La Elegida (en Edición)

Capitulo 71

POV. Ethan.

Era increíble lo rápido que el tiempo podía pasar, como todo a tu alrededor se desvanece dejando de lado todo aquello que alguna vez creiste conocer..

Como tu vida podría cambiar con tan solo un suspiro, como el amor, el odio, el rencor inclusive miles de emociones se mezclen en tu interior cambiando tu perspectiva sobre la vida, adaptadondote ante todo lo que el mundo se enseña.

-¿Qué piensas sobre el amor, cariño?- pregunté observando a la pequeña Alice que se encontraba a mi lado observando el cielo estrellado.

-Un misterio- respondió con simpleza.

Giré mi rostro confundido ante su respuesta.

-¿Un misterio?- pregunté repitiendo sus mismas palabras.

-Un misterio el cual espera a la persona correcta para hallarlo, dejando que éste le envuelva con sus secretos, conquistando su alma. Dispuesto a entregar la propia felicidad a quién lo merezca, dejando que la tristeza le enseñe el verdadero significado de la vida.- su ceño se encontraba levemente fruncido, logrando verse adorable.

-Alice- murmure con dolor.

-¿Que sucede, Ethan?- pregunto asustada.

-Tengo miedo- su rostro expresaba preocupación- miedo de sentir, de amar, le temo al amor- una pequeña lágrima se deslizaba por mi mejilla al recordar la muerte de mi madre.

Unos pequeños brazos rodearon mi cintura apretandome contra un pequeño cuerpo, de manera tierna.

-No dejaré que sufras- murmuro entre mis brazos- estaré a tu lado toda la eternidad- prometió y en mi interior sabía que aquéllo sería cierto, por qué nuestras promesas van más haya de la realidad.

-Te quiero- susurramos al mismo tiempo..

Pequeñas lágrimas se deslizaban sin piedad alguna sobre mi mejillas, aún recordaba todo lo que habia sucedido. Recordaba las pesadillas qué me atacaban sin razón en la atrerradora oscuridad de mi habitación, aquéllos deseos que nunca podrían cumplirse.

Te cuidaré, hijo, siempre estare a tu lado..

Mi pecho se comprimia ante sus últimas palabras, como sus ojos se cerraban lentamente, como su cuerpo perdía vida entre mis brazos; dejandome solo entre millones de personas.

Leves suspiros se escapaban de mis labios, palabras sin pronunciar, secretos sin revelar, incluso mi propio dolor acechando mi interior, debilitando mis pensamientos.

Mi corazón se comprimida impidiendo qué pudiese respirar. 

Alice..

Comenzaba a desmoronarme y no podía evitarlo, era tan malditamente desagradable lo que podía hacer nuestro cerebro.

Dicen qué todo sucede por un propósito, que todo tiene su explicación. Pero.. ¿Porqué aquéllo que más hace daño, nos atormenta sin piedad?

Aquellos recuerdos que prometimos alguna vez resguardar en nuestro interior, intentando olvidar todo lo que nos lástima para seguir adelante.

Con la ilusión de jamás recordarlos, pensando que el dolor se esfumó por completo de nuestro cuerpo. Fallando en la eterna incertidumbre de pensamientos sin respuestas.

Volviendo a recordar todo lo que creímos haber desechado, volviendo de manera salvaje, continúa, malditamente dolorosa.

¿Estábamos destinados a sufrir las consecuencias de nuestros actos?

¿Era una maldición o una salvación?

-Ethan- murmuró una voz a mis espaldas.

Mi cuerpo giro rápidamente, encontrando el rostro de Mercy observandome preocupada.

Algo en mi se removió al encontrarla cerca de mi.

-Mercy- murmure quitando las lágrimas de mis mejillas.

-¿Qué sucedió?- pregunto acercándose rápidamente, examinando mi rostro entre sus manos, erizando mi piel.- ¿Te encuentras bien?- su rostro expresaba aflicción causando una inmensa ternura.

-Estoy bien, cariño- respondí dejandome llevar por mis impulsos.

-Ethan- murmuró abrazandose a mi cintura, sorprendiendome

-Mercy- titubee, consternado.

¿Qué estaba ocurriendo?

-Solamente abrazame, por favor- imploro logrando que mis brazos la rodearan con fuerza.

-¿Que haces en mi, Mercy?- exclame logrando que levantara su rostro observandome sin comprender.

-¿Cómo?- podía sentir su corazón acelerado a la par del mio.

-Me haces sentir- murmure cerrando mis ojos- y hacía tiempo que no me sentía de esta manera.

Mis parpados se abrieron lentamente encontrando su rostro consternado, observando mis labios de manera impasible.

-Ethan- susurró acercando su rostro- también me haces sentir, y aquéllo me asusta- sus labios rozaban los mios de manera torturante.

Maldición, lo siento Mercy..

Conecte nuestros labios de manera desesperada, sintiendo como me hundía en un sin fin de emociones.

****

POV. Cassandra.

Debes elegir entre ellas..

Mis pasos eran apresurados, me encontraba en las penumbras de un extraño bosque. Mi respiración se encontraba acelerada ante la velocidad en la cuál corría.

Las ramas crujian bajo mis pies desnudos, voces irracionales se escuchaban como ecos en cada extemo del lugar.  

Tu verdadera hija.

La oscuridad atacaba mis sentidos, cegandome ante el camino repleto de hojas. Podía sentir como las ramas se clavaban en las palmas de mis pies, demoliendolos sin piedad. Gozando de su sufrimiento, tan desesperante..




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