Una historia 3/3

La bebé al igual que la niña era ignorada y despreciada por su familia. La niña le pidió a sus padres que pusieran la cuna de la bebé en su cuarto, ya que ella dormía sola y el cuarto era bastante grande, los padres aceptaron, ya que así no tendrían que escuchar a la bebé gritar todas las noches y ellos podrían dormir tranquilos.

La niña empezó a encariñarse con la bebé y a comprar le todo lo que la bebe nesecitaba, la habitación de la niña ahora aparte de tener lo mencionado anteriormente, ahora tenía: un baúl al lado de la cuna lleno de juguetes, una mesita de noche con una lámpara con forma de oso, un pequeño ropero con su ropa y la de la bebé, y una gran alfombra de muchos colores.

La niña se sentía muy feliz cuidando de la bebé, de vez en cuando la llevaba, con la hija de la familia Gallardo. La cual era una bebé muy linda y ambas inocentes se llevaban muy bien, los días que la niña no trabajaba, cuidaba de ambas bebés, aunque los Gallardo la miraban con desconfianza.

Así paso un año, el día del cumpleaños de la bebé, la niña después de salir del trabajo, paso a una pastelería y compro un pastel y una velita para la bebé, quién a pesar de su corto tiempo de vida, había demostrado un gran amor por los dulces, junto con un bello vestido que encontró en una tienda, cuando llegó a su casa se dirigió lo más rápido posible a su cuarto para no toparse con ninguna de sus hermanas. Cuando llegó iso una pequeña celebración para felicitar a la bebé por su primer año de vida cumplido, y pará compensar el no haber estado con ella en todo el día, para ser tan chiquita y con una mente poco desarrollada, la bebé se enojaba cada vez que no la veía a la niña en todo el día, haciéndose la difícil para comer a la hora de la cena.

Esa misma noche la niña después de acostar a la bebé, escucho que alguien abria la puerta, por miedo que sea un ladrón, fue a ver qué era, bajo las escaleras y vió a sus padres en la entrada y hablaban con alguien a quien ella nunca había visto. Se escondió para escuchar que decían y lo que escucho la de dejo impactada, tanto que al querer irse, se tropezó, cayéndose provocando que la oyeran.

La niña trato de levantarse y correr, pero ya era tarde la habían visto, unos señores la agarraron por los brazos, ella empezó a gritar esperando que alguna de sus hermanas oyera y la intentase ayudar, pero fue inútil, la llevaron al sótano de la casa, el cual era un lugar prohibido por qué había muchas ratas y cucarachas decían los padres, lo que pasó a continuación fue una tortura horrible, cuando por fin se aburrieron la pusieron en una gran bolsa, para su suerte nunca se desmayó por lo que vio todo lo que le hicieron y la bolsa en la que la pusieron. Luego se la llevaron asta lo que ella reconoció como un bosque, donde la tiraron para que muriera allí, lo que pasó con el transcurir de las horas.

Ella paso sus últimos momentos de vida, tirada en el suelo agonizando de dolor y añorando, volver con su hermanita.

Ella nunca se arrepintió de lo que escucho, ni de lo que vivió, ya que ella no le guardaba rencor a las personas que la mataron, ni a su familia que la despreció, en sus últimos pensamientos ella solo tenía un deseo y era volver a ver a su hermanita y darle un abrazo final.