Capítulo 3.—Recuerdo.

Los pájaros cantaron, voces sonaron Un hombre alto miraba a jelena a los ojos, Gerald como todos estaban en filas, camisas militares y una espada en su mano. 

Phantom gritaba órdenes, se movieron hasta un patio donde ya hacía varios obstáculos —¡BIEN ESCUCHEN CON ATENCIÓN. Subirán las escaleras con una tonelada en su espalda, aquel que no pueda cera castigado. Entendido —. Todos asintieron —¡no los escucho! —. Gritando mas —SI SEÑOR —Mostrando una sonrisa.

–Ahora vallan —corriendo y subiendo costales a sus espaldas empezaron a subirs, Jelena tubo problemas pero lo logro, eliphas lo consiguió, Muriel se cayó pero se levantó, Sus piernas temblando.

Raymond llegó después de muriel, ganondare llegó jadeando y vomitando, Gerald llegó muy apenas tirándose al suelo y inhalando como si la última gota de oxígeno se acabará.

Phantom apareció enfrente de ellos mirando con expresión de asco —Bien lo han logrado ¡ahora pasarán a nadar con la misma tonelada, muevan su maldito trasero niños, hay mucho que hacer hoy! —Maldiciendo Gerald se paro.

Bajando de nuevo la escalera con dos toneladas como castigo, Llegando a donde tenían que nadar. Un río profundo más de lo habitual Gerald se metió sin esperar órdenes.

Nadando, Llorando y jadeando, desmayándose en ratos Vomitando Logrando llegar al otro lado donde phantom ya lo esperaba —Bien el Gerald ha llegado primero puedes retirarte soldado. Mañana será mucho peor —terminando y Quitándose las toneladas.

Cruzó la puerta con toda la ropa mojada, cinco señoras sentadas tomando te y teniendo platicas de adulto Gerald paso de largo llegando a las escaleras de coral.

Subiendo, encontrándose con una qué otra sirvienta cuando alguien lo jalo de la mano. Raymond con toda la ropa vomitada en un escalón debajo de Gerald.

Gerald lo miró por segundos cuando respiro y se calmo rápidamente —¡Te parece s-si… cuando termines nos vemos e-en…! —hablando en voz alta, respiro tan acelerador que soltó a Gerald. 

Agarrándose de la pared, Se sentó. Gerald bajo un escalón mas —¡uh fue duro no Gerald, tener que soportar todo esto. Nunca pensé que fuera fácil pero tampoco imposible—rio a carcajadas. Gerald rio levemente y asintió.

Raymond se levantó camino junto a Gerald. —hoy en la noche no reuniremos en nuestro comedor y platicaremos, dale las gracias a tu compañera jelena. Te espero Gerald —dijo. Esperando la respuesta —estaré hay —Raymond sonrió, Entrando en su habitación.

Gerald se quito primero su vestimenta dejando caer todo lo puesto, viendo como sus heridas ya habían sanado. Habían pasado algunos meses, entrenamiento militar puro y duro. Su cuerpo empezaba a formar un físico marcado.

Su bañera con agua caliente, sumergiéndose y relajando cada músculo fatigado, Disfruto y gimió de placer al sentir su cuerpo relajado y disfrutando del agua.

La puerta de su habitación resonó, Jelena se quito la ropa y entró en su bañera el agua se oía caer en la madera fina, Jelena se dio cuenta que Gerald estaba en la habitación.

Gerald relajado lavo su cuerpo, Sus heridas ahora no eran mas que cicatrices, jelena como muriel lo habían sanado. Raymond hizo una amistad con eliphas y Ganondare. Gerald se hizo amigos de todos.

Salió del agua tirándola, recogió su tuya y se seco cada parte de su cuerpo su pelo ahora hasta sus hombros, lo seco dejándolo desabarrotado. Saliendo del baño vio a jelena ya cambiada.

Mirando a Gerald aparto la vista rápido. —me saldré para que puedas cambiarte Gerald —asintiendo en respuesta cruzó la puerta: vistiéndose con calcetas negras zapatos negros, una camisa blanca, atando su pelo de color carmesí.

Salió de la habitación encontrándose con todos sus amigos ya esperando afuera en el pasillo, hablando de temas como mujeres, comida. Muriel le dio un golpe a Ganondare en su brazo.

Riendo y riendo, Llegando al comedor donde tres jóvenes le sirvieron de comer. Gerald agradeció a las personas, fue el único que mostró modales.

Jelena tan tímida como siempre, Raymond miraba y comía su estofado con un pan recién ordenado Gerald comía un estofado igual que todos.

Phantom entró en la habitación su instructor en su primer año en la academia. Sentándose y ordenando carne, una mujer de pelo negro y ojos amarillos le sirvió comida, phantom agarro su trasero, ella cerró los ojos y mordió los labios. 

Gerald se alzó de la mesa espantando y tirando el estofado de algunos, Mirando a donde Gerald tenía sus ojos azules Vio como phantom tocaba tan descaradamente a la sirvienta. 

Sabía incluso que hacer algo seria un castigo grave pero fue ignorado por su mente Llegando a donde phantom quito su mano y la apretó tanto que phantom se retorció leve, viendo a Gerald, la joven llamada Xathanael ya había tenido platicas con Gerald.

La Avía defendido de tantos hombres que trataron de aprovecharse, recibiendo golpizas y regaños, Jelena como eliphas insistían en que no se metiera en más problemas.

Phantom se alzó y golpeó en él rostro a Gerald mandando a golpear las mesas de metal donde comían sus compañeros, Chillidos de Xathanael y las otras jóvenes criadas.

Gerald se levantó limpiando su sangre del labio, se paro firme y puso sus manos atrás —¿Qué es lo que haces soldado al ponerme tu maldita mano asquerosa en mi? —phantom dijo. Enojado y camino hacia Gerald —Es algo que no me gusta ver señor, tocar a otra mujer sin su consentimiento es algo que no se paga barato señor —Gerald no tenía miedo, Phantom dio otro golpe, recordando él pasado de como su hermana era golpeada por su padrastro, Esquivo el golpe inconscientemente. 

Provocando impresiones murmurando de los cocineros, phantom, se volvió con otro dos golpes, uno conecto en su esternón, Pero el otro fue defendido, Gerald golpeó al instructor.

Moviendo su cabeza, sangre salió de su boca y sonriente —Bien, bien muchacho. Es hora de acabar con esto —fuego apareció, formando un guante de fuego azul Corrió hacia Gerald, Alzando sus puños.