"La Hija de Cupido"

• Capítulo 6 •

Los labios de Leo se movían rudos, rápidos, fuertes y precisos sobre los míos, sin ningún tipo de compasión aparente, sus manos no se hicieron esperar en mi cuerpo, empezando por mi cintura mientras de a poco se desplazaban hacia abajo en busca de mi ropa interior, su lengua buscaba la mía con desesperación y rudeza, pero no era la rudeza que a mi me agradaba, y mucho menos para nuestro "primer" beso.

Sus manos firmes y frías se colaron dentro de mi ropa interior, manoseando mi trasero sin ningún tipo de pudor, gruñía en medio del beso como un animal salvaje y yo cada vez me espantaba más, no se como permití y fui tan impulsiva en permitir que me besara. Cuando sus manos salieron de entre mis bragas, sentí un alivio como ningún otro pero la desesperación volvió cuando dirigió sus manos en busca del broche de mi sujetador, en definitiva algo no andaba bien,debía estar completamente enfermo para creer que yo me entregaría a él tan fácil. Intenté luchar contra su cuerpo,pero él me superaba en estatura, peso y fuerza, luego de unos minutos intentando separar mis labios de los suyos,noté que el delicioso aroma que desprendía había desaparecido por completo, se había ido el olor a chocolate, bosque y mar, y seguía sin entender el porqué. Me encontraba tan sumida en mis pensamientos que no me había dado cuenta que Leo había ya desprendido por completo mi sostén, mientras procedía a ponerse a la altura de mis pezones para lamerlos,mis lágrimas picaban e intentaba tragar aire para no llorar ,pero, un fuerte olor volvió a impactar en mis fosas nasales,junto con una voz que me produjo escalofríos.

- si quieres continuar viviendo,alejate de ella - dijo un voz profunda que yo ya conocía o creía conocer.

La misma voz del chico que se encontraba desnudandome.

Giré mi cabeza para observar si no era mi imaginación la que fallaba por tanta desesperación,pero no, efectivamente ahí se encontraba Leo parado, con una camisa blanca remangada hasta los codos y unos jeans negros junto con converses, su cabello era una maraña negra y sus ojos estaban rojos llenos de furia observando la escena.

Pero seguía sin entender que sucedía,si este era Leo o era aquel?

- vaya,vaya pero si eres tú - exclamó la persona que me sujetaba, haciendo que con su sola voz me recorriera un escalofrío de la cabeza a los pies - haz venido a salvar a tu princesa? Por cierto, es d.e.l.i.c.i.o.s.a "Leito" - deletreando la penúltima palabra con burla.

Y si, efectivamente el que me sujetaba no era Leo. Aunque ambos seguían teniendo el mismo rostro.

- dejala en paz y sueltala ahora mismo - gruño Leo con furia, mientras apretaba tanto sus manos en puños que se iban volviendo blancos.

- no lo creo - respondió riendo cínicamente - aunque...- fingió pensar un momento - si, tal vez si...si ella quiere ir contigo si, ese será mi regalo para mi futura esposa - soltó observando mi reacción de total miedo, que era lo que sentía - quieres ir con él? - preguntó con ternura fingida,mientras observaba mis ojos llenos de terror.

- si - respondí de la manera más firme que encontré.

- bien,toma - exclamó tirando mi cuerpo hacia el frío suelo frente a Leo, quien en un abrir y cerrar de ojos se encontraba a mi lado mirándome con una expresión preocupada en el rostro, aunque eso solo duró un segundo ya que rápidamente la preocupación dio paso a la furia pero no dirigida a mi, o eso esperaba. Se puso de pie elegantemente enfrentando al impostor.

- vete Liam - soltó Leo enojado.

- me voy, pero volveré, por ella,la haré mía cueste lo que cueste - respondió el muchacho el cuál ahora ya sabía su nombre: Liam.

- no es mi maldita culpa que hayas matado a Rachel, pero te juro que por sobre mis putas cenizas te llevarás a Alexandra - sentenció con una voz que logró poner mis pelos de punta.

- ¡No menciones a Rachel maldito bastardo! - exclamó enfurecido - sobre tus cenizas eh? Pues bien, si así lo haz querido que así sea - respondió cínicamente con una sonrisa diabólica enmarcando su rostro.

- Hades sabrá de todo esto - dijo Leo con voz neutra - y cuando sepa de todo esto, ya no habrá nada que pueda impedir matarte si intentas acercarte a ella - acercándose peligrosamente hacia él, quedando tan solo a centímetros de su rostro. Eran idénticos pero no sabía si aquello era también una ilusión.

- hace mucho que dejo de importarme su opinión, en cuanto a ti, no cantes victoria antes de tiempo Leito, hay que ver quien mata a quien - sonriendo con una sonrisa macabra.

- que así sea - concordó Leo con una sonrisa helada en el rostro, mientras sus ojos pasaban de rojos a negros.

De un instante a otro Liam había desparecido en el aire, sin dejar nada a su paso, no siquiera polvo mágico o algo como se veía en las películas. Apenas desapareció Liam el semblante de Leo camino hacia donde me encontraba, aún tirada en el piso frío.

Al estar frente a mi, me ayudo a ponerme de pie, y me envolvió en sus brazos de manera sobreprotectora, sin importarle el hecho de que yo me encontraba sin sostén y solo en bragas, hundí mi cabeza en su pecho, aspirando su aroma tan adictivo, y estirando mis brazos lo abrace yo también, sollozando como una idiota contra su fuerte cuerpo.

- ya,ya, todo va estar bien - susurró con voz dulce, repartiendo besos en mi cabello y aspirando mi perfume, que al parecer lo tranquilizaba muy en el fondo - que fue lo que te hizo? -preguntó con voz tierna, acariciando mi cabello yo tan solo negué con la cabeza - si me lo dices, iré a matarlo ahora mismo - dijo divertido, lo cual fue contagioso, aunque no entendía el porqué - estas bien Alex, no? - preguntó sonando preocupado.

Me había dicho Alex, aquello sonaba hermoso viniendo de él.

Lentamente fui quitando mi cabeza de mi escondite improvisado, observando su semblante preocupado y sus ojos oliva y miel, se veía realmente hermoso con aquel ceño fruncido con preocupación.

- lo estoy Leo - respondí lo mas sincera posible. El observaba mi rostro como buscando algún rasguño o alguna herida, soltó aire aliviado, al no encontrar nada.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.