La Luna de mi manada

Capitulo 23 -Lejos de ella-

Narra Alex

Movía con mi hocico una de las patitas de Dalisha y ella no se movía, seguía inerte...casi muerta...no quería separarme de ella ni siquiera en el momento en que mi padre se acercó a nosotros, me puse en defensiva y empecé a gruñirle, no quería que mi padre estuviese cerca de ella y menos cuando estaba tan vulnerable y herida, quiza aprovecharia eso para terminar lo que Roselynn no pudo. Para mi sorpresa no fue asi...llamó a uno de los lobos de la manada y mando a que llevaran a Dalisha al médico, no me negué esta vez porque tampoco estaba en la mejor forma para discutir, me acerqué como pude al cádaver de la pelirroja que yacía con una expresión extraña de paz y con sus ojos y mejillas con lágrimas secas, me agaché y entonces ahi supe que ella, en medio de su imagen de loba despiadada y fría solo habia una niña que creció siendo abusada por todo el mundo y que encontró un refugio en mi padre, refugio que luego perdió...Ella no lo amaba solo buscaba no perder lo unico que la mantenía segura de este mundo que tanto daño le habia hecho.

-Alpha...La luna ya ha sido llevada al hospital del centro de la manada- Dimitri se acercó a mi para ayudarme a caminar fuera de la bodega, mi madre estaba desmayada en los brazos de mi herido padre, pero respiraba, tenía un vendaje en la pierna donde recibió el zarpaso, no era grave e iba a volver a estar bien pronto, pero en cambio Dalisha...mi pequeña si habia recibido bastante daño y no solo por parte de mi sino por parte de Roselynn, estaba ansioso por transformarme y correr al hospital pero mi padre me detuvo, ahi estaba de nuevo esa maldita mirada dura y helada que siempre desprecie, odiaba su mirada porque nunca traia nada bueno.

-Alex...no vas a ir a ningun lado...tenemos que hablar...pero aquí no...

-Padre...no quiero que esta vez me prohibas ir a verla...ella me necesita y yo la necesito a ella...

-Tu también estas herido...pero esta bien ve si quieres ahora no hablare contigo de todo lo que paso...-Como cualquier alpha orgulloso de serlo se retiro seguido de otros dos lobos mientras yo trataba de transformarme pero Anses no quería salir, Dimitri llamó mi atención.

-Te llevare al hospital, Anses no saldra hasta que no se recupere sera mejor que no lo fuerces o podrias lastimarlo a él y a ti mismo.

-Como planeas llevarme genio no veo tu camioneta aquí- dije fastidiado y adolorido, mis heridas eran profundas y sangraban bastante estaba empezando a ver borroso y a tambalearme hasta que el lobo de Dimitri me hizo caer en su lomo y empezó a correr con rapidez por el bosque me tuve que sostener fuerte de su pelaje para no caer, en unos cuantos minutos estuvimos en el hospital, las enfermeras se acercaron enseguida a socorrerme y me llevaron a una habitación cercana a la de Dalisha lo podía sentir por su olor de moras mezclado con su sangre, cerré mis ojos por un momento y no se a que hora mis ojos se cerraron y caí en un sueño profundo.

Desperté luego de unas horas, estaba recostado en una camilla con varios vendajes en mis brazos y un parche en la mejilla izquierda, un doctor ya anciano se acercó a mi y me explicó que afortunadamente mis heridas no eran severas, solo tuvieron que tomar un par de puntos en mi brazo derecho y solo tenia unos cuantos moretones, cuando le pedí que me informara sobre el estado de Dalisha el dijo que no estaba a cargo de su caso, la estaba atendiendo un practicante llamado Abdel Sidall, le agradecí y tan pronto como se fue me levanté poniendo toda mi fuerza en ello hasta llegar a la habitación de mi pequeña, en efecto, ahi estaba ese chico que cambiaba su suero a uno nuevo y la miraba con tanto amor que parecía que la iba a besar en ese momento, no iba a permitir que ese imbecíl se quedara solo con mi nena asi que tosí fingidamente para darle a saber que estaba ahí.

-Disculpe alpha no note cuando entró.

-Si...se nota, que estabas haciendo?

-Solo cambiaba el suero de mi paciente, luego vendré a administrale medicinas para el dolor

-Ella esta bien cierto?- Se quedó callado unos minutos y luego suspiró.

-Pues...si y no...vera la situación es la siguiente, Dalisha está herida pero nada de gravedad, lo peligroso aquí es que esta bajo un coma profundo, causado por la ingesta de la sangre de la gamma...cuando fue obligada a ingerir su sangre inmediatamente se formó un vínculo entre ellas, en pocas palabras si una muere, la otra también...pero Dalisha...logró romperlo y cayó en un coma inducido...es díficil saber cuando despertara...quiza tarde dias, meses, años...o incluso no vuelva a despertar nunca- Sus palabras me dejaron helado, si ella jamas volvia a despertar se llevaría consigo todo lo que le pertenecía, mi amor, mi cariño, mi alma y mi cuerpo. Me deje caer en un sillon que estaba cerca aun shockeado por la sorpresa y la desesperación.

-Con su permiso alpha me retiró, debo atender otros paciente.

-S...si gracias...-Cubrí mi rostro con ambas manos empezando a sollozar, mi padre siempre me habia dicho que los hombres no lloraban, que eran fuertes, pero esta vez yo no me iba a guardar ninguna lágrima, queria sacar todo este peso que traía en mi alma y llorar a grandes gotas. La había salvado a ella y a mi familia pero de que servia si estaba tan cerca y tan lejos de ella a la vez, tome su mano entre las mías, se sentía helada como un trozo de hielo y estaba palída, la deposité nuevamente a su lado con suavidad, y pose mi cabeza a su lado, esperando un milagro, esperando que a la mañana siguiente estuviera bien, que me despertará con una caricia o un mimo en mis cabellos, que me sonriera, que me dijera que me amaba. Solo rogando porque la Diosa luna no se la llevara lejos de mi lado, no queria estar lejos de ella nunca más.




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