"Todos queremos lo que no se puede, somos fanáticos de lo prohibido"
Mario Benedetti
Veamos, ¿cómo se escribe un suspiro? Quisiera decir que después de aquel momento todo estuvo de maravilla, que Demian olvidó por un momento su absurda fobia, pero no, no es el caso. El idiota huyó como los cobardes. Fue un segundo que nuestros ojos se conectaron, un maldito segundo, luego él se levantó tan rápido que por un momento juré que estaba nervioso.
Rayos, no quiero escribir sobre esto. Solo hace que me deprima.
Demian estuvo muy serio toda la semana, no sé si se deba a ese pequeño incidente con el chicle. Pero desde entonces evita mirarme directamente, y solo habla lo necesario, ya ni siquiera sonríe como antes, ¿se habrá dado cuenta? Si ese es el caso ya podría estarme despidiendo de mis sentimientos hacia él, después de todo no vale la pena querer a alguien que ni siquiera se digna a hablar sobre el tema. O tal vez... No, imposible.
Solo hay algo que me llama la atención de todo este drama. Demian ya no me habla sobre chicas.