Narra Alexander
Mi nombre es Alexander Marcovich, pero para mis amigos soy Alex, tengo 19 años y muy pronto sere el alpha de la manada Golden Moon, estoy cursando el ultimo semestre de universidad preparandome para guiar a mi manada tal y como mi padre lo hace actualmente, admiro mucho su trabajo como alpha pero no lo hace solo, mi madre la luna actual lo ayuda siempre en todo lo que necesita. Estoy muy emocionado por el cargo pero tengo un problema, aun no encuentro a mi mate, a quien sera la futura luna de la manada y la madre de mis cachorros y si no la encuentro pronto mi manada se debilitira y sera vulnerable a todo tipo de ataques, la he buscado por todas lados y ya me estoy empezando a rendir.
-seria sensato rendirnos Alex, debemos convencernos de que nuestra mate no existe- menciona Anses (mi lobo).
-calma amigo, ella aparecera, se que lo hara- digo con una confianza que no siento en absoluto, el tiene razon, por mas que intento dar con su paradero nunca la encuentro, las clases terminan y salgo al estacionamiento, en el camino me encuentro con Dimitri mi mejor amigo y mi beta, chocamos puños y subimos en mi auto deportivo rumbo a casa.
Al llegar entro a casa y me encuentro con mi madre y mi abuela sentadas conversando, al acercarme las dos me reciben con un gran beso.
-ahi esta mi futuro alpha- dice mi madre con orgullo acomodando mi cabello negro.
-hola madre como siempre te ves radiante.
-y yo que estoy pintada o que?- dice mi abuela fingiendo estar ofendida, rio antes esto y la beso cariñosamente en el cabello, al caminar a la cocina me encuentro con una persona que no deseaba ver jamas en mi vida.
- hola cariño, cuanto tiempo sin vernos- dice esa voz chillona que lastima mis oidos.
-lamentablemente no el suficiente Gwen, que haces aqui?- dije indiferente tomando una botella de agua de la nevera, ella es la chica mas molesta y pesada que he conocido en la vida, ella y yo fuimos novios hace algunos años, esto con el unico proposito de llenar ese vacio dentro de mi, que luego entendi solo mi mate podria llenar, ni siquiera me dejo en paz cuando se fue a estudiar el colegio en Londres y ahora ella estaba ahi mirandome expectante.
-escuche que aun no encuentras a tu mate, eso es bueno para ambos no lo crees?- intenta acercarse pero la ignoro, que no tiene cosas mejores que hacer?
-diras para ti, y aunque no la encontrara jamas te daria a ti el privilegio de sentarte en el trono de la luna, no te mereces ese lugar- dije con veneno en mis palabras esperando que entendiera el mensaje pero lejos de tener una reaccion a la que esperaba solo se rio y me miro desafiante.
-eso dices tu pero tus padres ya decidieron por ti, si no encuentras a tu mate yo me casare contigo y sere la luna de esta manada me ames o no- dejo la copa de vino que estaba bebiendo y luego paso a mi lado rozando mi rostro con la yema de sus dedos.
-y luego me amaras como lo que sere dentro de un mes, como la madre de tus descendientes y futura esposa- se fue a la sala dejandome furioso y con un sabor asqueroso en la boca.