La fuerza de un enamorado 5: No sé que es lo que me pasa

El kermes

El día tan esperado había llegado. En este momento Lui se encontraba corriendo con sus compañeros mientras alistaban cada una de las cosas que venderían, así como el arreglar una mesa donde pondrían la venta. Aunque la comida aún no estaba, ya que todo se hizo en la casa de una compañera y ella traería todo con otros compañeros y compañeras, pero hasta dentro de una hora estarían llegando al instituto. Es por ello que Lui con los otros estaban arreglando el puesto para que así sólo llegaran los compañeros y se podría estar listos para servir.

 

Un compañero, que era el encargado de dirigir todo lo que estaban haciendo, empezó a tomar nota si no hacía falta nada y si todos los preparativos estaban completamente listos o no, así como si hiciera falta alguna otra cosa pudieran ir a comprar o prepararlo para que todo pudiera empezar sin ni un tipo de problemas.

 

 Entre las diferentes cosas que había que hacer en las distintas aulas, Lui empezó a caminar con dos amigos mientras se encontraban sin nada que hacer. A pesar de que tenían suficiente tiempo antes de que diera inicio a todas las actividades, uno de sus amigos suspiro mientras decía – no puedo creer que justamente en el momento en que dijeron que podíamos venir de particular, no estuvimos presentes debido a que habíamos pedido permiso para salir por un momento para prestar la mesa que estamos usando, además de que nadie nos dijo nada al sobre eso – Lui – en eso no podemos hacer nada, pero bueno, ahora sólo nos queda el tener que estar así. Por lo menos puedo estar seguro de que no seremos los únicos que estén de esta forma, ya que hay otros que han venido con sus uniformes. ¿No es Juan? – Juan – Tenes razón. Pero la verdad, yo tampoco quería venir con el uniforme, además de que estaba escuchando que quienes vinieron con el uniforme se debe a que ellos deben de participar en otras cosas, sino también hubieran venido de particular. Pero parece que sólo a Lui es a quien no le afecta en lo más mínimo ¿no lo crees Pedro? – Pedro – así es. Parece que él está más cómodo con el uniforme, así que podría decir que es un poco… – Lui – un poco ¿Qué? – Pedro – nada, nada, nada. Déjalo así – Juan – pero lo único bueno es que tendremos visitas de otros institutos, puede que logremos hablar con alguna las que vengan – Lui – bueno, no creo que podamos hacerlo – Pedro – pero primero deberás de ser capaz de hablarles sino entonces que chiste tiene – Juan – eso debe de ser así, sino que chiste hay en acercarse si no le vas a hablar ¿Va? – Lui – bueno, no sé que decir de eso – Juan y Pedro empiezan a reírse en el momento ante la respuesta que dio Lui.

 

Lui, un poco molesto, responde – ¿Por qué se ríen? – Pedro y Juan al mismo tiempo – no es nada importante – Lui – díganme por qué se están riendo – Pedro – bueno, para serte sincero, no creo que logres hablar con alguna de las que vengan – Lui – ¿Qué tiene eso que ver con el kermes? – Juan – bueno, creo que todavía es muy temprano para que lo sepas, así que déjalo así, ¿No estás de acuerdo con eso Pedro? – Pedro – la verdad, pues sí. Por el momento sólo sigamos viendo que van hacer en los otros grados – Juan – había escuchado que los de tercero van hacer algunos juegos y en otro va a ver pista de baile – Pedro – ¡¿Ya?! – Juan – De verdad – Pedro – ¿En cuál es donde lo harán? – Juan – bueno, eso sí no lo sé. Sólo me contaron, pero no sé de qué tercero sea cada una de las cosas que van hacer – Pedro – eso no está bien – Juan – ¿Qué no está bien? – Pedro – que no hayas conseguido la información completa, eso no se hace. Si vas a contar entonces hazlo completo y no a medias – Juan – en ese caso no vuelvo a contarte nada en una próxima – Pedro, acercando se a Juan y pasando su brazo sobre su cabeza e hizo como si tratara de abrazarlo, pero en realidad sólo lo hacía para molestarlo mientras que Juan rápidamente trataba de alejarse de él mientras decía – ya suéltame – Pedro – está bien, pero no te enojes, sólo estaba bromeando – Juan – está bien, pero ya déjame – a lo que Pedro se reía mientras lo soltaba.

 

Lui, mientras miraba como ellos dos estaban bromeando, miró que las aulas se encontraban con las puertas cerradas, por lo que dijo – parece que no podremos ver nada de lo que los demás grados están haciendo – Pedro – bueno, no es que no podamos ver nada de lo que están haciendo, sólo debemos de asomarnos a la ventana y podremos echar un vistazo de lo que están haciendo – Juan – bueno, eso si no se dan cuenta, ya que si nos ven, de seguro que se van a enojar con nosotros – Pedro – pero no vas a asomarte así nada más, sino que lo vas hacer con cuidado para que no se den cuenta ¿O no Lui? – Lui – bueno, tal vez si se pueda, pero creo que se van a dar cuenta – Pedro – vamos Lui, no seas miedoso, mira, incluso Juan va a ir a ver a pesar de lo que dijo – Lui dirigió la mirada a Juan quien inmediatamente dijo – está bien, vamos a ver, pero será mejor que no se den cuenta de nosotros, sino estaremos en grandes problemas – Pedro – no puedo asegurarte que no nos vayan a descubrir, así que si algo sucede entonces alguien tendrá que hacerse cargo de cubrir a los demás – Lui – ¿Y quién será el que cubra a los demás? – Pedro – bueno, eso lo veremos después –. Pedro, se adelantó después de lo que dijo, mientras tanto, Juan se acercó a Lui y dijo – en sí será el que se más lento en irse – Lui – pero eso no significa que puede ser más probable que Pedro no sea el que sufra por esto – Juan – en eso tenes razón, pero no será así, en esta ocasión tengo un plan para que sea él quien termine siendo el que nos cubra – Lui, sintiendo que él sería quien los cubriría a ambos en el momento en que todo saliera mal, prefirió irse mientras decía – bueno, creo que los dejaré – Pedro, dándose la vuelta mientras decía – vamos, apúrense mucha, sino no podremos ver nada antes de que debamos de regresar a la clase – Juan – Lui dice que no estará con nosotros – Pedro – ¿Por qué? – Lui – bueno, es que… no creo que pueda – Pedro – vamos no seas así, vamos los tres – Lui – Bueno… es que… – Juan – creo que no podremos convencerlo – Pedro – de plano, no nos queda de otra, seremos sólo nosotros dos – Lui – Bueno… creo que será mejor que regrese a la clase – Juan – está bien – Pedro – entonces nos vemos más tarde – Lui – está bien – y con esto ellos dos siguieron su plan de descubrir como se encontraban los preparativos de las demás clases que tenían la puerta cerrada para que nadie viera lo que estaban preparando hasta que llegara el momento correcto.



#13961 en Novela romántica

En el texto hay: primer amor

Editado: 26.06.2022

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