La hija del laverinto

Nueva casa, ¿Nueva yo?

el vesindario se beia algo tranquilo, casi no habia jente a fuera y las pocas personas que se encontraban, se veian hablando con demas vesinos y se quedaban callados cuando veian el carro pasar frente a ellos, al pareser tods se conosian a la perfeccion como para disinguir un carro que no es del vecindario y auque era la primera vez que iba a ese lugar, sentia como si ella ya hubiera estado ai hase bastantes años, mas de los que podria tener lo cual resulta imposible por que como e dicho antes a ustedes, era la primera ves que se encontraba en tal lugar.

-La casa se encuentra amueblada y tieme llena la despensa, solamente tienes que encontraralgun trabajo por ahora- dijo Lalamientras inspeccionabamos la casa, la cual se encontraba en un barrio de los suburbios bastante tarnquilo- asi que si tienes algun problema no dudes en decirnos, siempre contaras con nuestro apoyo en especial con el mio- dijo mientras le entregaba las llavez de la casa

despues una hora hablando Lala con Melania hacerca de su nueva vida ella se marcho dejandola a ella sola en la casa.

-Bueno, es hora de empesar a desempacar y de hacerme algo de desalluna- se dijo a ella misma mientras realizaba esas cosas. la ma;ana no fue muy movida ya que tenia solo que desempacar su ropa y acomodarla en el closet que le habian puesto en su avitasion, que, para jusgar era bastante feo y pequeño a su gusto. ella hubiera preferido un closet mas ancho y pintado de un color negro o rojo oscuro y no uno color rosa como si fuera una niña de cinco años con deseos de ser princesa disney. lo unico que le gustaba de su habitasion era el espejo que tenia el cual era de cuerpo completo, porlomenos no era de algun color muy llamativo el borde de el, hasi podria ver el reflejo de su piel morena con mas tranquinidad con sus ojos heterocromaticos encajando a la perfeccion con su cuerpo, mientras el derecho era color miel, el izquierdo era color azul.

comensaba a ponerse el sol y lo unico que habia hecho Melania es limpiar la casa cuando depronto escucha el timbre de su casa, en un principio desidio no hacerle caso pero al ver la insistencia desidio habrir la puerta, era una niña junto con su madre, al parecer eran la vesinas de al lado las cuales al verla llegar con un equipaje a la casa pensaron que alguien nuevo se habia mudado ya que el dia anterior vieron los camiones repletos de muebles para aquel hogar.

-Buenas tardes vesina, mi nombre es Sandra y esta pequeña es Melanie, mi hija, solo tiene ocho años- dijo la vecina de al pareser unos treinta y dos años de edad  de forma amable. enseguida Melania se puso a obserbar el aura de las dos para saber que tan amables son en realidad, el aura de la señora se torno de color gris, lo cuañ queria desir que la amabilidad que presentaba era solo una cara agradable sin sentodo para ella ya que la otra mostraba su veradera forma de ser,era una persona egoista y muy odiosa cuando se encontraba con alguien que no era de su nivel aunque ella no fuera rica de dinero sino mas bien pobre, la descripsion de la personalidad de ella seria pobre y ambisiosa, pertenesia al grupo de las personas que deberian de ser eliminados ya que ella no dudaria en destruir al las personas demanera social si se lo propone.

por otro lado el aura de la niña era blanco, lo cual queria desir que ella aun no era absorbida por los deseos y la forma de ser de su madre si no que su haspirasion se encontraba con otra persona, probablemente era su padre o algun otro familiar que sea verdaderamente bueno con la gente, pero en definitiba se podria sacar tambien otra conclucion y es que aun es muy inocente como para saber el daño que hase su mabre, si es asi ella tambien tendria que ser eliminada.

- disculpe¿Se encuentra bien?- pregunto Sandra 

-Si, disculpe mi nombre es Melania y se escribe tal y como se pronunsia.

-Bueno, de cualquier forma te traigo este pastel de vienvenida el cual lo hise yo misma en una de mis panaderias- dijo Sandra

-Si gracias

-Disculpa la molestia pero ¿A ti no se te a aparesido un Fantasma de una niña?-pregunto sandra

-Acabo de llegar asi que no

-Pues yo creo que deberias tener cuidado ya que todos los vesions ateriores se fueron y me dejaron vender la casa por que hay un fantasma, creo que deberias hacer lo mismo- dijo Sandra

-No se preocupe, si tengo algun problema paranormal no tardare en traer un exorsista a la casa y se solucionarael problema- respondio Melania dondose cuenta de que practicamente lo que asia la vecina es correrla sin nisgun motivo aparente

- Tenes toda la razon, ¿como no lo habrian pensado los demas vecinos antes de irse y dejarme la casa par ayudarles a venderla verdad? bueno, este.......... nos vemos luego vecina- dijo ella de manera neviosa ya que no se esperaba la respuesta de melania.

-Asta luego vecina- respondio soriente luego de su triunfo, no sabia lo que le esperaba 

llego la noche y con ella las ganas de dormir para Melania asi que despues de cenar se acosto y se fue a dormir a la habitacion principal. ya eran las dos de la mañana cuando se empasaron a escuchar, los llantos de una niña desde la otra habitacion, por un momento penso que era la hija de la vesina la cual se habia metido por ordenes de su mamá hasi que se diriguio bastante segura a la otra habitacion la cual se encontraba exactamente al lado, al momento de habrir la puerta se topo con una niña totalmente diferente. la niña tenia los ojos verdes, el pelo ondulado color cafe, paresia manar sangre de sufrente, su piel era de un color gris y su aura era de color morado, en definitiva era la fantasma de la cual la vecina desia adbertirme.

su aura de color morado significaba que era un alma confundida en el caso de ella queria desir que el asunto a atender no se deribaba en estar presisamente en la tierra si no que ella puede ser una criatura que solo diambula en busca de algo haciendo lo que no es debido como algo correcto.




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