Eso era algo a lo que me iba a tardar en acostumbrarme, poder pedir lo que quería y que hicieran las cosas por mi. Había alguien que lavara mi ropa, que limpiara mi habitación.
¿Esto es real?
Si, es real, y deberías acostumbrarte.
Para eso necesito al menos un día, o semanas.
—Esta bien.
—Ok, veamos las escuelas y después empiezas a ver lo de la ropa con Berta.
Salimos y bajamos las escaleras, Sebastián abre la puerta de su oficina y los tres entramos.
Empezamos a mirar las imágenes y termino por escoger una que apoya tanto al arte como a los deportes que es por el que me decido, Esteban y Jessica quedan mas que felices ya que al parecer el sobrino de esta va allí.
Sebastián hace un par de llamadas y nos consigue cita para mañana, nos harán el examen a Sara y a mi y según eso estaríamos dentro de la escuela y en los niveles a los que pertenecemos.
—¿Te parece si las ayudo con la ropa? —me pregunta Jessica.
—Si, por favor. Creo que serás de mucha ayuda a la hora de escojer donde debe ir cada cosa. Tienes más experiencia que yo en esto.
Cuando llegamos a mi habitación y entramos al vestidor, bueno no podemos entrar, nos quedamos en la puerta, el piso está lleno, y cuando digo lleno es que no podemosnponer un pie dentro sin pisar alguba de las bolsas o cajas.
—Ok, creoqbue nos pasamos un poco. —dice Jessica un poco avergonzada.
—Buenas noches señoritas.
—Buenas noches Berta.
—Señorita Victoria, ¿Por dónde desea iniciar?
—¿Por qué me llames Victoria, sin el “señorita”? —pregunti algo tímida.
—No creo eso posible señorita.
Hago una pequeña mueca pero la hago desaparecer.
—Bien, entonces empecemos por sacar todo del vestidor para que podamos entrar y vamos escogiendo bolsas.
—Muy bien.
Empezamos a hacerlo y en diez minutos hemos terminado, estando dentro me fijo detenidamente en el mueble que hay, Jessica se sienta y da un pequeño asentimiento.
—Empieza a escoger bolsas.
Y eso es lo que hago, tomo la bolsa más cercana y la llevo adentro, es bastante grande.
—Ok, en marcha señoritas. —las empezamos a sacar desde vestidos, blusas, tops, camisetas, pantalones y un par de faldas.
Empezamos a ver la distribución del armario y decidimos usar la percha más alta para los vestidos ya que hay algunos largos. En una que tiene cajones debajo ponemos lo que son faldas y un par de pantalones. Salgo por la siguiente bolsa que es más de lo mismo, la siguiente son zapatos, que si tienen un lugar esoecifico en ek armario. Vuelvo por otra que es ropa más deportiva, Jessica me dijo que debíamos comprar algunas ya que en deportes y la normal asignatura de “educación física” las necesitaría.
Y las vas a necesitar.
Pues si, es verdad.
Escojo un par de cajones, dónde la guardamos doblada, aunque en si quien se encarga de doblar todo es Berta, quien no nos lo permite, lo único que hacemos es poner lo de las perchas. Salgo y vuelvo con una que está llena de ropa interior.
—Las meteré a la lavadora y te las traeré en un rato.
—Si, es lo mejor, gracias Berta. —le dice Jessica.
Berta sale y me quedo un poco pensativa.
—¿Rato? ¿No tardará en secarse? —hago la pregunta que no dejaba de rondar en mi cabeza.
—Secadora —dice Jessica mientras sale y vuelve con otra bolsa.
Sacamos lo que son medias y le quitamos las etiquetas, las guardo en uno de los cajones más pequeños.
En la siguiente hay cajas con perfumes y cremas para el cuerpo que Jessica me recomendó, fragancias mas suaves, y algunas más “provocativas” por su en algún momento las requiero.
—Y… ¿Te gustaría tener novio, o novia? No te juzgare —su pregunta demuestra que le encanta el chisme.
—A ver, primero, me gustan los chicos, segundo, creo que para ello necesito coner a alguien que me merezca. No busco que el primer chico que me pase por delante me rompa el corazón.
—Victoria…
—Puedes decirme Vic.
—Vic, hay miles de chicos que te van a querer seducir en esta escuela, muchos solo van a querer echar un polvo contigo, otros tal vez solo quieran presumir que están con una chica tan hermosa como tú, otros van a querer que estés con ellos porque tw fueron conociendo y se enamoraron de ti. Debes saber cuales pertenecen a cada grupo, llegas una semana después de que las clases iniciarán así que todos los ojos van a estar sobre ti, todos van a tomar bandos, y debes dicernir sobre cual de ellos te quieren con ellos porque les caiste bien. Y cuáles te quieren con ellos para hacerte pasar un mal rato.
—En mi antigua escuela no tenía un grupo de amigos, en realidad casi nadie tenía amigos, todos estábamos en un tipo de guerra infinita, todos estaban con los otros por una razón, porque el podía obtener algo que los otros no, y los que no tenían nada no tenían a nadie tampoco, si yo llegara mañana a ese colegio, con una sola de estás prendas, todos. Todos se avalanzarian sobre mi, y no en buen sentido.