Capitulo 40

Jackson Romanov

Sam entra en mi oficina sin tocar como si está fuera zona común que todo el mundo puede entrar sin permiso previo alguno.

—¿Por qué no toc...?

—Tengo el indicado.—Dice y se me olvida por qué le iba a reclamar.

Me levanto rápidamente y ambos salimos deprisa de la mansión, pero antes de subir a los autos me detengo.

—Hace treinta minutos le dije a Melany que viniera.— le digo cayendo en cuenta.

Busco a Nick por el alrededor y lo encuentro dando órdenes a unos hombres. Lo llamo y viene inmediatamente a donde estoy.

—¿Qué sucede?— pregunta.

—Necesito que distraigas a Melany, mientras voy con Sam a un lugar.—Nos mira algo raro.

—¿Durarán mucho? No quiero que Melany se enoje y me corte la cabeza.

—Volveremos pronto.— responde Sam.

—Bien. Pero si tardan y Melany me decapita, les jalaré los pies en la noche cuando duerman.—Sam y yo reímos.

Salimos rápido de la Mansión antes de que llegue, ya que si nos encuentra no nos dejará salir.

Sam me pasa la ubicación y ambos aceleramos para hacer las cosas de la manera más rápida posible.

Nick James

Espero y Sam y Jackson no hagan una estupidez y lleguen pronto, pero que quede claro que no le temo a Melany.

Claro que no.

—Nick, la mujer del Jefe, acaba de llegar.— me informa Jefferson, uno de mis hombres.

Ya llego.

Solo voy a distraerla un tiempo, ¿Qué puede salir mal?

Sabes bien lo que puede salir mal.

Me grita mi subconsciente.

—Bien, díganle que me espere en la sala de recreación.— ordeno y de inmediato cumple la orden.

¿Con qué la distraeré?

Cuéntale un chisme.

Amo a mi subconsciente. Melany aún no se entera sobre lo del embarazo falso de Kate.

Espero y sea suficiente para poder distraerla.

Voy a donde debería estar Melany, en el camino, voy pensando en como distraerla bien con el supuesto chisme, porque si llega a sospechar lo más mínimo, no solo yo estaré en problemas, sino también Sam y Jackson.

Antes de abrir la puerta, respiro para darle una vibras de que todo está bien y que su novio no salió con su mano derecha a hacer, sabrá Dios que, sin que ella conociera su paradero.

—Hola, Mely, ¿cómo estás?— digo al verla sentada en uno de los sillones, también tomo asiento en frente de ella.

—Hola, bien, ¿y tú?— dice relajada.

—Todo bien.— simplifico.

—¿Y Jackson? Me escribió hace un rato para que viniera.

Empezamos mal.

—¿Jackson? Mmm... Se presentó algo de último momento, pero vuelve pronto.

—Está bien. ¿Y Sam? Me dijo que estaría aquí contigo y no lo veo por ningún lado.

¡Maldito Sam Lanssere!

No solo les basto con dejarme el trabajo de distraerla para que no descubra lo que hacen. Esta me la pagas Sam.

¿Qué le respondo? Si le miento de nuevo va a comenzar a sospechar, luego me hará decirle la verdad, ira a buscar a los chicos y los matara por mentirle y luego me matará a mí por encubrirlos.

—Estaba hace poco conmigo, pero tuvo que salir a resolver algo.—trato de sonar natural.

—Qué extraño, ya que no me dijo nada.— comienza a sospechar.

—Talvez no quería alarmarte.— la miro para que confíe en lo que digo.— pero ya no hablemos de eso... Tengo algo que contarte.

—¿De qué se trata? ¿Ahora eres informante?— alza una ceja sonriendo.

—¿Qué? Claro que no, sabes bien que no me gusta el chisme.—ambos nos miramos y luego reímos.— Bueno, el punto es que cuando estabas... Ya sabes... Muriendo... hablando con los espíritus y con San pedro... y...

—Sí, ya entendí, continua.

—Sabes que como buen fan o más bien como fan número uno de su relación, quiero que estén juntos sin problemas de por medio, con lo de Kate.

—Cierto, se me había olvidado el embarazo de Kate, por cierto ¿Dónde está? No le he visto durante un tiempo.

—A eso voy. Bueno, sucede que todo lo de su show de embarazo fue falso.— veo como su boca se abre ligeramente.— Sí, nos engañó a todos, Jackson la tiene vigilada y aislada de todos.

—¿Por qué nadie me había dicho de esto?— dice confundida.

—Para eso estoy yo, cuñada.— cruzo mis piernas.

—El menos chismoso de los imperios.— ríe.

—Diría que me ofende, pero realmente no.

— Me sorprende, nunca pensé que haría un embarazo falso solo para estar con Jackson, aunque en el fondo agradezco que haya sido falso, no estaba dispuesta a dejar a Jackson.

Y aquí es donde mi plan comienza a funcionar, ya está dentro del chisme, seguro que ni recuerda que los chicos están ocultando algo.

—Es obvio que no lo ibas a dejar, además si era real Jackson no iba a estar dispuesto a dejarte, si no mal recuerdo me dijo que a pesar de todo lo que crecía en Kate iba a ser bastardo de la mafia, ya que no estaba casado con ella entonces solo le iba a cubrir los gastos e iba a intentar continuar contigo.

Me mira con confusión.

—Al parecer el idiota sí me quiere.

¿Es en serio lo que dijo?

De verdad que no entiendo a las mujeres.

—Como puedes poner eso en duda si ese hombre ha hecho de todo por ti, o sea reunió a sus hombres de Rusia para salvarte, él sería capaz de renunciar al imperio por ti, te juro que si le pides que se arranque el corazón y te lo entregue lo hace.

¿Qué necesita para ver que el idiota de mi jefe está loco por ella?

—Lo sé, pero aún se me es difícil entender que alguien por fin me ama, me he pasado la vida entera llena de personas que solo quieren beneficios, se me es difícil pensar que algo le sale de manera natural.

—Entiendo sé que...

La puerta se abre y entran Sam y Jackson. Melany y yo alzamos la ceja al verlos interrumpir nuestra sección de chisme.

—¿Se divierten?— pregunta Jackson.

—Ya estábamos terminando.— me giro y me dirijo a mi cuñada.— Seguimos después y recuerda lo que te dije.— le guiño un ojo.