pocos días.

No comprendía porque la tarareaba, todos los días al entrar la tarde, a la misma hora comenzaba a recordar una extraña canción, y rápidamente comenzaba a cantarla de manera audible sin nisiquiera poder evitarlo.

Su melodía era bastante extraña, triste, queriendo encontrar la esperanza, la felicidad, pero al contrario de esta se encontraba vacía, dolorosamente vacía.

Lo cual me desconcertaba, no lograba recordar de que lugar la había escuchado, era realmente imposible que la conociera.

No entendía el porqué esta siempre volvía a mi mente, pausando cada uno de mis pensamientos, haciendo que mi cerebro de desconectara y que no pudiera controlar mis impulsos.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.