La Leyenda de Eros

Capítulo 8: Se Aproxima...

Una entorpecedora luz levanta a los dos que dormían plácidamente sobre el césped, no es la luz del sol sino de dos guardias fuertemente armados.

Golpean a Aarón cuando intentaba huir y apresan a Eros, ante la algarabía los tres faltantes salen de la tienda. -Sabia que no teníamos que dejarlos pasar, asesinan a 10 hombres y además de esos los acompaña un bandido- señala el iracundo guardia con su mano firme a Mike que en realidad es tan buscado como su tío en Hadar.

Sin necesidad de llamar al vehículo carcelario los guardias aprisionan y suben al grupo en una caravana de vigilancia que cruzaba por la vía.

Dos horas más tarde en el alborecer del día una altísima pirámide se ve en el horizonte que parece tener varias plataformas uno encima de otro.

Y su gran altitud con respecto a los otros edificios es tanta que sólo media hora después se divisa otras estructuras, en una bifurcación los guardias charlan suavemente mientras un moderno semáforo se mantiene en blanco.

Por unas pequeñas rendijas para respirar los cinco capturados estando al lado izquierdo del camión ven un extenso bosque en frente que no deja ver nada más alla, a la derecha la gran pirámide, torres y un cartel pequeño.

⬆️Magolgrado; 33km el lugar de destino y ⬅️ Antenora; 129 km que bien parece ser una ciudad guerrera debido a la cantidad de mercenarios, cazadores y milicias que se manifiestan de esa vía en auto o a pie.

3 minutos y culminando la espera el semáforo se apaga lo que hace despegar los ojos a nuestros protagonistas de las angostas rendijas volviendo a su posición normal contemporáneo a la reanudación de la marcha de la caravana.

Los presos en los dos autos posteriores cesan su bullicio al arribar a la ciudad, la gran brecha generada por un amplio y calmado río es cerrada por un puente de feldepasto adornado en sus paredes por azulejos.

No tardan mucho en ingresar a la capital pese al gran descontrol de los transeúntes en la entrada contenida por decenas de guardias.

Aarón parece estar más preocupado por la situación de su país natal que el viaje a Xaphan - Tienes que conseguir un encuentro con Etamin- dice este a Eros mientras ve como las cenizas parecen aparecer con mas frecuencia.

Braulio esta absorto en sus pensamientos y Mike solo se encuentra de observador, atentamente a la conversación del dúo.

El príncipe saca de su bolsillo un rubí que a de ser el último 
-Tendremos nuestra conferencia con el rey, cálmate un poco- Mike solo muestra preocupación por su situación y no escupe palabra.

Ya con la puerta de atrás cerrada se abre la frontal forjada en acero dándole una increíble vista de la pirámide que contiene jaspes, amatistas, esmeraldas y diamantes en vidrios templados que aparentan ser ventanas.

En tierra firme hay algunas construcciones; Una garita, antenas de 30 pies y Miles de chozas en las que habitan personas de pocos recursos, que sólo se ven cuando el carro carcelario rodea la pirámide para entrar por un portón de madera ubicado atrás, subiendo esté en un ascensor

Braulio vuelve de su viaje astral y ve como cada vez más intranquilos se hallan sus compañeros al ver la condición en que se encuentran los reos... Más de dos mil personas en cuatrocientas jaulas distribuidos en los primeros dos subsuelos, alimentándose de la desagradable carne que le es entregada por los estrictos vigilantes cuanto más desciende el motorizado debajo de la pirámide.

En el tercer y último subsuelo el auto baja de la rampa por el costado derecho donde hay una precaria iluminación otorgada por dos lámparas.

Una tenue luz entra al Interior de la caja de metal donde se hallan los presos y uno a uno son llevados a una celda en el fondo del lugar.

Cuando toman a Eros este forcejea con el guardia -Tengo algo valioso que estoy seguro que quieres, pero tienes que ayudarnos- con una fachada perversa este lo requisa -¿Valioso? ¡Ah! Aquí está- pronuncia mientras toma la majestuosa piedra carmesí y la besa, introduciéndola en su zapato.

Resignado los cinco sin excluir al fatigado Larry son conducidos por el asqueroso suelo lleno de sobras y desde cuatro celdas anteriores los chiflan unos esqueléticos hombres.

Son arrojados en una de las tres celdas sin presos y los presos de otras celdas siguen blasfemando a tal punto a los carceleros que es abierto una cámara y son golpeados brutalmente mientras Eros impotente observa.

Braulio se acuesta en una de las camas que parece ser lo único limpio de lugar y Larry cae muerto en su cama -Es un paraíso turístico esta nación, buena razón para emigrar no Aarón- sus palabras no habían terminado y ya esté está sobre Mike.

Eros los separaba e indiferente Braulio descansa un poco luego de estar sentado 3 horas apresado -¡Déjenme dormir macacos!- en su afán de dormir profería Larry y prosigue dándole la espalda a la contienda.

Distanciando definitivamente Eros a los dos salvajes peleadores -¡Dejen de pelear por estupideces!- casi tan fervor como Aarón y Mike en su escaramuza les habla este como su gran soberano.

Con tan sólo media hora en las catatumbas el comandante de la frontera se revela ante el grupo e con su barba roja y ojos verdes abriéndole los dos candados que los mantenían confinados 
-Acompañenme un alto mando los espera en los juzgados- dice fuertemente y desconcertados lo siguen rápidamente Aarón y Mike como patitos a su madre, Braulio despierta con dos toques a Larry apuntando a la reja abierta dejando de último al soberano de Alderamin.

¿Quién podría ser? ¿ El rey? ¿Un general? Eros se preguntaba que personaje estaba detrás de esto y cómo se había enterado de su paraje.

Esta vez sin auto pero con esposas son llevados al ascensor repitiendo las mismas escenas con las angurrientas personas pero esta vez diferenciándose por el levantamiento de un cuerpo con su "carne" pegado a los huesos que propician dos hombres con trajes blancos.



#21370 en Otros
#2808 en Aventura
#3234 en Acción

En el texto hay: principe, accion, demonio

Editado: 20.03.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.