¡Feliz Cumpleaños Emily!
Bajo las escaleras y los veo a todos en la sala esperándome, aun en pijama con gorros y collares de cumpleaños. En la mesa del centro hay un pastel con una vela en forma de número seis, y dos pequeños regalos. Mamá a viene hacia a mi bailando ¨Girls wanna have fun¨ de Cindy Louper. Ella ama esa canción. Me coloca un gorro y un collar y me lleva al sofá, al lado de papá y James. ¡Me encanta este día!, No solo porque es mi cumpleaños, sino porque puedo hacer lo quiera, y me dejan escoger todo. Incluso James deja que escoja todo, y no se queja. También es el único día en el que podemos desayunar pastel. Papá ya ha encendido la vela, y me dice que pida un deseo. Yo estoy tan emocionada que no se me ocurre nada. Creo que es porque no necesito nada más. Así que lo primero que se me viene a la cabeza son unos patines. Soplo fuerte y la vela se apaga. Todos aplauden y mamá a corta el pastel en pedazos y los reparte en pequeños platos. ¡Es increíble como teniendo tanto espacio en la sala podemos acomodarnos todos en un solo sofá! Y somos felices, mientras desayunamos pastel a las ocho de la mañana. James toma uno de los regalos de la mesa, tiene la envoltura arrugada así que imagino que él lo envolvió solo. Yo lo rompo y veo un pequeño oso de peluche color caramelo con una cinta azul en su cuello, me gusta mucho. Le doy las gracias con un abrazo, y él me deja abrazarlo por unos segundos y luego me aparta. Siempre hace eso, pero sé que, si me quiere, aunque sea un tonto. Papá me sienta en medio de él y mama para luego poner una pequeña caja rosa con una cinta azul cielo alrededor en mis piernas. Rápidamente desato la cinta y abro la pequeña caja. Veo una cadena con dos dijes, uno de luna llena y una luna creciente con cara, parece dormida. Papá la toma y la coloca alrededor de mi cuello.
— Sabes Emily, algunas personas ven la luna como un simple satélite incapaz de brillar por si sola. Pero ¿sabes que creo yo?
yo niego con la cabeza
— Que ella es el claro ejemplo de que no importa porque, para qué y donde está, siempre está ahí en el cielo brillante y hermosa. Así que no permitas que nadie te diga que no puedes brillar, tu igual hazlo, brilla, busca siempre la manera de hacerlo.
Mi madre toma el dije y le da la vuelta, me deja leer lo que esta atrás.
—Recuerda que no importa donde estemos, siempre te amaremos hasta la luna y de regreso. Y cuando las cosas se pongan difíciles acuérdate que igual que la luna tiene sus fases tú también las tendrás, ahora eres una luna creciente hasta que te conviertas en esa luna llena y brillante. Y en las noches sin luna cuando no sepas que hacer, recuerda que tú la llevas en tu pecho. Y a nosotros con ella.
Me despierto de golpe y corro hacia el closet y busco en la caja de zapatos mi cadena y ahora todo tiene sentido. De alguna manera mis padres supieron que ellos se irían pronto y que yo pasaría muchas noches sin luna así que me dieron mi propia luna para recordarme que hay más, que debo encontrar la manera de brillar. Totalmente decidida corro a la habitación de Sheryn no reparo en tocar la puerta, ella está ordenando unos vestidos en el closet, cuando oye la puerta abrirse del golpe se da la vuelta y me ve un poco asustada.
— ¿Por Dios niña que te pasa?
— Necesito tu ayuda Sher. Hay una manera de salir de aquí.
No me deja terminar de hablar, ella comienza a negar con la cabeza y las manos
— Ya déjalo Emily, ¡entiéndelo por favor!
— Hay una oportunidad Sher y no pienso desperdiciarla, Sergio...
Otra vez me interrumpe y no me deja terminar de explicarle.
— Tu sí que no escuchas, Emily él no va a irse contigo. No sé qué es lo que te ha dicho, pero no va a abandonar su vida por ti. No es tu salvador no te equivoques, solo juega contigo.
— Él es del FBI
Sheryn ha perdido los colores de repente, está totalmente inmóvil y pálida.
— ¿Emily que has hecho?
— Yo no hice nada. Él ha estado investigando a Jakob desde hace mucho tiempo y es la razón por la que está aquí.
— Jakob ya lo sabe.
Afirma completamente convencida
— No creo. El piensa que está aquí vigilando a su hermano.
— No es estúpido Emily, Jakob ya lo sabe.
Afirma nuevamente con total seguridad.
— Entonces Sher, debemos actuar rápido, solo dime cuando y donde llegan las personas que Jakob trafica
Ella niega con la cabeza y me empuja fuera de su habitación.
— Vete Emily, tú ya estás muerta.
Me ha echado sin más y yo pierdo toda la esperanza. Parecía una buena idea, ahora corro el riesgo de que le cuente todo a Jakob, y si estaré muerta.
"Solo es otra noche sin luna" Me repito a mí misma, pero llevo mi luna. Yo llevo mi luna.
Trato de pensar en otra manera de conseguir algo de información, mientras las noches se desarrollan normalmente como es usual, pero yo estoy algo paranoica. Siento que los hombres de Jakob siempre están observándome más de lo usual y a veces creo que en cualquier momento vendrán por mí. Sheryn apenas y me ve y Sergio no ha aparecido en toda la semana. Me voy desesperando un poco, y no tengo idea de cómo obtener la información. El club está lleno de turistas, y Jakob esta insoportable, otra vez ha puesto la promoción de una hora por 35 euros. Es sumamente cansado y no lo soporto, me mentalizo para no terminar llorando y me aferro a la idea de la oportunidad que se está presentando.
"Pronto saldré de aquí"
Pienso mientras mi cuerpo es tomado por un hombre tras otro, hasta que pasan más de cinco minutos y la puerta de mi habitación no se abre más. Entonces y solo entonces me permito llorar.