El Festival de Primavera

¡Hoy es es Festival de Primavera!

Como suelo hacerlo, me levanté para ver el amanecer,vi como todo se iluminaba con la cálida luz del sol, además de que pude escuchar la voz de la ciudad mucho más animada que de costumbre, después espere a que Laura viniera y me ayudará a vestirme y peinarme. Hoy usaría el vestido azul que compre junto a mi Madre y tendría mi cabello rosado amarrado en una trenza alta.

Normalmente mi cabello lo amarro en dos colas, es mucho más fácil moverse con eso y no me llega tanto al cuello, por lo cual no es molestoso, teniendo en cuenta todo lo que suelo moverme.

-¡La pequeña Rin ya está lista!- me dice animadamente Laura, mientras termina de amarrarme el pelo con la cinta azul.

-Ahora debes de mirarte al espejo Rin- me ordena mi sirvienta personal, me levanto y me dirijo al espejo de cuerpo completo que pusieron para esta ocasión, al llegar miro mi reflejo.

Una niña pequeña de unos 6 a 7 años,  cabello rosado amarrado en una trenza que le hasta el pecho, brillantes y energéticos ojos verdes que demuestran gran felicidad y fuerza de voluntad, ataviada con un  vestido azul con patrón de rosas junto a una especie de guantes sin manos, de joyería unos pequeños aros de esmeraldas y una pulcera con la misma piedra preciosa...Está soy la actual yo, Rinne “Rin" Étoile.

-¡Te ves como un hada Rin! ¡Seguro que el Maestro, la Maestra y el Joven Azure se quedan sin palabras al verte!- me dice emocionada Laura, le doy una reverencia y sonrió.

-¡Estos días de libertad los disfrutaré al máximo! ¡ Ya quiero llegar a la ciudad!- comento con alegría a Laura.

-Recuerda que prometiste no meterte en problemas- me recuerda mi sirvienta.

-Prometí no hacer travesuras, meterme en problemas es otra cosa- le digo de forma indiferente a Laura.

Me gusta mucho moverme, una de las ventajas de tener un cuerpo sano, por lo que es normal no poderme quedar quieta, me gusta mucho hacer travesuras, cosa que no pude hacer en mi vida pasada, por lo que es totalmente que haga muchas actividades que requieren moverse, desde hacer mi propio jardín, hasta ayudar a los sirvientes o personas de mi territorio, pero lo malo es que hay veces que me meto en problemas y allí ya no sé ni cómo me metí en primer lugar....Esto es al punto, de que creo de que yo no soy la que busca problemas, son los problemas los que me buscan a mí.

-Solo se buena Rin- me dice Laura y me acaricia mi cabeza.

Me despido de Laura y voy al comedor, donde me espera mi familia, tanto Padre como Zure tienen flores en el bolsillo de sus chaquetas, y mi Madre esta usando un vestido del mismo color que el mío pero mucho más elegante, para que se note de que nosotras somos Madre e Hija, sonrió feliz ante ellos y tomo asiento al lado de Zure.

-Te vez muy hermosa mi pequeña Rin- me dice mi Padre dándome una sonrisa, cosa que devuelvo.

-¡El vestido te queda de maravilla, te vez como un hada!- me comenta mi Madre emocionada.

-Muchas gracias, Padre, Madre- les digo a ambos.

Zure me miro un poco y luego se sacó la rosa que tenía en su bolsillo y me la ofreció tímidamente, cosa que acepte sin dudar, con la rosa en la mano, la coloco en el centro de la cinta de mi pecho.

-Ahora te vez mucho más hermosa, Rin- me dice mi hermano.

-Muchas gracias Zure- le agradezco y sonrió más ampliamente.

En el Festival de Primavera, los hombres le regalan flores a las mujeres, dependiendo del contesto del regalo, este puede significar muchas cosas, si son flores regaladas entre familiares, significa amor familiar, si son regaladas con distintos colores entre amigos, es confirmación de una amistad duradera, pero si son flores variadas, usando el lenguaje de las flores, y con colores que concuerdan con el color de ojos o de pelo del hombre, significa que quieren un cortejo, es decir, una declaración...No es raro decir que en el Festival de Primavera es donde más parejas se forman, ya sea de compromiso o matrimonio.

Zure me dió una rosa blanca, en el lenguaje de las flores, significa inocencia y pureza, como somos familia, por eso la acepte sin dudar.

Desayuno con mi familia, fue tranquilo ese lapsus de tiempo, pero mi Padre me recordó constantemente que no debía meterme en problemas, además de que nos dijo a Zure y a mi que a las 20:00 debíamos de estar en la fuente de la plaza para podernos irnos a casa, cosa que Zure y yo estuvimos de acuerdo.

Con eso, nos retiramos del comedor y nos fuimos al carruaje para irnos a la ciudad, nuestro viaje fue tranquilo, mi Padre quería participar en las batallas y Zure lo acompañaría, mi Madre quería conversar con sus amigas y yo por mi parte quería hacer tantas cosas como fuera posible.

Al llegar, mi Padre me miro.

-Recuerda Rin, no hagas travesuras y llega a la fuente a las 20:00 para irnos a casa- me vuelve a recordar, cosa que asintió en respuesta.

-Ahora anda tranquila y diviértete Rin- !e dice con una sonrisa, con eso ya puedo irme tranquila.

Me separo de mi familia y comienzo a recorrer el Festival, flores se pueden ver doquier, creando un arco iris terrenal, olores de distintas comidas se pueden sentir, sonidos alegres de las risas de las personas, música apta para bailar, las personas de las tiendas gritando y ofreciendo sus productos,¡La ciudad está animada!.