I: Exilió

Arendelle, un hermoso Reino ubicado en Noruega, un país gobernado por el Rey Agnarr y la Reina Iduna, un lugar donde reina la paz y que prospera para bien, gracias a que está ubicado cerca de un fiordo, una estrecha entrada costera de mar que lo convierte en un centro comercial viable para sus exportaciones, sin duda un hermoso lugar donde los veranos son cálidos y sus inviernos muy fríos, suele ser un lugar donde varias personas de otros países o reino visitan gracias a que se pueden observar las Auroras Boreales.

Actualmente el Reino se encontraba en total calma y tranquilidad excepto en una habitación de castillo donde se encontraban el Rey y la corte Real discutiendo sobre un asunto que sucedió hace menos de una semana.

-¡¡¡AUN NO PUEDO CREER QUE NOS LO HAYA OCULTADO MAJESTAD!!!-.

-¡¡¡ESTO ES INAUDITO, ESA NIÑA ES UN PELIGRO PARA EL REINO!!!-.

-¡¡¡PUDO HABERLA MATADO!!!-.

Y así se empezó a escuchar las quejas de la corte Real.

Agnarr: -¡SILENCIO!-.

Todo se callaron de repente, mirando fijamente al Rey esperando una respuesta.

Agnarr: -Escuchen, en primer lugar, si no les dije sobre los poderes de mí hija fue exactamente por esto, sabía cómo iban a reaccionar y el escándalo que harían-. Muchos lo miraron insatisfecho con esa respuesta.

Agnarr: -Se que apenas es una niña, pero..., ella apenas sabe controlarlo y temo que cuando crezca, su poder se haga más grande también y no pueda dominarlos correctamente-.

Los murmullos se empezaron a escuchar, pues muchos estaban preocupados por esta situación.

-¿Que haremos con ella su majestad?-.

-Tengo entendido que ella no ha salido de su habitación y que se rehúsa a salir-.

Agnarr: -Así es, pero no creo que eso duré para siempre, ella tendrá que salí para asistir a sus clases-.

-¿Cómo se encuentra su esposa después de todo esto majestad?-.

Agnarr: -Bueno..., cuando paso todo, ella estaba muy asustada, ver a su pequeña hija en el suelo inconsciente, su cuerpo estaba frío y que no daba indicios de querer despertar se asustó, no lo negaré yo también lo estaba, pensamos que estaba muerta, después de que se recuperara empezó a alejarla de Elsa, por miedo a que pase de nuevo o algo mucho peor-.

-Bueno está claro que la niña es un peligro, según usted majestad, es la primera vez que sucede un accidente, pero no hay que arriesgar el Reino y a sus habitantes; y más que nada a su familia, hay que hacer algo con ella, y no creo que baste con encerrarla en su habitación-.

Agnarr: -¿Que sugieren?, estoy dispuesto a escuchar opciones-.

El silencio se hizo presente por unos minutos, la mayoría de la corte pensó en que matar a la niña era la mejor opción, pero nadie dijo nada por qué sabía que el se opondría a esa extrema idea, todo se miraban unos a otros, hasta que alguien empezó hablar.

-Como nadie está dando opiniones, yo quiero sugerir que la exilie del Reino y que le quite su título Real como futura gobernante, así nos aseguramos de que en el futuro no pueda reclamar el trono-.

-A mí me parece que es una gran idea y su hija menor pasaría a ser la próxima gobernante-.

El silencio se convirtió de repente en ruidos de aceptación, todos estaban de acuerdo en eso, lo único que faltaba es que el Rey también lo acepte.

Agnarr se quedó callado analizando lo que podría decirse la única opción, el suspiro y dijo:

Agnarr: -Como es la única opción, no me queda más remedio que aceptarla, se que es mi hija..., pero mi Reino y sus habitantes son primero-.

Todos asintieron, la decisión ya estaba echa, el Rey tomo un hoja, pluma y tinta y empezó a escribir.

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·❆· ※───[Pov Elsa]───※ ·❆·

_Estaba asustada, mi habitación se había convertido en una cueva de hielo, todo cubierto de blanco, estaba intentando esconderme en una esquina de atrás de mi cama, no quería salir, tenía miedo de que mis poderes lastimaran a alguien más.

El recuerdo todavía se proyectaba en mi mente, se supone que solo estábamos jugando como siempre y todo paso tan rápido; un resbalón, un grito y un destello blanco; Anna cayó al suelo, su cuerpo estaba inmóvil, podía ver el miedo en los ojos de mamá y papá, pero no solo era por Anna... sino por mi...

De repente escuche como tocaban la puerta, sacándome de mis pensamientos; fruncí el ceño antes esa acción, mis padres le habían dicho al personal que no vinieran a mi habitación, solo si era hora de cenar y que dejarán la comida en la puerta; solo saldría para asistir a las clases de etiqueta, política, música, historia, matemática y otras materias más que me agobiaban.

-Perdone por molestarla princesa, pero sus padres me mandaron a avisarle que dentro de un rato vendrán a hablar con usted de un asunto importante-.

-Oh..., e-está bien, gracias-.

No tarde en escuchar a alguien toca la puerta, sabía que eran mis padres así que abrí y los dejo entrar manteniendo una considerada distancia de ello por las dudas.

Agnarr: -Em..., hola Elsa-.

Estaba sorprendida, era la primera vez que me llamaba por mi nombre, usualmente me decía hija, mire a mí madre, pero ella no me dirija la mirada, ni siquiera un "Hola".

-Hola padre-.

Agnarr: -Escúchame bien Elsa, el consejo Real se enteró de tus poderes y hemos tomado una decisión de que hacer contigo-.

Vi que mi padre saco un sobre y me lo entrego, temerosa lo agarro y lo abrí.

Al empezar a leerlo me sentí..., no sabía cómo sentirme, no podía creer lo que estaba leyendo.

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Mandato Real

_Elsa Arendelle, primogénita del Rey Agnarr y la Reina Iduna, se le da la orden Impuesta por el Rey de Arendelle de exiliarla de Reino ya que presenta ser una amenaza para la familia Real, el Reino y a sus habitantes, con ello también se le revocara su Título Real como hija heredera del Reino, quitándole el derecho y al de su descendencia a reclamar el trono en el futuro.