Llegó el dos de mayo y por fin permitieron salir a la calle a los adultos en distintas franjas horarias, comenzaban a ver la luz al final del túnel.
El que más se alegró fue René que cada día, a las siete de la mañana salía primero a trotar y conforme se fue encontrando mejor, empezó a correr, lo había echado mucho de menos. En esos días hablaba con Toni por teléfono, el cual estaba haciendo exactamente lo mismo que él, pero en otra zona de la ciudad.
En cambio, Álex se mostraba reacia a salir y volver a mezclarse con la gente. Cuando le tocaba ir a la compra se preocupaba por qué nadie se le acercara más de lo debido. Era consciente de lo paranoica que se había vuelto con ese tema, sobre todo después de haber pasado la enfermedad, pero de momento prefería no cambiar su rutina.
Una de esas mañanas y después de darse una más que merecida ducha, René fue a buscar a Álex, tenía buenas noticias.
—Me llamaron hace rato del club, en esta semana nos hacen los estudios médicos que hacen falta y me van a revisar para ver en qué punto estoy. Si todo va bien, iniciamos los entrenamientos la semana que entra.
—¡Eso es genial!—se alegraba por él, pero le preocupaba que René estuviera en contacto tan cercano con otras personas—¿Estás contento?
—No te imaginás cuanto—iba a extrañar aquellos meses de encierro junto a Álex, pero necesitaba despejarse y empezar a tener su propio espacio. Sabía que en cualquier momento ella volvería a su casa, las excusas para retenerla a su lado se habían terminado y tenía que ir haciéndose a la idea.
━━━━━━✧❂✧━━━━━━
El mes de mayo voló y aun sabiendo que podía volver a su casa cuando quisiera, seguía sin hacerlo.
René volvió a su rutina de antes de lesionarse con lo cual, no pasaba demasiado tiempo en casa, y cuando lo hacía, estaba demasiado cansado para hacer todas las cosas que en los últimos meses habían compartido con gusto. Como por ejemplo seguir viendo su serie, a la que ya le quedaban pocos capítulos por emitir.
A principios de junio, se reanudó la liga de fútbol en España. René estaba nervioso, volvía a pisar ese campo en el que la última vez que lo hizo, terminó en el hospital.
—¿Estás bien?—Toni como siempre, estaba a su lado y vio como René miraba a todas partes con gesto serio.
—Sí…estoy bien. Se me hace tan extraño ver la cancha vacía…
—La nueva normalidad, así lo llaman… Será temporal, pronto volverán los cánticos, las banderas y todas esas personas que nos apoyan tanto. Por cierto, tengo algo para ti.
—¿Tiene que ser ahora? No queda nada para saltar a la cancha…
—Ten, siempre fue tuyo. Traté de estar a la altura las pocas veces que tuve que usarlo… ¡Bienvenido de vuelta, capitán!—Toni le devolvió el brazalete que siempre había sido de René hasta que se lesionó—Te ayudo a ponértelo—el chico se lo colocó en el brazo izquierdo y pasó su palma sobre él.
—Gracias amigo—se dieron un rápido abrazo—¡Vamos muchachos, que esto comienza ya!
Todos se vinieron arriba, tenían muchas ganas de hacer rodar el balón después de tanto tiempo.
—Escucha René—el entrenador se acercó hasta él—Estás más que listo para volver a jugar, pero si notas cualquier cosa, por mínima que sea, me lo dices y te cambio. No quiero que te vuelvas a lesionar por hacerte el héroe ¿De acuerdo?
—Está bien, lo haré—fue el primero en salir rumbo al túnel de vestuarios que los llevaría hasta el silencioso campo, por fin había acabado su ansiada espera.
Llevaba meses trabajando duro para llegar a ese momento, todo saldría bien, todos le tenían fe… Todo estaba a su favor para volver a ser el que fue. Respiró hondo y saltó al campo con paso decidido «Que comience el juego» Se dijo a sí mismo para darse ánimos.
━━━━━━✧❂✧━━━━━━
Mientras tanto en casa Álex se preparaba para ver el partido junto a Bea, a la que tenía al teléfono para que se le hiciese más ameno ya que, a pesar de su pasado, ella no había sido nunca de fútbol.
—¿Estás preparada para sufrir? Ya te digo yo que da igual cuantos partidos haya visto en todo este tiempo, lo paso fatal por Toni.
—No es lo mismo, Toni es tu amorcito y sufres por si le hacen daño. Yo sólo quiero ver a René para saber si todo va bien. Estos meses han sido muy duros para él, teme no poder ser el de antes.
—Uy… ¿Y ese tonito que se te ha puesto al hablar de él?—Bea por más que le dijera su amiga, seguía teniendo sospechas de la relación entre ellos.
—A mí no se me ha puesto ningún tonito. Te estoy explicando la razón por la que me voy a tragar este partido ¿Está mal que me preocupe por un amigo?—agradecía que Bea no pudiera verla, se había sonrojado sin querer.
—Oh sí, por supuesto… ¿Piensas que nací ayer Álex?
—No ¿Por qué?
—¿Se supone que me tengo que creer que habéis estado completamente solos durante meses y que no ha habido nada entre vosotros? ¡Ja!
—No lo ha habido, pero tú puedes pensar lo que quieras, sé que no te voy a convencer de nada.
—Álex cariño… ¿Eres tonta? ¿Por qué no habéis aprovechado tanto tiempo sin que nadie os molestara? No te digo que lo conviertas en el amor de tu vida, pero un revolcón esporádico no se le niega a nadie. Creo que podrías pasártelo bastante bien con René…