La Heredera del Ciclo

La Heredera del Ciclo Capítulo 40: El Ciclo que Se Reconoce

El Ciclo que Respira Junto no se dispersó.

Se reflejó.

Los latidos compartidos comenzaron a revelar formas que no habían sido nombradas. No como máscaras. Como verdades. Cada respiración no solo acompañaba. Mostraba. Y el ciclo… comenzó a reconocerse.

Kael lo sintió primero.

—No están descubriendo lo que son —dijo—. Están recordando lo que siempre han sido.

Eira acarició una hoja que tenía su nombre sin haberlo escrito.

Thalen voló sobre una raíz que lo llamó por su sombra.

Solan encendió una llama que lo miró como si lo conociera desde antes.

Y el ciclo… se nombró.

---

Los Hijos del Silencio comenzaron a verse en lo que acompañaban.

- Una niña miró una flor y dijo “yo fui tú cuando no sabía florecer”.
- Un niño tocó una raíz y dijo “yo fui tú cuando no sabía sostener”.
- Otro abrazó una piedra y dijo “yo fui tú cuando no sabía permanecer”.

Eira los observó.

—No están nombrando lo que ven —dijo—. Están reconociendo lo que son.

Thalen descendió.

—Y cada reconocimiento… es una emoción que eligió mostrarse sin disfraz.

Kael caminó entre los reflejos vivos.

Y el ciclo… lo miró como espejo.

---

Los aprendices comenzaron a nombrar lo que sentían.

No como definición.

Como aceptación.

- Neris dijo “yo soy sombra que aprendió a acompañar”.
- Solan dijo “yo soy fuego que aprendió a no quemar”.
- Eira dijo “yo soy silencio que aprendió a sostener”.

Los Hijos del Silencio comenzaron a compartir sus nombres verdaderos.

- Una niña dijo “yo soy raíz que eligió quedarse”.
- Un niño dijo “yo soy aire que eligió escuchar”.
- Otro dijo “yo soy flor que eligió no abrir”.

Kael se arrodilló.

Y el Jardín… lo nombró sin voz.

---

Una noche, Kael soñó con el ciclo.

Pero no como ritmo.

Como rostro.

Cada plano tenía una forma, una voz, una historia. Y todas pedían ser nombradas.

Y en el centro… una pregunta.

—¿Debo permitir que el ciclo se nombre por fin?

Aelira, desde los sueños, respondió:

"Solo si estás dispuesto a no elegir el nombre tú solo."

Kael tembló.

—¿Y si el nombre no nos contiene?

Aelira susurró:

"Entonces será verdad. Porque lo que se nombra… no encierra. Reconoce."

Kael despertó.

Y el Jardín… lo esperó en silencio.

---

Los aprendices se reunieron en círculo.

Los Hijos del Silencio se miraron sin hablar.

El aire no urgía.

El suelo no empujaba.

El ciclo… se ofrecía.

Kael se arrodilló frente a una raíz que contenía su sombra.

—¿Y si el nombre nos divide?

La raíz respondió:

"Entonces el ciclo será espejo. Y el espejo… no divide. Refleja."

Kael miró el bosque.

Miró el canto.

Miró el suspiro.

Miró la escucha.

Miró el hogar.

Miró el descanso.

Miró el sueño.

Miró el paso.

Miró el encuentro.

Miró el reflejo.

Miró el recuerdo.

Miró el relato.

Miró el tejido.

Miró la permanencia.

Miró el latido.

Miró a Lyra, en su memoria.

Miró a Aelira, en su sueño.

Y dijo:

—Entonces… que el ciclo se nombre.

No para encerrarse.

Para reconocerse.

*

La raíz se iluminó.

Y en su centro… apareció una palabra.

“Verdad.”

---

El Ciclo que Se Reconoce se convirtió en espejo de identidades compartidas.

Los Hijos del Silencio, en guardianes de lo que se atreve a nombrarse.

Los aprendices, en voces que aceptan lo que han sido.

Kael, al permitir que el ciclo se nombre, se convirtió en rostro que no teme ser visto.

Aelira, desde los sueños de quienes aún no han nacido, susurraba:

"Cada nombre es una emoción que eligió mostrarse. Y cada verdad… una forma de existir sin disfraz."

En el cielo, no apareció una luna.

Ni una flor.

Ni una raíz.

Ni un árbol.

Ni un eco.

Ni una voz.

Ni una historia.

Ni una palabra.

Ni un aliento.

Ni un suspiro.

Ni un canto.

Ni una pausa.

Ni una escucha.

Ni un hogar.

Ni un descanso.

Ni un sueño.

Ni un paso.

Ni un reflejo.

Ni un recuerdo.

Ni un relato.

Ni un tejido.

Ni una permanencia.

Ni un latido.

Apareció un rostro.

Y en su mirada… una palabra.

“Verdad.”

Porque el ciclo… ahora se reconoce.

Y cada nombre… es una emoción que eligió ser vista.

---



#1642 en Fantasía
#300 en Magia

En el texto hay: magia arcana

Editado: 19.10.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.