Capitulo 20

Melody Hall:

Quizá si el señorito se hubiera apurado para despertar yo no estaría en esta situación, maquillándome de forma rápida y dejándome el cabello suelto.
Había pensado en un peinado recogido y un maquillaje lindo, pero no, Adam se durmió y nos agarró la tarde.

Y no es que yo me pueda maquillar mucho, pero algo era algo, lo que sabía lo había aprendido en vídeos de YouTube.

Me veo al espejo y no me veo tan mal, el vestido azul me quedaba muy bien. Para mí fue el indicado para una vida en la playa es azul claro, un poco ajustado de la cintura, pero suelto y una abertura que me llegaba a los muslos.

Salgo de la habitación buscando a Adam, lo encuentro en el pasillo ya listo con traje y el cabello perfectamente peinado hacia atrás. Aunque en el era lo normal verlo así.

—Te ves linda —comenta y me sonríe.

No dirigimos hacia la parte de atrás del hotel donde están todos los invitados, camino tomando el brazo de Adam para no seguirme doblando el pie con los tacones, digamos que no estaba acostumbrada a usarlos.

—Melody, espérame aquí voy a ir a ocuparme de algo para ayudar a Uriel —dice y asiento.

¡No me quiero quedar sola!

Me quedo parada sin saber que hacer, le sonrió a varias personas que pasan por mi lado, aunque no conozco a ninguna de ellas.

Vaya, si que se siente feo estar solo y rodeado de gente! ¿Qué? Eso ni siquiera tiene sentido, bueno para mi sí.

Volteo al sentirme observada y me encuentro con la persona menos esperada.

¡Connor! Frunzo él ceño confundida ¿Qué hace aquí? Él me sonríe, yo lo saludo con la mano y él me devuelve el gesto.

Lo veo conversar con su grupo de amigos, de donde reconozco a Camily y Ethan, quien también van vestidos para la ocasión, pero por la distancia no puedo detallarlos bien. Solo veo que el vestido de Camily es de color rosa pálido.

¿Seria raro que me dirija hacia ellos? Supongo que sí ¿no? Prácticamente soy una desconocida para ellos .

Salgo de mis pensamientos al ver a Connor parado junto a una chica rubia, que es hermosa por cierto; la chica le sonríe demasiado y coquetea con él.

¿Por que deja que alguien más le coquetee? Dijo que me amaba a mi ¿no? ¡¿Entonces?! Ladeo la cabeza ¿Será su novia? Siento que mi pecho se oprime ante este pensamiento.

Frunzo el ceño confundida ¡¿Qué me pasa?! ¡El puede estar con quien quiera!
¿Por que habría de importarme?

Volteo hacia él nuevamente, quien me observaba con una breve sonrisa.

¡Hijo de.... su mamá! Coquetea con alguien mientras me observaba.

Alguien me rodea por la cintura sacándome de mis pensamientos, volteo rápidamente y veo a Daen sonriendo, me es inevitable no sonreír y devolverle el abrazo, al separarnos un saltito emocionada y vuelvo a abrazarlo dándole un beso en la mejilla.

—Te extrañe mucho —digo abrazándolo con fuerza

—También te extrañé fea —dice devolviéndome el abrazo.

—¿Fea? Feo tú ¿Ya me viste? Me veo fabulosa —digo señalándome.

—Si te ves genial —admite —¿Pero ya me viste a mi ? Si con ropa normal soy hermoso, con traje soy otro nivel —alardea.

Observo a Daen quien lleva un traje negro, que contrastaba a la perfección con su piel, al igual que su cabello, me sorprende que lo lleve peinado pues siempre lo lleva desordenado, es verdad que se ve genial, pero no voy a admitirlo.

—Qué egocéntrico eres —reclamo

—No soy egocéntrico, solo soy perfecto —dice guiñándome un ojo, yo río, es imposible tratar con Daen.

—Cuanta humildad —comento y este sonríe divertido tirando levemente de mi brazo para acercarme más a él y abrazarme nuevamente.

—¿Y Adam? —cuestiona viendo hacia los lados

—No se —me encoje de hombros -seguro esta llorando porque su novio se casa hoy -bromeo, Daen asiente riendo.

—Yo en realidad pensé que ellos eran pareja —dice divertido. —es que todo el tiempo pasan juntos.

Eso era verdad, Daen y Uriel desde que se conocieron siempre pasaron juntos.

—Ya va a comenzar la ceremonia ¿nos vamos? —asiento y tomó su brazo.

—Es que se me dobla el pie con los tacones —explico, el suelta una carcajada.

Antes de irnos veo hacia el lugar donde estaba Connor, pero ahora es ocupado por otras personas.

Durante el pequeño recorrido le cuento a Daen más Mike y Gaby, sobre que hacemos y él cuenta un poco sobre su rutina.

Llegamos al lugar donde se celebrara la boda y todo es hermoso, se ve como mágico, todo está decorado de blanco y dorado y lo mejor es que es frente a la playa.

Nos sentamos en las sillas del medio, recuesto la cabeza sobre el hombro de Daen y esperamos a que la ceremonia comience. Todas sillas se llenan rápidamente y todos estamos expectantes a ver a la novia. Adam está parado junto a Uriel pues el testigo o algo así.

Música comienza a sonar indicando que la novia llegó, volteo al mismo tiempo que todos, la chica camina hacia su novio del brazo del que supongo es su padre.

¿Algún día seré yo la que camine del brazo de mi padre hacia la persona que amo? El matrimonio nunca fue una de mis metas, pero supongo que con la persona ideal sería lindo.

Siguiendo a la novia con la vista me encuentro con la mirada de Connor, quien esta sentado del otro lado, le sonrió y levanto un poco la cabeza en forma de saludo, él me ignora y se voltea hacia enfrente.

¿Y ahora qué le pasa?

Veo hasta que la novia toma el brazo de Uriel y así comienza la ceremonia.
Pongo mi cabeza sobre el hombro de Daen esperando a que termine.

—No se quien llorará primero por la boda, si tú o tu hermano —bromea en voz baja Daen.

—Creo que ambos estamos sufriendo —digo dando una risita —pero sin duda esta más triste Adam —digo riendo bajito

—Si, supongo, después de todo tu ya tienes a tu Romeo psicópata —bromea, pongo los ojos en blanco y vuelvo a concentrarme en la boda.