Desconfianza

No podía evitar preguntarme si al revelarle a Lais la verdad, había iniciado un proceso que no podía detener.

Finalmente llegamos a mi apartamento, un lugar que había sido mi refugio durante meses. Al abrir la puerta, me sentí como si estuviera a punto de entrar en un santuario de secretos. Me volví hacia Lais, quien aún me miraba con una mezcla de preocupación y determinación.

—Vamos a entrar —dije, tratando de sonar más seguro de lo que me sentía—. Hay algo más que necesito mostrarte, algo que va más allá de mis palabras.

Lais asintió y entró, mientras yo encendía las luces. El apartamento estaba decorado con un estilo sencillo, pero acogedor. Sin embargo, había una habitación al fondo que había mantenido cerrada. Era la habitación donde guardaba los fragmentos más oscuros de mi pasado.

Caminamos hacia esa habitación, y antes de abrir la puerta, me volví hacia Lais. Su mirada estaba fija en mí, mostrando una preocupación genuina. Me tomé un momento para reunir mi valor.

—Lo que estás a punto de ver... —empecé, mi voz temblando ligeramente—. No es fácil de explicar. Mi pasado está lleno de cosas que preferiría olvidar, pero sé que es necesario que veas esto para entender por qué estoy tan afectado.

Abrí la puerta y encendí la luz. La habitación estaba llena de documentos, fotografías y objetos antiguos que mantenía en cajas. Había una mesa en el centro, sobre la cual había una serie de archivos clasificados y fotografías enmarcadas. En una esquina, había una caja fuerte que parecía fuera de lugar entre los objetos más cotidianos.

—¿Qué es todo esto? —preguntó Lais, mientras miraba alrededor con curiosidad y creciente inquietud.

—Todo esto es parte de mi pasado —dije—. Mi trabajo anterior, mi vida antes de mudarme aquí. Estaba involucrado en una organización que... bueno, no puedo decir que era completamente legal. Y no solo eso, sino que también participé en algo que fue mucho más oscuro.

Me acerqué a la mesa y tomé uno de los archivos. Lo abrí para revelar documentos que hablaban de operaciones encubiertas, transacciones financieras sospechosas y nombres de personas involucradas en actividades ilícitas. Vi la expresión en el rostro de Lais cambiar a medida que pasaba las páginas.

—Esto... esto es serio —dijo, su voz temblando—. ¿Estás diciendo que estabas involucrado en... en todo esto?

Asentí, sintiéndome incapaz de hacer otra cosa.

—Sí. Y eso no es todo. —Tomé una foto en particular, una que mostraba a un grupo de personas en una reunión secreta—. Estas personas, incluyéndome a mí, estaban involucradas en una operación que, en última instancia, salió mal. Hubo víctimas, y aunque no estaba directamente involucrado en el daño físico, la responsabilidad de lo que ocurrió pesa sobre mí.

Lais se acercó para mirar más de cerca. Sus manos temblaban mientras tomaba la foto.

—Dexter, ¿qué pasó realmente? —preguntó, su voz rota—. ¿Por qué no me lo dijiste antes?

—Porque no quería que esto te afectara —respondí, mi voz rota—. Intenté dejar atrás ese pasado y construir una nueva vida aquí. Pero el peso de lo que hice, de las personas que fueron perjudicadas, nunca me ha dejado. Y el hecho de que haya arriesgado todo esto al revelarlo es... es porque no puedo seguir cargando este secreto solo.

Me volví hacia la caja fuerte y la abrí con una combinación que había memorizado durante años. Dentro, había una serie de objetos que guardaba como pruebas de mi implicación en estos eventos. Documentos, una pistola, y una serie de artefactos que, en conjunto, representaban el lado más oscuro de mi pasado.

—Este es el nivel de mi implicación —dije, señalando los objetos—. He tratado de protegerme a mí mismo y a otros al mantener esto escondido. Pero ahora, siento que no puedo seguir ocultando todo esto.

Lais miró los objetos con una mezcla de horror y tristeza. Me sentí devastado al ver cómo la revelación estaba afectando a la persona que más valoraba en mi vida.

—Dexter, esto es... increíblemente difícil de procesar —dijo finalmente—. No sé qué pensar, ni qué hacer con esta información.

—Lo entiendo —respondí—. No espero que lo comprendas de inmediato, pero necesito que sepas la verdad. Y también necesito saber si estás dispuesta a seguir adelante a pesar de esto.

—Yo agradezco mucho por compartir esto conmigo y supongo que podemos manejar esto fácil bueno no tan fácil pero—

Pero en lugar de sentir alivio, una oleada de angustia y enojo se apoderó de mí. El peso de mi pasado y la tensión del momento hicieron que mis emociones estallaran de una manera que no había anticipado.

—¿Cómo puedes decir eso tan fácilmente? —exclamé, cortando su oración, mi voz cargada de frustración—. ¿No ves lo grave que es todo esto? Esto no es algo que simplemente se "maneja". Hay vidas arruinadas, personas que han sido lastimadas, y yo estoy aquí, tratando de construir algo nuevo mientras mi pasado sigue persiguiéndome.

—¡Dexter, no estoy diciendo que sea fácil! —respondió, alzando la voz—. Pero lo que me molesta es que esperaste tanto para decirme esto. Me haces sentir como si estuviera en una película de suspenso, atrapada en una trama que no puedo controlar. ¿Cómo esperas que responda a esto?

—¿Cómo esperas que reacciones? —grité—. Esto no es algo que pueda simplemente "solucionar". ¿No te das cuenta de lo que está en juego aquí? He estado escondiendo esto, no porque no confíe en ti, sino porque sé que es un caos absoluto.

Lais me miró con una mezcla de ira y desilusión, su voz quebrándose mientras hablaba.

—No se trata solo de ti, Dexter. Se trata de nosotros. ¿Por qué no confiaste en mí desde el principio? ¿Por qué me hiciste pasar por esto sin darme una pista de lo que estaba realmente involucrada? Me haces sentir como si nuestra relación no significara nada, como si no te importará estos tres meses.

El dolor en su voz y el reproche en sus palabras hicieron que me sintiera aún más culpable, pero también impotente. Mi frustración y el sentimiento de ser incomprendido aumentaron.