La Historia De Mariela Lizeth | El Nuevo Testamento

CAPÍTULO VII "EL DILUVIO: EL SILENCIO DE UNA CIUDAD"

Escucha la lluvia caer, notarás como esta se disuelve en tu cuerpo, escucha las nubes gritar, ellas te enseñarán el camino a tu destino final, mirate al espejo, ese es tu verdadero yo. 

Hay algo de lo cual no me está gustando en Lucía, de aqui a cuando se quizo unir a nosotras, dejando aún lado su doctrina y su misión de proteger toda maldición, anteriormente Lucía era una chica algo estricta, hacia lo que quería y todo, pero ahora que esta con nosotras, actúa como si se dejara llevar con lo primero que mira, hemos llegado al 11 de mayo, nuestras reuniones han sido muy breves, me eh estado ocultando en mi casa, Erick ya sabe quien soy, de todas formas no me detendré en hacer lo que tenga que hacer para que esta ciudad se devore así misma, si algo eh notado últimamente, es que la ciudad se ah comportado de manera muy extraña, silencio total en varias ocasiones, pocas personas en las calles, el centro antes era el punto donde había mas familias, ahora solo veo dos que tres paseando y eso a muy acelerado paso, el clima es perfecto, no pareciera que va a ocurrir algo malo, solo quiero que te pongas en mi lugar y sientas, veas y escuches lo que esta pasando... Recorrí gran parte de la avenida Guerrero, que es la avenida principal del centro, las nubes cubrían todo el sol, su color era entre negro y gris, no hay probabilidad de lluvia, el viento es fresco y agradable, muy diferente a otros años, sin embargo no hay personas, nisiquiera trabajando, algunos locales estan cerrados con candado, algunos han clausurado su local, lo que era lindura y belleza, ahora es soledad e incomodidad. El viento no para de correr, camine gran parte de la ciudad por esta avenida, el clima no cambiaba en nada, si acaso comenzó a caer un par de gotas, no cambió el ambiente en tierra, muy pocos autos pasaban, esta ciudad poco a poco se estaba convirtiendo en una ciudad fantasma, revise la hora, eran las 4:00 pm, tiempo adecuado para pasar el rato o simplemente trabajar, donde están las personas?. Esto me parecía a algo que ya había pasado anteriormente, un conjunto de hechos extraños pasaban en la ciudad, las calles vacías, silencio total en muchas ocasiones, había momentos en los que podía sentir el miedo en mi interior, me empecé a asustar mientras mas caminaba, no soporte el avanzar y me desvíe a una calle que esta cerca de la rotonda que une esta calle con la carretera nacional, en esta rotonda hay un monumento, cerca de ese monumento hay un pequeño parque, me sente en una de sus bancas, la soledad estaba incomodando, las nubes no dejaban de cubrir el sol por completo, el cielo era como un dia diabólico, al momento llevó contado sólo ocho carros, un Indigente y tres perritos callejeros que pasaron por aqui, mirando al cielo me percate de todo esto, sentía miedo, la ciudad no era lo que esperaba, mis amigas me llamaron, les dije en donde estaba, me dijeron que guardará la calma, ellas también se sentían preocupadad por la situación actual de la ciudad, no se a que se deba esto. Mirando mi alrededor, notaba mas y más soledad de la anterior, el viento empezó s correr mas fuerte, mas avanzaba la tarde y mas se acercaba la noche, que iba a pasar? Bueno, soy una bruja, mis amigas también, hemos estado la mayor parte de nuestras vidas vagando en la obscuridad, pero hoy... Es distinto, como si todos tus problemas tuvieran un break y solo es necesario conectar tu alma con el silencio para despejar tus problemas emocionales. 

Dieron las 8:00 pm y empezaba a anochecer, ya estaba todo obscuro, las nubes hacían que fueran las 11 pm, mis amigas llegaron luego de hacer sus deberes y para despejar la mente, les dije que caminaramos por las colonias, juntas como hermanas, quería despejar mi cabeza, aprovechar el momento para encontrarme conmigo misma, esto me recuerda a algo, un momento que ya ah pasado, no es la primera vez que ocurre algo así, siento, que esto ya lo eh vivido antes. Tomamos la avenida Campeche, que es la tercera calle que une la rotonda, en ella había muchos locales, todos ellos estaban ya cerrados por la hora y otros clausurados, era extraño ver este tipo de cosas aquí, mas en el sector donde nos encontramos, recuerdo que este sector es de ricos, Azeneth me contó que en un pasado ella escucho diversos temas respecto a la muerte de muchas personas en estas colonias, algunos parecían ser asesinados, otros parecían que se suicidaron, lo extraño aquí era... Que todos ellos eran ricos y trabajan en el gobierno ya sea pasado o actual, esto me lleno los oídos de emoción, pues, se quien fue la protagonista de esos actos, sin olvidar los demás pasados que han llegado antes de mi. Dimos vuelta en la primera calle que encontramos y dimos de frente con la Catedral, enfrente de ella esta la mansion Longoria, esto me trajo recuerdos un tanto obscuros. La noche avanzaba, el clima refresfaba, podía escuchar el viento golpear algunas ventanas y árboles a lo lejos, Martha una de las mas jóvenes me comento acerca de sus familiares, algunos vivían en estas calles, todo debido a que llegó a tener contacto con diversos funcionarios de gobierno, esto era de gran ayuda para ella, pero sus padres no lo tomaron en cuenta, ella comentó que en aquellos días había mucha hipocresía en la familia, se entiende la situación, ninguna familia mexicana es libre de eso. La noche llegaba a su punto máximo, las luces de los postes podía moverse por la fuerza del aire, la luna había desaparecido, seguía nublado todo el ambiente, parecía como una escena apocalíptica, mis amigas se sentían algo asustadas, entre ellas se tomaban de las manos, lo único que quería era poder encontrar un lugar estable donde relajarme, mientras el viento refresca mi rostro. Lucía estaba con nosotras, ahora la trato como una hermana, es muy linda y su actitud cambió demasiado, empiezo a tener fe en ella, me comentó que estos climas son muy traicioneros, sobretodo porque el año pasado, por estas fechas ocurrió un suceso muy trágico, una fuerte tormenta azotó la ciudad, ella teme, pues su mente le dice que habrá una segunda tormenta con mayor intensidad, la señal iba a ser un escenario apocalíptico. En lo personal me rei un poco, ella es muy apegada a las creencias ocultistas de nacimiento y yo solo entre aquí por intereses y por ver a Benito de cabeza, las calles estaban vacías en ciertos puntos, al ser un sector de ricos, podía notar muchas bellezas en las calles, algunas tenían árboles enormes cubriendo la misma, me sentía relajada en estos lugares, el aire hacia que sus ramas sonarán en los techos de las casas, había chispazos de agua en varias ocasiones, mis amigas jugaban a perseguirse, esto hacia divertida la noche, recorriendo las calles mientras jugábamos, sentía que era la niña que una vez soñé ser... Jugar bajo la lluvia con mis amigas o amigos, nunca se me dio, solo era estar en casa, encerrada en mi habitación, llorando por haber hecho una travesura o por haber tenido malas notas en clase, nunca tuve un premio, siempre fue escuchar el "Es tu obligación como estudiante sacar buenas notas" esto me deprimió por unos minutos, Lucía, que era la mayor ahora, aun siendo mayor... No perdió la oportunidad para ser ella la que iniciará la carrera por ver quien iba a estar encantada hasta que alguien libere a esa amiga. Mire al cielo por última vez, nublado, obscuro, el silencio de la calle, la soledad de la colonia y el deseo por jugar, me hicieron sentirme única, sonreí y me puse a jugar con mis amigas. 




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