La heredera de Lyuvov (libro 1)

Capítulo 24: “La espada”

Todos están desconcertados, este asunto es más delicado de lo que pensamos. Corrí a mi habitación a buscar alguna pista que me ayudara a entender. Tal vez Dard en el apuro cometió un error. Justo en el ventanal de la entrada hay un mensaje, escrito con lo que quiero creer que es pintura roja.

"Kolie Zavet, tú no eres la heredera de Lyuvov. Yo soy quien debe ocupar ese lugar. ¡Farsante! Despréndete de mi collar o tu amiga pagará las consecuencias."

—¿Es sa... san... gre? —escucho tartamudear a Marie.

—Ya nuestros expertos lo están analizando, aunque por la textura opino que no debe ser humana —le responde el director, con todo el alboroto no lo vi al entrar.

—El cómplice ha sido neutralizado —dice Joseph situándose detrás de mí—. A la profesora Gluf le suministraron un veneno para neutralizar sus poderes.

—¿Se pondrá bien? —pregunté con preocupación.

«Pobrecita, me cae muy bien, no quiero que le ocurra nada malo. Dard, cuando te atrape en serio vas a pagar tanto mal que has causado» pensé.

—Seguro que sí.

—Josh, ¿qué ha dicho el cómplice?

—No nos ha dado mucha información. Nada que ayude a saber donde está escondido Dard con Kate. Han probado muchos métodos, pero este hombre parece no saber ningún detalle.

—No puede ser, ¡¿cómo rayos entró a la biblioteca?!

—Hace algunos años fue profesor en la academia —interviene el director—. Tuvo que tomarse unos años de descanso porque en su organismo se detectaron células cancerígenas malignas.

—¿Por qué hizo esto? —pregunté furiosa. La sangre me hierve de solo pensar que un buen hombre se prestó para ser parte de la obra macabra de un asesino.

—Creemos que Dard le pagó —me informa Joseph—. Jonás, el cómplice, tiene una hija y varias deudas. Está a punto de morir e iba a dejar a la chica quebrada y encima, endeudada a hasta el tope. Descubrimos que justo ayer todas sus deudas fueron saldadas.

—Increíble, incluso aquí el dinero tiene su poder destructor y su importancia sobrevalorada. ¿Alguien sabe cómo un estudiante vio a mi abuelo si el hombre de la biblioteca usaba máscara?

—Probablemente ese estudiante también fue comprado, ya lo están interrogando —me aclaró el director.

—Gluf está bien, ha recuperado movilidad en sus extremidades —informa Fabio entrando como rayo por el elevador—. Kolie, ¿estás lista?

—¿Para qué?

—¿Cómo para qué? Vamos a buscar a Dard.

—Fabio, no tenemos idea de a dónde se esconde.

—Dard... Es tonto —sonríe con malicia—. Los que dominamos los cuatro elementos no somos pocos, pero tampoco hay una cantidad exuberante, por lo que a todos nos colocan un dispositivo de rastreo, por seguridad.

—¿Revisaste que esté activado? —interroga Josh levantando una ceja.

—Fue lo primero que hice. —De su bolsillo saca un teléfono y nos muestra un mapa en la pantalla con un punto rojo en movimiento.

—¡Perfecto! —exclamo con una notable sonrisa.

<Te tenemos Dard> pienso mientras caminamos al elevador. Marie y Andrea nos acompañan, ese monstruo no tiene escapatoria.

—Kolie, ve primero a la biblioteca —pide Armin, su voz tiembla.

—¿Para qué?

—El arma de mi padre, debes usarla, presiento que Dard... Te va a tender una trampa.

—¿Ves cuántos somos? Joseph, Fabio, Marie, Andrea y yo, cinco poderosos seres mágicos. ¿En serio crees que Dard tiene oportunidad contra nosotros?

Diviso a mi padre subiendo la escalera de los dormitorios con el insufrible de Víctor. Ambos parecen cercanos, cosa que no me agrada en lo más mínimo.

—Kolie, hija, te presento a Víctor. Él es hijo de un buen amigo mío, también es muy poderoso. Desea ayudar en la captura de Dard.

—Señorita Zavet, pongamos a un lado nuestros primeros encuentros. Esto es algo muy serio.

—Tienes razón. Puedes ir con nosotros, pero cuidado, un paso en falso y te vas a arrepentir —no lo estoy amenazando de forma real, pero él no sabe eso. Me aprovecho de que le teme a Armin y sonrió para mis adentros.

—Ahora son siete —valora Armin.

—¡Ves! —estoy emocionada por encontrar a ese maldito, por conocer sus motivos internos. Estoy segura de que no todo se debe a la maldición del anillo.

—Bien —grita Joseph en medio del campo de entrenamiento—. Como saben esto será peligroso, quiero que todos estén seguros de querer venir. ¿Tienen un motivo fuerte?

Todos asentimos con la cabeza.

—Marie y yo somos amigas de Kate, no podemos abandonarla —Andrea se aferra a la mano su novia. Supongo que tiene miedo, es normal, sin embargo admiro el valor de esas chicas al sobreponerse a sus temores para ayudar a un ser querido.

—Yo creo que mis motivos son más que fuertes —admite Fabio totalmente serio y con la mirada sin emociones que lo caracteriza.

—Yo deseo lo mejor para el reino Armin —añade Víctor. No puedo evitar pensar que hace todo esto para caerme en gracia.

—Mi hija y yo tenemos motivos fuertes, nuestra familia prácticamente colapsa gracias a ese monstruo —la voz firme e imponente de mi padre transmite confianza entre todos los presentes. Su poder es asombroso.

—Todos estamos listos, Josh, es tiempo de hacer pagar a Dard —sonrió y continuamos avanzando.

Joseph nos guía hasta una nave enorme metálica. Tiene varios pies y parece blindada y fuerte, logro ver algunos cañones de ataque, no hay dudas es un vehículo de guerra. No creo que sea necesario para atacar a Dard, aun así es impresionante.

—Kolie, el arma de mi padre —gritó Armin.

—Uy, está bien —digo en voz alta y todos me miran—. Armin quiere que busque el arma de su padre en la biblioteca.

—¿Será necesario? —interroga Joseph, por algún motivo siento que esa pregunta no era para mí.

—Dile que sí, cuéntale mi temor de que sea una trampa Kolie, por favor.

—Si, Josh, Armin piensa que es una trampa.

—Yo la llevo —dice Fabio antes de que Joseph pueda asimilar la información de que su poderosa hermana tiene miedo.



#7610 en Fantasía
#3980 en Thriller
#2185 en Misterio

En el texto hay: magia poderes y secretos

Editado: 27.12.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.