La Luna de mi manada

Capitulo 30 -El hijo del beta- Especial de San Valentin-

Narra Dalisha

Han pasado algunos meses ya desde mi reconciliación con Alex, todo ha vuelto a una relativa calma en mi vida, pero hay un evento que todavía me quita el sueño, si...La boda de mi mejor amiga con el beta de Alex, según lo que el me han explicado una vez que Zoe pase a ser la esposa de Dimitri se convertirá en la dama de la Luna, mi mano derecha en pocas palabras, estaba nerviosa pero no tanto como mi mejor amiga que estaba mordiendose las uñas mientras veia todo un desfile de vestidos de novia mientras yo estaba suspirando.

-Dalisha que dices de este?- dijo mostrándome un bello ejemplar de seda con brillantes en la falda.

-Esta bien...aunque podría apreciarlo mejor si te lo probaras.

-No lo se...no termina de convencerme- Ahora entiendo lo que sienten los hombres cuando nos acompañan a comprar ropa.

-No le des tantas vueltas de cualquier manera solo lo usarás una vez.

-Es que no lo entiendes!! ese día es especial para mi, voy a casarme con mi mate...y quiero lucir bella para el- Eso me dio mucha ternura y me acerqué a abrazarla.

-No necesitas lucir bella....ya lo eres y creéme, el te va a adorar sea como sea con cualquier vestido que luzcas- Ella sonrió y corrió a los probadores para lucir ese vestido, Zoe y yo desde que nos conocimos habiamos estado fantaseando con ese mágico dia, apostando para ver quien de las dos se casaba primero e imginando a nuestros futuros esposos, habría sido perfecto si no fuera por el hecho de que el sobreprotector de Dimitri habia mandado a dos lobos guardianes para cuidarnos, cuando se lo dije a Alex solo me respondió:

-Se que es un poco exagerado pero es entendible, Dimitri y yo debemos ir a los limites de la manada para arreglar un problema con los rogues, no podremos cuidar de ustedes.

-Sabes que no lo necesitamos, ambas somos fuertes y...

-Amor, Zoe esta embarazada y a estas alturas ya no es un secreto que tu eres mi mate, si los enemigos llegan a enterarse de que estoy fuera aprovecharan para lastimarte a ti y a Zoe, tu sabes que el punto débil de un lobo es su mate y si algo te pasara jamas me lo perdonaria- Él besó mis manos y era  imposible no derretirme ante esta muestra de amor tan puro, asi que ahora tenía a dos guardaespaldas vigilando la entrada de la tienda de vestidos mientras Zoe se probaba algunos , y hubiéramos estado asi toda la tarde si no fuera porque mi amiga salió del vestidos pálida, al verla así me alarmé y me acerqué a ver que tenía, ella regresó a verme con sus ojos muy abiertos.

-D...Dalisha...se me rompió la fuente...

QUE!? pero si aun no te tocaba!!!!

-Duele mucho!!! Ya va a nacer!!!- Los guardias inmediatamente entraron mientras yo llamaba a una ambulancia y la que atendía también trataba de ayudarnos como podía, tomé mi celular y torpemente llamé a Alex.

-Mi amor que sucede?.

-Zoe...Zoe esta...esta..

-Que...que tiene Zoe!!?

-Su bebe ya va a nacer!!!!- Escuché como de repente colgó, no le tome tanta importancia, tomé a Zoe del brazo guiandola afuera de la tienda mientras los guardias iban detrás de nosotros, buscamos con la mirada a la ambulancia pero no había señales de ella, me estaba desesperando pues Zoe sollozaba de dolor.

-Es todo...nos iremos aunque sea en auto- Me giré para preguntar si alguno de ellos traía auto consigo hasta que un lobo joven alzó su mano le pedí que nos guiara y luego subimos a una camioneta plateada, ambos iban adelante mientras yo apretaba la mano de Zoe para que respirara, estaba nerviosa y rogaba en lo fondo de mi alma que Dimitri y Alex estuvieran viniendo pronto, llegámos al hospital del centro bastante rápido mientras bajaba y pedía ayuda a algunas enfermeras quienes al ver a Zoe en ese estado se movieron prontamente, iba detrás de ellas cuando me lo prohibieron hasta cierta área.

-Lo siento Luna pero no puede acompañarnos, unicamente el padre del bebé puede venir...

-E...Esta bien entiendo...gracias- Vi como mi amiga desaparecía en una camilla hasta una sala de parto quedandome preocupada, estaba tan metida en mis pensamientos que no sentí cuando Alex me abrazó por la espalda, Dimitri venía tan pálido que lo hubiera envidiado un vampiro.

-Donde esta Zoe?!!

-Acaban de llevársela a la sala de parto.

-Pero...como es posible, aún le faltaban 2 semanas...

-Estará bien Dimitri...Zoe es una loba fuerte- No era mentira, mi amiga ya había pasado por cosas peores, estuvimos toda la noche y parte de la madrugada esperando alguna noticia, Alex me había dado su chamarra para que no tuviera frío y Dimitri ya se había bebido 4 tazas de café, una doctora salió.

-Esposo o padres de la señorita Zoe LeBlanc?-Dimitri se levantó como movido por un resorte y se acercó a ella.

-S...soy su esposo...como esta mi Zoe?

-Felicidades señor Dimitri, es un niño..Puede pasar a verla cuando guste.

-G..Gracias..-Dimitri entró seguido por mi y por Alex, Zoe estaba cansada pero sonreia mientras arrullaba un pequeño bulto que lloraba, Dimitri suspiró al verla sana y salva, la tomó de las mejillas y besó su frente.

-Siento haber llegado tarde cariño..lo hiciste bien...dejame ver a nuestro hijo-Ella corrió un poco las mantas, y ahí estaba el niño mas hermoso que jamás antes había visto, estaba dormido y tenía el cabello rubio de su madre, era tan parecido a ella, Dimitri soltó unas cuantas lágrimas de felicidad mientras besaba la nariz de botón de su hijo.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.