La Ley de Benjamín

Grupo nuevo, mesa nueva, vida nueva

Ok, admito que me entró un poco de celos... Osea, no era que me gustara Josh, él era mi mejor amigo y por años lo había reclamado como mio. Repito, nada que ver, sólo no quería que fuera de nadie más... Talves estaba celosa... Un poquitín...

—Wow, eso es mucho tiempo, ¿Por qué no se hablan?— Le pregunté a Rouse tratando de disimular lo raro que se sentía hablar de mi mejor amigo.

—Ay, es que soy muy tímida, ya ves que solo me gusta dormir, además, está en último año, no creo que se fije en mi.... A menos que...— Me miró con una cara que dio miedo. —Tu puedes hablarle de mí ya que eres su "mejor amiga"— Lo dijo como si yo estuviera mintiendo sobre eso.

—Eeeeh, no creo, pero intentaré.—

 

****

 

—Chicas, ¿Ya cambiaron todos sus horarios?— Preguntó Mariel mientras avanzábamos al salón.

—Sip, ya podemos ir a las mismas clases— Dijo entusiasmada Lía.

—Entonces, eso significa que nos toca...— Revisé el horario. —Biología.—

—Agh, te asustará el profesor, se asimila a una tortuga con varicela— Comentó Rouse.

Y era verdad, ese profesor... parecía una tortuga con varicela... Aunque no sabía el por qué exactamente. Nos sentamos las 4 juntas en la parte de atrás.

—Bueno, ésta es mi hora...— Dijo Rouse y de repente cayó dormida en la mesa, otra vez.

—¿Ella siempre duerme en clases?— Le pregunté susurrando a Mariel.

—Sólo en las que no le gustan— Dijo encogiéndose de hombros. —Sólo le gusta Arte, Francés y Religión.—

—Ok—

La clase del tal Alberto Tortuga, como le decían, fue aburridísima, solo hablando de animales y  sus estructuras y que bla y que bla. Lo que más odié fue pararme en cada clase a presentarme, ya que siempre cambiábamos de aula y los alumnos y profes eran diferentes. Hasta que llegó el receso y respiré un rato.

—Chicas, ¿En dónde acostumbran comer?— Les pregunté mientras íbamos a la cafetería.

—Rouse y yo siempre nos sentamos con esos nerds de allí— Señaló a una esquina, un grupo de chicos con lentes y medio raritos...

—Yo siempre me siento con los de un año menos, que ahora serían los de 2do año— Comentó Lia señalando una mesa de chicas de 2do. —Tengo unas cuantas amigas allá. Asly Nin y Ann Hallwork, esas morenas que parecen hermanas pero no lo son— Dijo riendo.

—Ok chicas, aún no las conozco bien, y todavía no sé acostumbrarme a una escuela, pero tengo para decirles que vamos a dejar nuestra marca— No sabía lo que estaba diciendo, ni mucho menos sabía cómo dejar una marca... Pero me entró un aire de confianza y seguridad. —Vamos a hacer un nuevo grupo, ¿Qué dicen?—

—Eso está bien, me encanta esa idea Harper— Dijo Lía mientras escogíamos la comida en la fila.

—Si, ¿Cómo piensan hacer eso chicas?— Preguntó Rouse negativa.

—No seas negativa Rouse— Le dijo Mariel. —Vamos a hacerlo, y seremos geniales—

—Primero a buscar otra mesa para personalizarla, mhm, que dicen de aquella vacía junto a la de esos chicos que no sé qué son...— Dije señalando una mesa.

—Tampoco se quiénes son...— Dijo Mariel.

—Ni yo...— Continuó Rouse.

—Y menos yo...— Terminó Lía.

—Perfecto, esa es nuestra nueva mesa.— Mientras íbamos caminando a nuestra mesa, algo pasó. Ví denuevo al chico ese Logan, en la mesa de, supongo, los populares, volteó a mirarme como si yo fuera más importante que lo que estuvieran hablando. Me saludó con una sonrisa, supongo. No sé qué me paso, me sentí nerviosa de momento, y caminé más rápido, chocando con un chico de lentes que iba pasando. ¿Lo bueno? No me caí. ¿Lo malo? El chico terminó empapado de espagueti... Yo seguí caminando hasta sentarme y respirar nuevamente.

—Wow ¿Qué fue eso?— Me preguntó Lía sentándose al lado.

—Es que por allá está ese tal Logan, y me estaba mirando, no sabía que hacer... Me puse nerviosa..— Dije avergonzada.

—No te preocupes, más adelante te enseñaremos a como disimular— Dijo Rouse riendo.

—Mira quien habla, la que cuando ve a cierta pers...— Mariel no terminó de hablar porque frente a nuestra mesa pasó un chico de ojos azul pálido y cabello castaño. Por su expresión, imaginé que era nuevo, estaba medio perdido, y por la cara de Mariel también, era como si nunca lo hubiera visto antes. —¿Ese chico es nuevo? Nunca lo he visto por aquí...—

—Uuuuuy, esto me huele a amor a primera vista—

—Cállate Rouse— La fulminó con la mirada. En ese momento una silueta me pasó por el lado y se sentó junto a mí tratando de taparme los ojos. Por la cara de Rouse, supuse quién era...

—Josh...—

—¿¡Qué hay Guanabanita?!— Dijo el ridículo quitándome las manos de los ojos. Me encantó ver la cara de Rouse, atragantándose la comida. Ella no creía que Josh era mi mejor amigo, ¿Qué mejor forma de demostrarlo? Que venga éste y me diga Guanabanita... Muy normal. —Te dije que nos podíamos ver en el descanso, y en todos los lados posibles— Dijo estrujándome la nariz.

—Tonto paraaaa— Dije haciendo un puchero. —¿No ves que tengo amigas nuevas? Me estás avergonzando...—

—Aww, mi Guanábana ya tiene amiguitas el primer día—

—¡Josh! Sabes que odio que me trates como bebé— Seguí mi puchero.

—Sé que lo odias, y por eso lo hago— Dijo imitando mi voz y riéndose.

—Ok, ya déjame y saluda— Le dije sonriendo y señalando a las chicas.

—Si, verdad.. Hola chicas, mi nombre es Josh Williams, soy el mejor amigo de ésta mocosa...—

—¡Josh!— Me ignoró.

—Bueno... Díganme sus nombres bellas damas— Dijo extendiéndole la mano a cada una mientras decían sus nombres.

—Lia— Dijo con tono aburrido pero educado.

—Mariel— Dijo enseñando todos los dientes... Daba miedo...

—¿Y tú eres...?— Preguntó Josh a Rouse, y ésta estaba totalmente paralizada con una cara de "mátenme".

—Ella es Rouse— Dijo Mariel rápidamente, y Rouse le dejó la mano a Josh colgando en el aire.




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