La Hermosa Chica

El encuentro en el restaurante

-Puede ser algo atrevido Karen pero puedes desayunar conmigo veo que no hay muchos clientes-.Le dijo Esteban muy apenado y tartamudeando.

-Bueno la verdad no sé si pueda hablar contigo cuando estoy trabajando aún cuando no tengamos clientes, pero me voy a arriesgar si me regaña estarás en deuda conmigo-. Le dijo Karen mientras tomaba el asiento y se sentaba enfrente de él, algo ruborizada.

Ambos estaban de frente, a  simple vista se parecía una pareja de enamorados, ambos deseaban estar tomados de la mano, más aún que sus cuerpos estuvieran cerca; Karen llevaba su falda color negro y su blusa de larga mangas color blanco, sus labios estaban pintados de color rojo y su cara parecía tener mucho maquillaje pero era su cara natural no necesitas nada más pues era muy hermosa ante los ojos de Esteban, esos ojos color miel que lo hipnotizaban. Esteban tenía una camisa color negro con un pantalón color caqui y unos zapatos color negro. Ambos estaban felices por haberse encontrado.

-Te puedo hacer una pregunta Esteban-. dijo Karen algo sonrojado.

-Claro pregúntame lo que quieras-

-Alguna vez te has preguntado para que venimos al mundo-.Le dijo Karen mirándolo fijamente.

-Sí me sorprendió esa pregunta- Le dijo Esteban.

-Sabes que, mejor no me lo respondas, es solamente una idea que fue divagando en mis pensamientos- Le dijo Karen.

-Yo también me lo he preguntado Karen, cada día para mí es algo cotidiano, siempre hago las mismas cosas y algunas veces me he preguntado si solamente para eso existimos, yo creo que llega un momento en la vida en la cual alguien le da sentido, alguien le da ese ánimo o más bien alguien le da ese sabor a la vida del otro;y lo puedo ver con mis papás que aunque tengan problemas, aunque discutan, siempre están juntos. Mi papá me ha dicho que antes de que se acuesten, si alguien cometió un error pide perdón, aunque no quiera aceptar el otro por estar enojado, al dia siguiente ambos se piden disculpas. Así es que veo que ellos siempre están felices, no es que siempre tengan una sonrisa en su cara, pero siempre hay esa comunicación y ese respeto etre ambos-. le dijo Esteban mirando a Karen.

-Creo que has tenido una buena familia en cambio yo, dejamos a nuestro papá en la ciudad de Monterrey, mi papá tomaba mucho y eso ocasionaba que se peleará siempre con mi mamá, y que mi mamá se desquitara conmigo y con mi hermanito. Sabes siempre que miro mi pasado en la secundaria recuerdo solo escenas de tristezas, creo que no tuve una infancia, una adolescencia en la cual yo pueda decir que fui feliz, sin embargo, he tratado de encontrarle sentido a la vida, y  tal parece que es difícil, no sé cómo afrontarlo aveces, pero me aferro y me digo a mi misma que puedo hacerdo-. En sus ojos empezaban asomarse unas lágrimas, y para intertar ocultarlo voltio su cara a la ventana.

Esteban muy impactado ante la historia de Karen y más aún que ella hubiera tenido tanta confianza para contarselo. Vio que sus ojos empezaban  asomar las lágrimas, el inconscientemente se levantó de la silla  se acerco a ella y tomando su cabeza lo puso en su pecho mientras acariciaba su cabello -no tienes que llorar Karen, estoy aquí para ayudarte, para consolarte, quisiera volver a tu pasado y poder cambiarlo para no verte sufrir.

 




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