Redentora.
Ha llegado el momento de mi redención.
Sé cómo detenerlos. Sé cómo detener su despertar.
Pero mi interior ruge de furia al saber que ayudaré a los humanos. Mi corazón se estremece al saber que mi sacrificio ayudará a esas alimañas.
No. No debo pensar en ellos, son basuras. Nada más.
Esto es más importante.
Editado: 14.02.2020