La luz de Lamia

Capitulo 19

Christopher.

—Christopher... ¿Qué fue lo que pasó? Tú no eres de los que se meten en problemas así como así. ¿Qué te llevó a pelear con ese chico, Roy?

Dejé de mirar mi plato y la enfrenté, rendido. Estábamos ambos sentados en el comedor, mi abuela y yo. Ya era la hora de la cena, pero ya esperaba este momento para que ella empezara a cuestionarme por lo que pasó hoy en la escuela. El director me había dicho que le avisaría sobre el incidente con Roy.

—Ese chico estaba molestando a una chica de mi clase de historia, abuela. No pude evitar meterme.

Annie asintió con la cabeza.

— Constans Ziegler, ¿cierto?

Me sorprendió que Annie supiera de eso, y me puse nervioso.

—Sí... Era ella. ¿Cómo sabes?

Annie sonrió ligeramente.

—El director me mencionó quiénes eran los involucrados. Es la chica que tú... a la que tú habías ayudado, ¿verdad? Apenas me enteraron también que la metieron en tu escuela. ¿Por qué no me hablaste de eso?

Me sentí incómodo bajo su mirada curiosa.

—No sé... Es que no lo consideré nada especial o importante — miento.

Pero Annie no parecía convencida. Me miró con una intensidad que me hizo sentir como si estuviera tratando de leer mis pensamientos.

—Christopher... ¿Hay algo que deba saber?

Me puse aún más nervioso, sintiendo que Annie había notado algo que yo no quería que notara.

—No, Annie. Nada especial. Solo que me preocupó lo que pasó hoy con ella, eso es todo. Últimamente los chicos la molestan mucho, pero hoy llegaron a un extremo por eso.

Annie asintió con la cabeza, pero pude ver la curiosidad en sus ojos. Sabía que no me creía del todo, y que quería saber más sobre mi relación con ella.

— El director me dijo que Roy resultó herido en la pelea. ¿Qué pasó exactamente?

Me encogí de hombros, tratando de restar importancia al asunto.

—No sé... Yo... No fue como esa vez.

La escuché suspirar.

— No mencioné nada de eso, Chris.

— Lo sé, pero igual quiero aclararlo— me apresuré en explicar. Ella ahora me veía, lastimosa. No lo iba a admitir, pero sabia que se sentía preocupada por lo que ya había pasado con David antes—. Annie... Solo reaccioné. No podía permitir que se metieran con ella así.

Ella sólo desvió la mirada por un momento. Sus ojos verdes lucían preocupados, además de cansados.

—Entiendo. Pero hay algo más, ¿verdad? Pareces muy aferrado a cuidar de esa chica. Es muy noble que quieras protegerla, pero me parece extraño.

Tragué grueso, y a pesar de que eso me había afectado, mantuve su mirada.

—No, abuela... no hay nada. Es sólo que no me gusta que se metan con los demás.

Annie me miró con una sonrisa suave, pero sus ojos parecían estar buscando algo más.

Continuamos la cena en silencio, con Annie mirándome con una intensidad que me hacía sentir incómodo. Sabía que no podía engañarla, porque ella me conocía demasiado bien. Era una de las pocas personas que sabía leer mis emociones y mis pensamientos.

Annie sonrió suavemente y me puso una mano en el brazo, devolviendome al aquí.

—Me alegra que estés haciendo más amigos, Christopher. Solo ten cuidado, ¿de acuerdo? No conozco a esa chica, pero confío en ti. Si crees que es alguien bueno y merece que hagas estas cosas por ella, entonces debe ser una buena persona.

Me miró con una mirada cálida y alentadora.

—Me siento un poco tranquila de que estés interesándote por las personas. Has sido siempre un poco solitario, y me preocupa que te encierres en ti mismo. Pero si esta chica te insta a todo eso, entonces estoy dispuesta a cofiar en lo que sea que tengan.

— Sólo... somos compañeros.

— Lo que sea. ¿Bien?

Me sonrió de nuevo, y pude ver en sus ojos que estaba genuinamente feliz por mí.

—Solo sé tú mismo. Si ella es alguien que vale la pena, entonces se dará cuenta de lo especial que eres. Y si no... bueno, entonces no es alguien que valga la pena.

Me sentí aliviado y agradecido por las palabras de Annie. Me estaba dando su bendición para que me acercara a Constans. Me di cuenta de que Annie estaba tratando de decirme algo más, algo que iba más allá de la amistad. Me estaba dando permiso para explorar mis sentimientos hacia Constans, y me estaba diciendo que confiaba en mí para tomar las decisiones correctas.

Annie sonrió finalmente y dijo:
—Bueno, Christopher, creo que es hora de hablar sobre tu castigo. Debido a tu comportamiento en la escuela, tendrás que hacer más deberes en la casa y en la tienda.

Me preocupé un poco al escuchar eso, pero luego pregunté:—¿No me castigarás unos días sin salir o algo así?

Annie me miró con una sonrisa suave.

—No. Creo que hacer más deberes es un castigo suficiente. Además necesito que mañana vayas a Manhattan por unas cosas.

Me sentí aliviado al escuchar que no me estaba castigando sin salir, ya que tenía una especie de cita con Constans para mañana. Ella había prometido venir a verme para tratar de descubrir qué había pasado con Roy, y yo estaba ansioso por verla y hablar con ella. Algo en mí estaba empezando a sentirse atraído hacia ella, y no podía negar que estaba ansioso por verla de nuevo, aunque toda esta situación ya se haya vuelto tan extraña.

Asentí con la cabeza, aceptando el castigo.

— Está bien, Annie.

Finalmente Annie me dió una lista de cosas que necesitaba que comprara mañana en la ciudad.

~*~

Sentado en mi escritorio, me encontraba rodeado de las paredes familiares de mi habitación. La oscuridad del azul de las paredes parecía absorberme, pero los posters y pancartas de mis bandas favoritas me recordaban que todavía había algo de luz dentro de mi extraña vida. O al menos en mi habitación sí.

Mi mirada se perdió en el vacío, mientras mi mente trataba de procesar todo lo que había pasado este día. Lo que pasó con Roy, la forma en la que él salió herido... por mí, o por lo que sea que emanó de mí. El regaño del director, la suspensión, lo que hizo Constans para defenderme de lo que pasó, la discusión que había tenido con ella antes, la extraña reacción que tuvo Marcus cuando nos vió juntos a ella y a mí, y el cómo él huyó después. Lo que pasó con esa chica Jess cuando llegamos a casa de Constans y finalmente la platica con mi abuela...



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En el texto hay: misterio, demonios, amor

Editado: 31.05.2025

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