La luz de Lamia

Capitulo 1



































 

La angustia se ha arraigado a todo mi ser, manteniendo congelado a mi cuerpo como un cruel enemigo. Mi valor se ha esfumado por completo y a cambio ha sido el pánico el que ha hecho su cruel presencia para atormentarme. Es desesperante, no logro reaccionar, y, aunque lo intento, no puedo hacer nada para liberarme de este extraño aprisionamiento que me tiene envuelto de pies a cabeza. Lo único que se me es permitido hacer, dentro de este estado de shock, es mirar con preocupación al desastre que se ha desatado frente a mí...

<<Voy a morir.

Voy... a morir.>>

Trato, con la poca fuerza que me ha quedado, de forzar alguna acción, pero mi cuerpo no responde a las demandas de mi alarmada cabeza. No puedo moverme aún, no lo entiendo...

¿Qué me ocurre?

Quizá se trate del terror que me invade en este momento, quizá sea este el que no me permite acceder al control total de mí, y, de pronto comienzo a sentirme terriblemente impotente.

Mis manos no dejan de temblar y hormiguear. Se aferran y se encajan a los costados de mí, sobre el material de mis pantalones. Intento respirar profundo para tratar de calmar un poco a la ansiedad que me consume, pero no es suficiente con eso. Dios...

¡¿Por qué no puedo activarme?! ¡¿Por qué nada de mí parece funcionar?!

Mis ojos se mueven hacia todos lados en busca de alguna salida, pues estoy cegado por la gran nube de humo que ha llenado a toda la estancia.

Maldita sea...

<<¿Dónde estoy?>>

Me siento ajeno al indagar más en mi alrededor. Todo es extraño, todo es diferente aquí, yo mismo me siento diferente, cómo si no perteneciera aquí. No logro reconocer ningún rincón, pero de alguna manera..., siento que ya he estado en este lugar.

Hay algo que se siente incorrecto en el ambiente. El anticuado aspecto del lugar me hace dudar incluso de la época en la que pudiese estar. Lo sé, suena descabellado, pero ahora mismo no logro entender lo que pasa aquí.

De pronto mi inspección es interrumpida por un nuevo alboroto, mis ojos dejan de mirar el caos y rápidamente vuelvo al aquí cuando soy capaz de escuchar cómo la madera del suelo empieza a crujir. Todo dentro de mí se activa al ver que las llamas están comenzando a hacer sus destrozos muy cerca de donde estoy.  Trato de accionar rápidamente cuando me percato de que estoy a punto de quedar atrapado por ese infierno arrasador, pero la cobardía no me lo permite del todo. Aún no caigo en cuenta de lo que está ocurriendo, aún no entiendo cómo demonios terminé aquí...

<<¡Muévete ahora!, ¡tienes que moverte ahora!

¡Reacciona, reacciona!>>

Las llamas están llegando rápidamente a mí, destruyendo todo lo que encuentran a su paso. En pocos segundos soy capaz de percibir cómo su calor empieza a rozar y a raspar mi rostro, y el humo de inmediato a sofocarme. No encuentro ninguna forma de salir, ni siquiera puedo ver nada, el humo se ha expandido por todos lados. Estoy por idear un nuevo plan de escape cuando de pronto..., los lamentos de un bebé es lo que comienzo a escuchar.

Oh mierda...

Sí, es un bebé. ¡Es un maldito bebé! ¡¿Cómo es posible?! ¡¿Qué demonios hace aquí?!

Me muevo sin saber qué hacer, el lloriqueo del niño no se ha detenido. Se escucha por todos lados ahora. Eso sólo logra ponerme mas nervioso y desesperado de lo que ya me encuentro en este momento.  No logro encontrar la fuente del ruido, pero sospecho que ha de estar en una de las habitaciones del fondo.

El lamento se detiene de pronto, estoy a punto de creer que lo he alucinado pero todas esas ideas se van al caño cuando vuelvo a escucharlo, más fuerte y más cerca.

<<Mierda... ¡De verdad es un bebé! ¡¿Qué hago?! ¡¿Qué hago?!>>

Grita mi cabeza y el terror y la impotencia aumentan otro poco dentro de mí, provocando que el latir de mi corazón se acelere. Viene de las últimas habitaciones, estoy seguro. ¡¿Cómo mierda llego ahí?!

<<No puedo dejarlo ahí...

No puedo dejarlo...>>

Antes de animarme para ir en busca de ese pequeño, trato de armarme de valor y alejar todo pensamiento de catástrofe de mi cabeza, pero incluso me cuesta mantenerme de pie...

<<¡Tengo que hacerlo!, ¡debo intentarlo!>>

Tomo una gran bocanada del poco aire limpio que deja el creciente humal y me dirijo decidido hasta el pasillo donde se encuentra la habitación por donde, supongo, proviene el ruido de sus lamentos, pero una parte del techo de la casa comienza a caer en pedazos cuando llego ahí. Intento evadirlo pero este sigue mi transcurso. Corro hacia un costado para esquivarlo pero el derrumbe de la madera continúa por toda la casa. Siento que de un momento a otro el techo me aprisionará por completo, pero no me detengo y corro a toda prisa hasta ese pasillo, ahora hay una maldita barrera de fuego obstruyendolo.

<<¡Mierda, mierda, mierda!>>

Tengo que llegar ahí, tengo que hacer algo por ese bebé. ¡Tengo que hacerlo!

<<Puedes hacerlo Chris. ¡Vamos!>>

Respiro profundo una vez mas, tomo un poco de vuelo y después..., lo hago.

Mis piernas se impulsan con fuerza hasta arrojarme hacia el otro lado y, de un segundo a otro, logro atravesar la gran barrera de fuego sin ningún problema. Caigo sobre mi hombro pero el golpe no ha sido brusco, sorprendentemente no. Ni siquiera lo sentí.

¿Qué rayos...?

Estoy por fin al otro lado, trato de levantarme rápido y después comienzo a caminar hacia esa habitación, sintiendo cómo las ansias y la angustia se cuelan en todo mi ser. He encontrado la fuente al fin, los lamentos detrás de la puerta suenan desgarradores y más angustiosos que antes. Sin pensarlo un segundo más... giro la perilla con un poco de temblor en mis manos, pero al entrar...



#121 en Paranormal
#444 en Thriller
#205 en Misterio

En el texto hay: misterio, demonios, amor

Editado: 15.03.2023

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.