Era sábado por la tarde y me encontraba con Rachel y Adina a las afueras de mi casa. Adina me había obsequiado en mi cumpleaños una patineta, ya que hacía un tiempo yo anhelaba tener una.
Las tres estabamos practicando como se utilizaba ya que no teníamos ni la mínima idea de como se obtenía equilibrio. No obstante, tras múltiples intentos al fin conseguimos movernos un poco; mientras Adina conseguía mantenerse en pie con el objeto, Rachel fijó la vista en mi e hizo una mueca en señal de que viera hacía la dirección en donde observaba. Y sorpresa, Laker otra vez estaba mirándome pero en esta ocasión no estaba solo, su pequeña hermanita estaba al lado de él. La pequeña Sammy contaba con siete años de edad.
La pequeña Laker me observó y me saludo.
—¡Le gustas a mi hermano! Él es muy tímido con las chicas, por eso no te habla —Vociferó. Emitió una pequena sonrisa.
—¡Dis...disculpa Galehidrelle Jane! Mi hermana no sabe de que habla—respondió hacía las declaraciones de la pequeña.
Sus mejillas estaban rojizas, aunque su tono de voz fue firme y cortante. Como siempre me hablaba.
Y ahí estaba la primera prueba de la hipótesis; Dylan Laker fue acusado de los sentimientos que tiene hacía mi, sin embargo, no nego lo que dijo su hermana, solo sobrepuso un pretexto para aminorar su "secreto".
Y le agradezco a la pequeña Sammy Laker por empezar las pruebas de mi hipótesis.