#5 de Diciembre. 14:37 PM.
Mason alzó las cejas cuando divisó a Zach hablando con Emily. En verdad su primo era insoportable. Es decir, Emily no lo conocía así que él sabía muy bien lo que era su querido primo Zach. Y además, éste iba a tratar de estar con su enana. Y el rubio iba a enojarse demasiado por ello. Demasiado. De verdad. Parecía tan animado hablando con la rizada; conocía esa sonrisa de:"Mírame. Soy hermoso. Soy el mejor chico del mundo." Y el peor novio, pensó Mason. Respiró hondo y se dirigió hacia ellos.
No le importó. ¿Por qué debería?
A medida que Mason estaba acercándose, Zach frunció el ceño al verlo. El rubio sólo sonrió y colocó un brazo por arriba de los hombros de Emily haciendo sobresaltar a la menor. Ella sabía de quién se trataba y por eso no levantó la cabeza. "¿Listo?" Zach alzó las cejas.
"Hola." dijo con el ceño fruncido. "Espera. ¿Se conocen?"
"Oh, hola Zach." sonrió Mason haciéndose el sorprendido. "¿Qué hay? Sí, nos conocemos. ¿Ya estás?" le preguntó acariciando su hombro. Emily estaba tan tensa por eso. Parecía bastante nerviosa. Seguramente iba a matarlo cuando llegasen a la casa de él. "¿Se conocen ustedes?"
"Sí, somos amigos." dijo Zach. "Muy amigos. ¿No te contó?"
"La verdad es que no." negó con la cabeza Mason. "Pero hablaremos de eso en casa, ¿cierto?"
Emily tardó en asentir pero lo hizo. Estaba muy colorada, y se le notó demasiado. Eso era hermoso. "¿En casa? ¿Se van juntos?" Zach se tocó sus rizos. Lo hace apropósito. "Eso es genial."
"Sí." habló Emily por fin. "Sí. Lo es."
"Así que te vemos luego." dijo. "Te veo luego, primo." sonrió sarcástico Mason tratando de llevarse a Emily pero antes de que eso sucediera Zach abrió la boca.
"Nos vemos, linda." le dijo a Emily, y éste miró de reojo a Mason que se detuvo. Le enojaba tanto que Zach quisiera todo lo de él. Esperen, no es que Emily fuera suyo pero estaba intentando tener ese algo. Lo que sea. Y Zach no merecía a Emily. No es que dijera que él sí pero... Por favor. Mason estaba sintiendo cosas muy fuertes por ella. La quería.
Así que volteó con una sonrisa de lado. "Ya sé que soy lindo. No lo digas frente a mi chica que se pondrá celosa." Mason le guiñó un ojo. Emily iba a matarlo por millonésima vez. Luego de eso, acarició el cabello de la rizada que estaba completamente sonrojada. "Nos vemos." Zach lo quedó mirando mal. Muy mal. Y volteó a marcharse con sus amigos.
Una vez que estuvieron lejos de los alumnos y casi media cuadra, Emily se separó un poco de Mason parándose en la acera y mirándolo con el ceño fruncido. "Le dijiste exactamente lo que no quería que le dijeras. Fuiste un poco grosero."
"Eso no es cierto." Mason se acercó a ella. "Te dijo linda. Bueno lo eres. Pero no me gusta que tenga esa actitud tonta conmigo. Siempre es lo mismo con él."
"Dijiste que no ibas a fingir." se sonrojó Emily, y parecía enojada. Tan linda. "Fingiste. Hhum, tu- eh- eres muy malo."
"No fingí." Mason dijo. "Hice lo que sentía. ¿Ya? Te molestó. Está bien. Lo siento." se acercó aún más casi haciendo tropezar a la rizada. "Pero no lo soporto."
Emily quedó mirándolo a los ojos. Tiró de las mangas de su sudadera gris, y se peinó el cabello con sus manos, para luego bajar su mirada con las mejillas aún todavía algo sonrojadas. "¿Podemos ir?" preguntó por lo bajo. El rubio no dejaba de mirarla. ¿Estaba mal pensar así? Quiero decir, quería tanto besarlo. Perdonen. No le importa si lo conoce hace días. Era bastante tentador tenerla de esa manera y parecía insoportable no poder hacer nada. Pero no quería que Emily pensara que sus intenciones eran sólo esas. Le encantaba hablar y estar con ella. Así que por eso la invitó a casa.
"Sí." asintió Mason. "Eso haremos."
*******
"Tienes una bonita casa." dijo Emily cuando entró, dándole la mochila a Mason que la dejó en una silla junto a la puerta. "Parece cómoda."
"Lo es." asintió Mason. Emily lo miró un poco más. Literalmente se sintió tan incómoda allí con Zach y él. Fue un verdadero asco. Es decir, Mason ha sido tan bonito pero no era necesario tanto... lo que sea. ¿Mi chica? ¿De verdad lo dijo? ¿De verdad lo era? Es decir, no lo era pero no importa. Sólo lo dijo. Y se sintió tan... por favor, casi le da un paro. Pero fue increíblemente hermoso.
"Acomódate en el sofá." señaló Mason. "Mi casa es la tuya. Buscaré algo." le revolvió un poco el cabello haciendo a Emily sobresaltarse un poquitín. La ponía tan nerviosa. ¿Cuándo iba a parar? Al parecer nunca. Asintió aunque sabía que el rubio ya estaba un poco lejos entrando a la cocina. "De acuerdo..." estiró sus mangas una vez más para caminar hasta el sofá enorme y blanco. Había una manta azul junto a ella. ¿De verdad Mason lo puso allí por si ella sentía frío? ¿Valía soñar? Bueno.
Quedó mirando los cuadros. No había tantos. Pero vio unas fotos de él con Alex. Con su madre. Y... ¿su padre? No le ha preguntado eso. Ni lo haría. No quería hacerlo sentir incómodo. Volteó cuando Mason entró a la sala de estar. Entró primero con dos tazas de café dejándolo en la mesa ratona frente a ellos (Emily lo estaba mirando en todo momento), luego con dos bolsas de malvaviscos y dos recipiente con palomitas, trajo chocolate, brownies, azúcar y el control para luego sentarse. (Emily seguía mirándolo). "¿Es una broma, no?" Mason giró a mirarlo con el ceño fruncido. Estaba confundido. "¿Has comprado todo ésto?"
"Sí, ¿qué tiene?" la miró. "¿Es poco?"
"Es mucho, Mason." frunció el ceño. "Sólo íbamos..."
"Yo podía comprarlo." Ok. De acuerdo pero... "Además no sólo íbamos... Es decir, estoy contigo. No iba a hacer café."
"¿Lo has hecho tú?"
"Todo yo." sonrió. Se posicionó más cerca de Emily aún siendo el sofá lo bastante grande para estar un poco separado. No le importó.