Comienzan los Problemas

Tras estar dos meses y una semana en cama, pude recuperarme por completo de mi enfermedad, la herida que esa cosa me hizo también está sanada y pude, creo, recuperar toda la sangre qué perdí entre el sudor, las lágrimas y la herida.

Nos han dado un día libre en la Escuela, ya que será la fiesta de cumpleaños del Princeso, este último me pidió que fuera su pareja para la fiesta, ya que Marina lo ha estado acosando y no quiere estar involucrado con “La Loca Espeluznante" como mis amigos la han bautizado....Siendo sincera, mis apodos son mucho peores porque, en específico, busco insultar a la persona en donde le duela, en el caso de Marina, para mí ella es el “Intento de Heroína" porque, hasta ahora, ella ha acosado a mis amigos, he intentado hacerme ver cómo si fuera una mala chica y jura que esto es un juego....Si sigue así, nunca será feliz, aunque ella intenta hacerme ver cómo la Antagonista que se supone que soy, no le tengo rencor u odio, para mí ella es indiferente, pero eso no significa que no me preocupe por ella, ya que al igual que yo, Marina es una reencarnada.

Cuando el Princeso me pidió ser su pareja para la fiesta de cumpleaños que se hará en honor, no voy a desmentir que me hizo feliz, ya que está seria mi primera invitación a una fiesta hecha por un chico, por lo cual acepte con una sonrisa, cosa que hizo que el Princeso se pusiera rojo.... Después recibí más invitaciones para la fiesta, ya que no estoy comprometida, pero la rechace, dado que ya había sido invitada de antemano por el Príncipe de este Reino, Cecil.

Ahora mismo, estoy con Lumi y Lia, en una tienda buscando un vestido para la fiesta que será en una semana más, ya que fui invitada por el Príncipe de nuestro Reino, debía de usar un vestido que estuviera a la altura de Ciel.

-Queria tal este vestido Rin- me dice Lumi mientras me muestra un pomposo vestido azul.

-Es bonito Lumi- le digo con sinceridad

-Este vestido se verá mejor en Rin- dice Lia mientras me muestra un vestido rosado con lila

-Lia mi cabello es rosado, creo que no se verá bien- le digo con honestidad a Lia.

Nos quedamos buscando vestidos hasta que veo que me encantó en cuanto lo mire, es azul con un estampado de estrellas

Miro el vestido y sonrió, ya encontré el vestido que usaré para la fiesta.

-Lumi, Lia, iré a probarme un vestido, así que después, por favor, díganme su opinión de cómo se me ve- les digo a mis amigas, mientras me acerco a la modista.

La tienda “Dreaming Girl" es una pequeña y desconocida tienda, donde venden vestidos maravillosos, los cuales han sacado más de un corazón en cuanto uno los ve, mi Madre es amiga de la principal modista de esta tienda, así que es totalmente normal de que todos mis vestidos, y en general ropa, vengan de aquí.

-Señora Marta, por favor, podría probarme el vestido estrellado- le pido a la modista, la cual sonrió.

-Sabes, pequeña Rin, ese vestido en particular, mi inspiración fuiste tú, así que si puedes probartelo- me dice con una sonrisa.

-Muchas gracias-

Con eso, me acerco al vestuario mientras la Señora Marta, me trae el vestido que me quito el aliento.

Tarde unos minutos en probarmelo, pero una vez puesto, salí para mostrárselo a Lumi y Lia.

-¿Cómo se me ve?- les pregunto a mis amigas.

-Rin, te vez hermosa- me dice Lia.

-Con ese vestido, solo lograrás, que ciertos chicos no te quiten la mirada- me dice Lumi, siendo un poco pícara.

-Eso es verdad, solo enamorarás más a esos chicos de lo que ya de por sí, estan- agrega Lia.

-¿Enamorar?- pregunto confundida, mientras Lumi y Lia se miran entre ellas.

-Rin.....A ti ¿Te gusta alguien?- me pregunta Lia.

-¿Gustarme alguien?-  sigo confundida.

-Rin, dinos sinceramente, ¿Estas enamorada de alguien?- está vez fue Lumi la que me pregunto.

Gustar y enamorarse....Términos que en mi vida pasada escuché pero jamás experimente, porque sabía de qué iba a morir antes de poder hacerlo....Esos dos términos son totalmente desconocidos para mí, no sé cómo se siente el gustar de alguien y mucho menos el enamorarse de alguien, se que a todos los chicos que son mis amigos les tengo cariño, pero ninguno hace que mi corazón se acelere con solo mirarlo o que mi cara se coloque roja por la vergüenza de sentir su tacto, por lo cual, una cosa es segura, se que no estoy enamorada.