Cuando terminaron la presentación de los profesores los niños siguieron a los hombres. Ninguno hizo preguntas o se opusieron
Gerald veía a todos algunos también miraban, cruzando la mirada con una niña de estatura baja, pelo negro obsidiana, piel blanca, ojos blancos como la mente, rasgo finos ella se dio cuenta que gerald la miraba y está aparto la mirada rápidamente
Otros niños también eran llamativos pero gerald se evitaría problemas, el quería escapar de este lugar, regresar con su madre y hermana
También llamó la atención de otro niños el cual lo miraban como si estuviera clavando una espada en el. El niño alto, robusto pero no tan exagerado, pelo plateado como el metal, ojos verdes una cicatriz adornaba su cuello.
Gerald aparto la mirada el quería pasar desapercibido pero como hacerlo su pelo carmesí ojos azules y piel muy blanca no pasaría desapercibido tan fácilmente y el tenía en cuenta esa parte
Recorrieron pasillos, escaleras en forma de coral hasta llegar a su destino eran varias habitaciones dos ala izquierda y una a la derecha el hombre los separó en par
Después sacó un pergamino que antes no estaba alli sorprendido gerald le gano la curiosidad ʼeste mundo puede estar lleno de sorpresasʼ pensó gerald
Aquel hombre alto se aclaró la garganta después de leer el pergaminos durante dos minutos — eliphas y raymond serán compañeros de cuarto, pasen adelante en la habitación derecha por favor — voz áspera y aguda emitió el hombre
Cuando eliphas camino primero, abriendo la puerta verde que tenía enfrente atrás de el raymond estatura baja, pelo negro y largo, ojos azules, rasgos definidos como si fuera un príncipe de cuentos de andas, el poseía una leve cicatriz en la partes de su ojo derecho pero una grande cicatriz en su oreja que recorría hasta su cuello y manos
Ambos cruzaron la puerta cerrando al momento el hombre se puso enfrente de todos los niños — muriel y ganondare pasen a su habitación la cual es la segunda a la derecha donde sus compañeros acaban de pasar — dos niños
Muriel, alta de complexión delgada, pelo suelto color vino, ojos rojos como la sangre, el pelo le llegaba hasta los hombros no era muy largo pero tampoco corto, piel aperlada la ropa de muchos no era visible pero ella tenía unos pantalones rotos como su camisa, ella estaba descalza
Ganondare, alto complexión muy delgada parecía gueso, pelo corto desordenado color verde pastel, ojos iguales que su pelo verdes pasto el solo poseía unos pantalones rotos, lo que parecían garras de algún animal provocaron que fueran rotos
Ellos pasaron a lado del hombre el cual ni siquiera los miró pero ellos tampoco. Gerald solo esperaba su turno y con quien le tocaría compartir cuarto.
Cerrándose la puerta de la habitación de muriel y ganondare fueron asignados, phantom llegó con el hombre el cual entregó su pergaminos, phantom lo abrió leyéndolo — jelena y gerald pasen a la habitación izquierda y los otros caminen hacia atrás se les asignará otras habitaciones — jelena y gerald pasaron a su habitación la cual no tenía una puerta cualquiera si no una bien decorada
Gerald habría la puerta dejando pasar primero a jelena, ella aceptó su gesto y pasó, gerald cerró la puerta dejando ver dos camas amuebladas con un linea en blanco la cual dividía la cama de gerald y jelena
Cada una contaba con, regadera, baño, y cocina las camas eran individuales pero grandes, sábanas negras y blancas ya hacían tendidas en las camas un closet lleno de ropa negra, zapatos, calcetas, mayas, calzones, todo esto es algo que todo niño, adulto y mayor desearía tener en su vida
Gerald solo miraba sorprendido ya no tenía que dormir junto a los caballos, jelena inspecciónaba los baños. Gerald se quito lo que tenía puesto dejando expuesta su espalda, jelena lo miró con horror y su justificación eran
Horribles cicatriz en toda la espalda, apuñaladas en su espalda y espalda baja, abdomen totalmente cosido, puntas de hilo colgaban de el pero rápidamente se puso ropa para no espantarla mas de lo que ya estaba
Jelena cruzó la linea que dividía las camas. Gerald solamente miraba por el espejo como ella se acercaba a el por detrás, volteando a verla sus ojos se cruzaron por segunda vez — gerald ¿cierto? Yo soy jelena y lamento si vi tus cicatrizes pero es algo grabe tu piel se desborda si me permites yo puedo coserla nuevamente — la voz de jelena, tan cálida y cautivadora
Gerald la miró por un rato, — muy bien eres la primera persona que ha mirado, por favor no cuentes nada y estaría más que agradecido por tu ayuda jelena — quitándose la playera jelena toco tu pecho quitando el vendaje de su cuerpo, sangre chorreaba de el, incluso con todo el espectáculo que jelena tenía enfrente
Se mantuvo fuerte, cosiendo las partes más importantes de su cuerpo gerald soportaba el dolor como podía, jelena término con las cosidas y le pido a gerald que se tomará un baño y luego le pondría las vendas
Gerald hizo caso no se negó para nada entrando al baño con puerta de cristal, ala izquierda un espejo con cremas, cepillo de dientes, cera y un lava manos
Parte derecha una gran tina gigante champús, cepillos de pelo y una navaja para cortar barbas o para algo más, la tina ya estaba llena y con agua caliente, vapor empapo la puerta de cristal
No lo pensó mucho y se metió sintió un ardor fuerte, lágrimas salían de el pero contuvo el dolor, el ardor y dolor lo superaba en ocasiones
Pasaron alrededor de treinta minutos cuando tocaron la puerta de gerald, el solamente miraba al techo sin responder al llamado — gerald soy yo jelena, no he escuchado ningún ruido de tu baño ¿estas bien? O¿necesitas algo? — pasos se oyeron cuando gerald no respondió — estoy bien jelena solamente disfruto del agua nunca había tenido la oportunidad de bañarme así que estaré por unos minutos mas — gerald respondió, un suspiro profundo resonó del otro lado de la puerta