La Melodía del Beta

Capitulo 24

Connor Blake:

Seguramente estoy en el cielo.

Y eso explicaría el porqué desperté con un angel.

Terminó de comer mi helado y me tiró sobre la cama a esperar que Melody termine de hablar con su hermano. Le dije que la esperaría en mi habitación para cuando termine de hablar con su hermano.

No voy a mentir, si que quiero  escuchar sobre que hablan y como le cuenta sobre mí, pero tampoco quiero parecer un chismoso.

Aunque como diría Jazmín, él chisme da vida.

Lo que aún no entiendo es que tiene que ver el Alpha del Norte con nosotros, pues parecía enojado al entrar a la habitación, comprendo a su hermano, pero no a él.

Es gracioso ver el parecido entre Melody y su hermano, tanto físicamente como en su vocabulario, en la mañana casi comense al reír cuando vi que ambos al estar enojados comienzan a insultar a todo ser viviente.

Revisó mi celular por varios minutos hasta que escucho que alguien toca la puerta, me levanto sonriendo y embriagándome con el delicioso olor a lavanda y flores silvestres, Melody.

—Vaya, señorita —digo como en las películas de época — es muy indecoroso buscar a un caballero en su habitación —digo negando.

Melody coloca su mano sobre el pecho y finge asombrarse.

—Ohhh, es verdad —dice horrorizada —ahora tendrás que pedir mi mano para recuperar mi honor —dice y suelta una carcajada, me río y me hago a un lado para que pase.

—¿Puedo pedir más que la mano? —bromeo siguiéndola y sentarme junto a ella en la cama.

Achica los ojos, pero luego ríe. Su risa es tan melódica.

Cuando pienso que no me seguirá el juego, vuelve hablar.

—¿Qué más querrías además de la mano? —cuestiona con curiosidad y diversión, sonrío tratando de ser seductor.

—Veamos —finjo pensarlo y colocó una mano sobre su rostro —quiero tus labios —colocó el pulgar sobre sus labios haciendo que trague saliva —quiero tus ojos solo para mí, quiero tu piel y sobre todo quiero tu corazón— me sincero haciéndola sonreír, antes de que comience a reír nuevamente.

Auch.

—Per perdón —dice entre risas —es que suena a que querías todos mis órganos, por poco sentí que me dirías que quieres mis pulmones y riñones —trato de mostrarme inexpresivo, pero ver a Melody que casi se orina de la risa no ayuda. —Y más que al principio pensaba que eras un traficante de órganos.

—¿Y cómo te fue? —cuestionó luego de un momento, cambiando de tema.

—Más o menos —responde

—¿Por que?—cuestionó curioso —¿Esta bastante enojado?

—Se me cayó el helado —ruedo los ojos y ella sonríe divertida —con Adam me fue bien, le expliqué lo nuestro y él me contó sobre como había adquirido el puesto de Beta y también se disculpó por su actitud, en resumen fue solo eso —comenta

Es muy raro que un humano se convierta en Beta de una manada.

—Me alegro que todo este bien con tu hermano —digo sonriendo

—Yo también —sonríe —a quien aún no he visto es a Daen —suspira y me abrasa tomandome desprevenido haciendo que deje de respirar un momento, sonrie al ver mi reacción y me deja un beso sobre mi mejilla.

La abrazó con fuerza y me hago para atrás haciendo que ella caiga acostada sobre mi pecho. Nos quedamos así un momento sin decir nada, solo acompañándonos.

En este momento no podría pedir nada más, me siento completo con ella, con mi bella Melody.

—Connor

—¿Si?

—¿Por que se siente así? —cuestiona levantando la cabeza de mi pecho.

—¿Él qué? —pregunto confuso.

—No sé —la veo frunciendo más el ceño — se siente tan bien estar contigo, me siento, no sé como explicarlo ¿Feliz? ¿Llena? 

Sonrió sin poder evitarlo, mi pequeña comienza a enamorarse.

No sé cómo responder a su pregunta, pues si le digo que es amor y que seguramente sea por el lazo que nos une se sentirá presionada o confundida.
Creo que lo mejor es esperar un poco para comentarle todo sobre el mundo sobrenatural.

—Quizá sea porque acabamos de desayunar —digo divertido —Yo también me siento lleno —bromeo

—Es lo más seguro —dice riendo.

Desde que nací, siempre escuché lo maravilloso que es estar junto a tu mate era algo mágico y no lo creía hasta que encontré a Melody.

Al estar así no puedo evitar recordar que ayer fue nuestra primera noche durmiendo juntos, aunque dormí sentado junto a la cama lo que hizo que me doliera la espalda y el cuello al despertar, pero ni aún así me arrepiento, fue una de las mejores noches, nunca pensé que estar junto a ella fuera tan relajante, ayer cuando la llevé a su habitación solo tenía planeado verla dormir unos minutos, no quedarme dormido junto a ella.

Melody es como una droga para mí cada vez que la veo y estoy junto a ella me vuelvo un idiota.
Aunque pensándolo bien, yo nunca me he drogado.

Nos quedamos así un rato, conversando y bromeado, también le devolví el tacón que había dejado la noche anterior sobre la arena.

Salimos de la habitación y nos dirigimos a la cancha de voleibol, donde encontramos a los chicos y al hermano de Melody hablando animadamente.

Que raro, y lo más raro es que uno de los que habla más animado es Ethan.

Maldito, conmigo nunca conversa de esa manera y con un desconocido si, traidor.

—Hey —digo uniendome al grupo

—Hola de nuevo —dice Melody con una sonrisa tímida, lo chicos le devuelven la sonrisa y el saludo.

—Hola hermana —saluda Adam —¿Qué tal estas?

—¿Qué haces aquí? —pregunta extrañada

—¿Aquí? —cuestiona frunciendo el ceño —Aquí hace calor —responde divertido, sacandonos una risa a todos menos a Melody.

—No sabía él era tu hermano —agrega Ashton —no me los imagino como hermanos —dice Ashton divertido

—Pero si son igualitos —alega Camily— son como dos gotas de agua.

Ambos hacen una mueca de asco.

—Hasta sentí un escalofrío al imaginar parecerme a ti —dice Adam divertido




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