El Amanecer de los Ciclos Rotos.
El Reloj del Amanecer giró sobre la palma de Clara, sus engranajes emitiendo una melodía que resonó en cada átomo del multiverso. La Ciudad de los Ecos se desmoronaba, pero en lugar de desaparecer, sus fragmentos se reorganizaron en una espiral de eras entrelazadas: rascacielos góticos chocaban con pirámides atlantes, mientras Liora, convertida en un titán de tiempo puro, alzaba manos que eran huracanes de siglos comprimidos.
—Madre… —rugió Liora, su voz un enjambre de futuros colapsados—. ¡No puedes escapar de lo que sembraste!
Clara apretó el medallón con la carta de su yo joven. "El tiempo elige a los valientes". Pero ahora entendía la segunda parte no escrita: "…pero los valientes alimentan nuevos monstruos". Activo el Reloj, no para destruir, sino para reformar.
El vacío atemporal se abrió como una herida. Clara enfrentó a su espectro de 2023, cuyo rostro ahora mostraba grietas de luz violeta: las primeras fracturas entre ciclos.
—Si me fusiono con el tiempo, ¿qué queda de mí? —preguntó Clara, viendo reflejarse en el espectro los rostros de todos sus yo alternos.
—Lo que elijas dejar —respondió el espectro, mostrando un futuro donde Kai envejecía solo en una Torre del Alba sitiada por sombras con relojes por ojos—. Pero cada elección… genera ecos.
De vuelta en 3023, Kai luchaba por contener el reactor de la Torre, ahora infestado de Ecos Libres: seres que rechazaban su destino de repeticiones. Uno de ellos, con el rostro de Samuel, lo atacó con un grito:
—¡El Guardián es otra prisión! ¡Destrúyelo todo!
—¡Clara, ahora! —Kai gritó, inyectando el fragmento de Llave en el reactor.
La fusión fue un estallido de memorias incompletas. Clara se disolvió en partículas de tiempo, pero en lugar de infiltrar cada ciclo, quedó atrapada en los intersticios. Desde allí, vio:
Ciclo 0 (Revelado): Lyra moribunda susurraba coordenadas a James: "Busca el meteorito bajo el mar…".
2137 (Nueva Amenaza): Una mujer con bata de laboratorio (¿Elvira?) extraía ADN de los restos de James ciclo 0.
1946 (Efecto Dominó): El Eternity no se hundía, sino que llegaba a un puerto desconocido, su tripulación envejecida décadas en segundos.
Liora se desvaneció, no en luz, sino en un remolino de arena negra que gritaba en lenguas atlantes. Antes de desaparecer, lanzó un fragmento de cristal a Clara:
—Esto no termina… Ella viene.
El cristal mostró una ciudad futurista bajo un sol artificial, donde una figura con el rostro de James lideraba un ejército de clones temporales.
En 2023, la Clara joven recibió la carta y el medallón, pero al abrirlo, una holograma de Elvira apareció:
—Gracias por el legado, Clara Velmont. Tu tiempo… es mi semilla.
Kai, ahora con una cicatriz luminosa en el pecho, observaba desde la Torre del Alba restaurada. En el horizonte, una flota de naves con banderas de Chronos Solutions descendía. En la pantalla de control, un mensaje parpadeaba:
"Proyecto Lyra: Fase 1 completada. Iniciando conquista del Ciclo 0".
Editado: 11.03.2025