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"Te lo prometo, encontraré una cura para hacerte sonreír de nuevo"

Hoy caminábamos rumbo a la parada de autobús después de la escuela, la que nos llevaba a nuestras casas. Íbamos particularmente lentos, siempre que queremos platicar atravesamos el gran parque que hay frente a la escuela, no se compara a aquel donde practicamos skate, este es más bien un paseo obligado cuando necesitamos platicar o contarnos algo importante.

Demian miraba a sus pies mientras seguíamos el camino marcado con el pavimento, yo en cambio me limité a poner mis ojos al frente, esperando... esperando a que dijera algo, cualquier cosa. Y entonces lo dijo.

—Levi, nunca te conté lo de mi padre. Lo lamento. —Cuando lo miré, él seguía observando sus zapatos, entonces me di cuenta de que le había costado trabajo iniciar la plática.

—No, está bien. Es un asunto muy personal. —Y lo es, aunque me muero por saber más del asunto.

—Mamá no lo sabe. Papá se fue de la casa poco después de aquello.

Aquello. Realmente necesito saber qué es aquello.

—Ese hombre...

—Daría cualquier cosa por olvidarlo, lo que me hizo... No quiero ser igual a él.

Ambos nos detuvimos. Yo estaba afectado con lo poco que me dijo, ¿acaso es una indirecta? "Jamás me gustarías, maldito homosexual" ¡AHH! ¡Demonios! No quiero inventar diálogos crueles, en serio, pero ¿qué otra cosa voy a pensar si me lo está diciendo así?

Por favor, dime, ¿de qué manera puedo curar el corazón de Demian?