CUIDADO EN QUIEN CONFÍAS, CUIDADO EN DONDE CAMINAS, UN MAL PASÓ TE HARÁ CAER AL AGUJERO DE LA MUERTE, LLAMALO INFIERNO.
Llegó el 19 de Marzo, un día muy especial para mí, pues pondré a prueba lo que tanto deseaba en el pasado, los amigos de Benito son ahora mi único énfasis, ya que ahora no tengo ni amigas ni rivales en mi camino, es hora de continuar esta travesía, iniciando con los dos mejores amigos, Samuel y Daniela, dos sujetos que en sus estudios se hicieron pareja y actualmente están por vivir juntos, que lindos, seria una lástima que alguien les arruine la fiesta, queriendo no me siento diferente, me agrada este nuevo yo, veré que tanto puedo hacer para cumplir mis objetivos. Llame a Julieta para que me acompañará a realizar un recorrido por las orillas de la ciudad, esto con la única finalidad de encontrar algo para matarlos. Julieta últimamente ah actuado demasiado extraño, ya no esta de acuerdo con mis planes, sus fines científicos la han llevado a alejarse de mi, no se porque no eh tenido el deseo de matarla, quizás estaré preparando su muerte para algún momento específico, pues era amiga de Benito...
Salimos rumbo hacia las orillas con coahuila y parte de la ciudad, esta carretera está algo olvidada por las personas, muy pocos recurren a estos tramos, solamente los que viven por las últimas colonias de este sector. Bajamos del automóvil y caminamos un par de metros hasta llegar a la carretera, estaba haciendo un poco de calor, Julieta me decía si esta era una buena idea, le dije que si, pues de algún modo u otro haré llegar este mensaje a Benito, hacerle ver que aquí sigo y que no tendrá a nadie mas para desahogarse mas que conmigo. Julieta me miraba extraño, algo en ella no le convencía que actuará de ese modo, en fin no me importaba nada, solo quería que siguiera mis planes y ya, después me arreglaré con ella. Pasaron las horas y empecé a ver diversos camiones pasar por la carretera, esto era el momento, Julieta preocupada me dice por última vez. — Mariela, enserio estas segura de hacer esto?. La mire y algo molesta por su insistencia le dije. — Claro que si Julieta Micaela, por favor sol haz lo que te digo y ya. Un trailero nos hizo parada y le dije si podía llevarnos a una dirección cercana a donde estabamos, el aceptó, Julieta subió al final y cerrando la puerta comencé a hablarle en idiomas antiguos al chófer, este mismo de inmediato entró en una clase de hipnotizacion, Julieta dijo. — Mira Mariela, aquel auto que está por avanzar del semaforo es el mismo de Samuel y Daniela, quizás sean ellos. La mire y sonriendo le dije. — Son ellos... Justo a tiempo llegaron. Julieta me empezó a decir que me detuviera, ellos no merecían esto, no debían morir, yo seguía acelerando por parte del chófer, poco a poco me fui desviando hacia la otra parte de la carretera hacia donde ellos iban, Julieta en sus ataques de ansiedad salto del trailer, yo me seguí hasta que el mismo camión salió de la carretera y entró en el camellón hacia el otro carril, fui directamente hasta ellos y los atravesé, el trailer partió la parte delantera del auto y aplastó el techo del mismo, el trailer tenía carga, la caja quedó arriba del automóvil de Samuel, por mi mala suerte no tenía seguridad y me di varios golpes en la cabezas con el vidrio y con el tablero, el chófer quedó ileso, como pude baje del trailer el cual había quedado en las orillas de la carretera, mientras que el automóvil y la caja quedaron obstruyendo parte del camino, por suerte no había mucho automóvil de este lado, mire hacia atrás para ver si estaba Julieta por alguna parte, pero no.
Me asomé hacia la parte de la caja y vi el auto todo destruido y obvio en las puertas veía escurrir sangre, esto era bueno para mi, era la señal que quería, solo que ahora falta asegurar que los espíritus están aquí y de los cuales jamás van a salir a menos que alguien los libere, esto es imposible, muy pocos lo saben. Empecé a caminar mas adentro de este camino cercano a la carretera, era mucho monte, pues estaba ya a orillas, estando ya un poco mas lejos del accidente me sente y cerré mis ojos, nuevamente escuchando voces y lamentos me adentre a una dimensión, al abrir los ojos me vi con mi aspecto físico, empecé a caminar por los alrededores, a lo lejos por el accidente vi dos masas blancas las cuales estaban alrededor de auto, llegué a ellas y las mire mas a detalle, eran estos dos, la pareja amiga de Benito, voltearon a verme y asustados me dijeron. — Que es lo que paso aquí? Porque estamos así?. Sonriendo les dije. — Tranquilos, van a estar bien, solo atormenten a los vivos con sus aspectos, eso los hará descansar, no se preocupen, me encargaré que sus vidas sigan siendo las mismas. Samuel abrazo a Daniela mientras esta lloraba, no acepte esto, quería que todos sufrieran, así que por una fuerza diferente a la mía, tomé a Daniela y la empecé a alejar de Samuel, le dije que estarán mejor si los dos actúan por separado, ella empezó a llorar mad y más, sus almas estarían cerca, mas nunca juntas, esto es lo que declaró, pasarán la eternidad atormentando a los inocentes y a los vivos, no podrán unirse en uno, hasta que alguien lo haga. Desperté nuevamente en mi estado físico y me vi toda sudada por el fuerte sol y por la hora, mire a lo lejos y ya había varios elementos de seguridad ahí, para no volver a eso, me fui a la dirección del auto quizás ahi estará Julieta esperando oh quizás se fue.
Llegue a donde estaba estacionado el automóvil y no lo encontraba, esto me comenzó a molestar demasiado, sabía que Julieta se lo iba a llevar, no iba a seguir soportando esto, nadie me va a faltar al respeto, mientras siga con vida, no había mas opción, tenía que caminar hasta la iglesia, revise mi reloj y eran las 2:00 pm esto iba a ser un largo viaje. El calor estaba en aumento, mas y mas me molestaba, esto era injusto, porque ella me esta excluyendo, porque ella me esta haciendo esto, probablemente esté en su casa, a la iglesia no va a regresar, tendré que buscarla para matarla, desollarla y todo lo que sea posible hacer, haré que su maldito cuerpo esté completamente desfigurado a tal grado que nunca puedan descubrir quien era enrealidad físicamente, no puedo creerlo, esto furiosa por esto, maldita... Maldita... MALDITA SEAS JULIETA!.