PARTE IV: LA CORONACIÓN

Helanka

Después de la victoria que obtuvimos sobre las tropas Taerugs, conseguí que el Consejo Imperial nos convocase, a mi querida Isthar y a mí.

Presidente: "Estamos aquí para corroborar las explicaciones del Gran Dragón ante este Consejo, es por eso que llamo a declarar a la Favorita Imperial Isthar."

Vi como se levantaba y se dirigía hacia el estrado, dioses como me gustaría poder hacer algo para que no tuviese que someterse al juicio al que iban a someterla.

Presidente: "Os explico Favorita para que sepáis a lo que os vais a enfrentar. Uno de los miembros de este Consejo hará de acusación, lo que en su mundo llama Fiscal y otro de los mismos hará de vuestro Justificador, lo que en vuestro mundo llamáis Abogado defensor, además estáis obligada a contestar todas las preguntas. ¿Alguna duda?"

Isthar: "¿Incluso si la pregunta no tiene nada que ver con lo que está aclarando ante este Consejo?"

Presidente: "Eso lo decidirá el Emperador y quien dictará la sentencia será él. Y no habrá amparo que pueda obstaculizar su aplicación. ¡Que empiece el cónclave!"

En ese momento se levantó uno de los consejeros, para mi mala suerte era muy próximo a mi hermano mayor.

Consejero: "Estamos aquí para resolver si la Favorita Imperial se extralimitó en sus funciones durante la batalla del mundo RSE, la Familia Palatina exige que se castigue con la máxima dureza a la Favorita Isthar por ordenar la destrucción del símbolo de los resedianos."

Presidente: "Ahora Favorita o puede defenderse sola o solicita a este Consejo que algún miembro del mismo la defienda. ¿Cuál opción escoge?"

Isthar: "Con todos mis respetos hacia este Consejo Imperial de los Mundos, entiendo que debo ser yo quien explique los motivos por los cuales ordené la destrucción de la Fortaleza Palatina..."

En ese momento algunas voces se oyeron mostrando su sorpresa por la afirmación de la Favorita, durante varios minutos Isthar se mantuvo en un hermético silencio hasta que el Emperador, mi padre, ordenó silencio.

Emperador: "Denos sus razones para tomar una decisión tan drástica."

Isthar

Isthar: "Antes de iniciar mi exposición me gustaría realizar una pregunta al representante de la Familia Palatina si nuestro Glorioso Ejército ha ocupado, un símbolo tan querido y respetado como es, la Fortaleza Palatina..."

Cons. RSE: "Nunca han entrado de forma violenta, siempre que han ido han respetado nuestras normas..."

Eso era lo que quería oír, así que me repasé mentalmente mis conocimientos de Historia de la Tierra.

Isthar: "Yo me pregunto ante este Consejo Imperial, y bajo la tutela de nuestro amado Emperador. ¿Renunciar a liberar a los resedianos y preservar un gran edificio? O la opción que escogí, destruir un gran edificio, que vamos a reconstruir íntegramente, y tener a los resedianos libres para poder ayudarnos en las tribulaciones que tenemos ante nosotros. Hace poco terminé mis estudios de Formación Superior, y nosotros procuramos recordar las cosas buenas y malas que hicimos en nuestro mundo originario, la Tierra. Pero hay dos hechos que vienen al caso.

Los dos hechos fueron en la Tierra, hace algunos eones. Uno fue en un lugar llamado Masada y el otro en un lugar llamado Numancia. En los dos un Imperio quiso convertir a los ciudadanos de esos pequeños emporios en esclavos, pero los propios habitantes hicieron algo que rompieron los moldes, se sacrificaron a sí mismos para no ser esclavos. Las tropas imperiales invasoras al pasar por el poblado solo pudieron certificar el valor de esos seres que quisieron morir de forma voluntaria que vivir como esclavos, y aquí retomo la cuestión que inicié mi explicación, ¿este Consejo Imperial hubiera preferido que el edificio, símbolo de los resedianos, se mantuviese intacto mientras que los Taerugs sometían a nuestros ciudadanos resedianos?"

Me bajé del estrado, miré al Gran Dragón y por su cara, me indicó que nadie estaba preparado para una acusación como la que dejé caer.

Emperador: "¿Alguien quiere rebatir la argumentación de la Favorita?"