Melody Hall:
Ya han pasado las dos semanas que Connor iba a pasar fuera de la ciudad.
Bueno, la semana y media.
Once días fuera de la ciudad y catorce días sin verlo, hasta hoy, creo que nunca había pasado tanto tiempo sin verlo, se siente raro que llegue un sábado y no estar con él.
Pero por fin lo veré hoy.
El martes, quise ir a su casa a sorprenderlo, pero según me dijo Camily iban a llegar muy tarde y no quise molestarlo, seguramente iba a llegar cansado por él viaje.
Hablamos por teléfono algunas veces, pero no es lo mismo.
Al menos descubrí que yo no podría tener una relación a distancia.
También estoy un poco emocionada, pues hoy viajaremos a la manada de no se quien. La verdad, es que no se porque acepté, porque no tenía muchas ganas de ir donde alguien que ni siquiera conozco.
Bueno, al principio acepté porque todos me estaban viendo y me puse nerviosa, pero al pensarlo bien, me pareció como una excursión con amigos; o algo parecido supongo.
Tomó mi celular al escuchar el típico sonido que hace mi celular cuando cae un mensaje.
*Daencito*
>>Diviértete, y si van a hacer algo usen condón >>
>>Y no hables con extraños >>
Ruedo los ojos al leer el mensaje, no se cual de los dos es peor.
<<Idiota, entonces
¿Con quién quieres que hable?
Todos serán extraños >>
<<Y no haremos nada.
Al menos no sexual >>
<<Creo ;)>>
>> :○ >>
Sonrió divertido ante su mensaje, Daen es un idiota.
Agarro la mochila donde llevó mi ropa y cosas personales, pensé en llevar mi maleta, pero como solo serán dos días no lo vi necesario, reviso por última vez que vaya todo y la llevo hacia la sala, donde esperaré a que venga Connor por mí.
Espero en la sala hasta que escucho el timbre sonar sacándome de mis pensamientos.
Abro la puerta con mi corazón latiendo muy rápido; por fin lo vería después de tanto tiempo.
Hoy se ve realmente guapo, va vestido con una chaqueta marrón y una camiseta con cuello, color negro y un jean.
¿Por qué luce tan guapo con algo tan simple?
—Hola—saludo a Connor con una sonrisa, él me devuelve la sonrisa feliz —¿Cómo estas? ¿Qué tal te fue en tu viaje?
—Hola Melody —responde con una sonrisa, me hago a un lado y él se adentra en el departamento pasando por mi lado. —Yo he estado bien ¿y tú? ¿Qué tal ha estado tu semana?
Ya había olvidado lo bien que huele.
Y lo bien que se ve.
Y lo bien que huele.
¡Dios, Melody! Pareces una loca acosadora.
—Y en él viaje me fue bien, lo único fuera de lo normal que pasó fue que una chica rubia me tiró el café encima —comenta haciéndome reaccionar que no había respondido su pregunta — ¿Me extrañaste? Porque yo sí, cada minuto. —sonrió y asiento con lentitud.
¡Qué lindo!
¿Qué me pregunto antes? ¿Qué si que comí?
—Ehh... yo también estoy bien —sonrió nerviosa —y pues comí una la mitad de una hamburguesa en el almuerzo, porque la otra mitad se me cayó al piso cuando la mordí, se le cayó la carne y todo —explico moviendo las manos tratando de explicar.
Un minuto de silencio por mi hamburguesa.
—¿Ahh sí? —pregunta extrañado y divertido a la vez.
—Si, pero ya no pedí otra porque era tarde y me quedé con hambre —comento haciendo una mueca —Y también te extrañe —digo con una risita nerviosa.
Creo que la anécdota de la hamburguesa sobra en esta conversación ¿no?
¿Por qué estoy actuando de esta manera? Parezco una niña de doce la cual está frente al chico que le gusta.
Cierro los ojos con fuerza tratando de calmarme, muy pocas veces he actuado de esa forma y la única persona que presenciaba mi ridículo era Uriel; y eso pasó hace como cinco años.
La risa de Connor me saca de mis pensamientos nuevamente.
—No me escuchaste ¿Cierto? —pregunta divertido, niego avergonzada.
—Perdón, es que estaba sumida en mis pensamientos — respondo él rie nuevamente.
Vaya, alguien anda de buen humor.
—Me di cuenta —agrega divertido — creó que es hora de irnos —dice.
—Claro —digo tomando mi mochila.
—Melody, creo que deberías llevar un abrigo, porque según dijo Camily hace más frío allá —habla, asiento y me me dirijo rápido hacia mi habitación por un abrigo.
Tomo uno largo color marrón y una sudadera extra.
—Lista —avisó llegando a la sala nuevamente —¿Ahora si? —pregunto divertida.
—Te vez hermosa —sonríe viéndome de arriba a bajo, miró al piso sin saber por qué y sonrió —¿Melody? —levanto la vista y lo observo expectante —¿Puedo abrazarte? —cuestiona.
Sonrió divertida y camino hacia él rodeándolo por la cintura. Connor me devuelve el abrazo acercándome más a su cuerpo; cierro los ojos disfrutando del contacto.
Realmente no sé porqué pregunta cada vez que quiere abrazarme, no es como que voy a negarme, a parte ya nos hemos besándose varias veces, suponía que nuestra "relación" ya había avanzado.
—Te extrañe mucho —murmura sobre mi cabello —añoraba la hora de verte.
—También te extrañé Connor —respondo sonriendo sobre su pecho.
El besa mi frente y se separa sonriendo.
—Deberíamos irnos, los demás nos esperan —dice tomando mi mochila, asiento y camino fuera del departamento para colocar seguro.
Camino junto a Connor hasta su coche, él abre mi puerta, permitiéndome ingresar, para luego rodear el auto y entrar en el asiento de conductor.
—Connor —lo llamó, el se voltea hacia mi y me observaba con atención — ¿Por qué siempre que vas a abrazarme me preguntas? —cuestionó curiosa —no es como que vaya a decirte que no.
Él me observaba un momento para luego sonreír.
—Porqué quiero estar seguro que tengo tu consentimiento para hacerlo —responde arrugando un poco la nariz —no quiero parecer tan intenso, porque si por mi fuera no saldrías de mis brazos.